Pimp my ride

Saco las cuentas y no me cuadran, estoy muy ajustado después de un par de años de la más completa flojera, que no son la mejor manera para seguir construyendo la casa o arreglando los autos. Dicho en español me falta plata.

Tengo que buscar algún proyecto de inversión más o menos grande, el año pasado fue un record de fallas, trabajos perdidos y grandes proyectos que no llegaron a nada, me faltarían dedos de la mano para contarlos. No se me ocurre otra cosa aparte de mantener bajos mis gastos y seguir intentando. Como dice en los raspe "siga participando". Pero así es la cosa, igual que el pesacador tiro muchos anzuelos y en algún momento pica un pez gordo, por mientras tengo que esperar nomás. Y cuando tenga plata ¡ahhhhh!.

El Colt está a punto de salir, pintado de un verde limón que duelen los ojos mirarlo, tengo un amigo que pinta los autos de carreras, a ver si le hace unas olas, o unas rayas, va a quedar igualito al auto de "Starky & Hutch" ¡pero de los pobres!

La vida en Arica retoma su curso de vuelta de vacaciones, Tomás Jr. se cortó el pelo y mañana empieza a ir a clases, muchos menos autos de noche en la playa o en la Isla del Alacrán, la universidad comienza a funcionar y volveremos a juntarnos con el jote y demás amigos para comer algo en la parcela del pueblo. Igual que el borracho que despierta después de una larga juerga toda la gente en Arica anda lenta y con pocas ganas de trabajar.

El río San José bajó nuevamente y los agricultores están felices, tienen agua asegurada por el resto del año, el invierno altiplánico no fue ni seco ni con inundaciones y en esta época el río no molestará a los turistas ni nada. Buenos días de otoño, todo vuelve a la normalidad y yo tendré el Mitsubishi Colt "pimp my ride" a mi entera disposición, espero que nada falle esta vez