Sobre presos y Malandras

Este comentario apareció en "La Estrella de Arica" el día de hoy:

Bastante molesto estaba un joven que se dedica a sustraer las monedas de los teléfonos públicos, ya que desde uno de ellos, ubicado en el edificio de los Servicios Públicos, no cayó ninguna moneda. Antes de retirarse, el enojado antisocial exclamó: "Qué son apretados estos ariqueños, ni llaman por teléfono".

Que buena, eso para que vean que tiene sus ventajas ser pobre, los ladrones tienen que emigrar a otra parte porque no tienen que robar. A propósito de delincuentes, acaban de cumplir su condena los ucranianos del "Nativa" y los expulsaron de inmediato, llevaban presos varios años y ya estaban acostumbrados acá, por lo menos uno de ellos desea volver a Arica para quedarse "es barato y me gusta el clima" dijo a la prensa

Años atrás, la DEA venía siguiendo al buque de carga "Nativa" desde Colombia porque mediante satélite habían detectado que traía un gran cargamento de drogas. Al llegar al puerto de Arica el OS-7 de Carabineros revisó el buque hasta el último rincón y no encontraron nada así es que lo dejaron ir. Hasta aquí la historia es clara, lo que sigue ya empieza a ponerse dudoso. Según la versión de Carabineros, uno de los tripulantes del barco se habría arrepentido y dijo que la droga estaba escondida dentro de una grua, así es que salió una lancha de la Marina e interceptaron el buque, inspeccionaron la grua en alta mar y encontraron algo así como 4900 y tantos kilos de clorhidrato de cocaína. Si no me equivoco es el cargamento más grande que se ha capturado en Chile y lo quemaron todo con gran publicidad cerca de la Playa Las Machas. En la oficina del OS-7 guardaban el timón del barco y una foto como recuerdo, Con la expulsión de los ucranianos se cierra el capítulo del "embarque del siglo", en el barco iba además un peruano y el capitán colombiano, quien sabe que habrá sido de ellos, ya deben estar libres.

En los noventas, trabajé casi 10 años en los Tribunales donde hice casi todos los proyectos de inversión, especialmente los primeros de informática, conocí a todo el mundo y leí montones de expedientes que estaban en el archivo y desparramados por todas partes, era muy entretenido. todos los sábados en la mañana a los jueces les toca hacer la "visita de cárcel" donde van a la cárcel, se forman todos los presos que están con causa de ese tribunal y se les pasa lista, supuestamente los presos pueden quejarse aunque rara vez lo hacen. Una vez un juez me dijo si quería acompañarlo en la visita en lugar de un empleado del tribunal así es que yo fuí encantado, para conocer la cárcel por dentro, y así fuimos varios fines de semana. Después supe por qué me habia invitado, resulta que unas semanas antes un preso había saltado sobre el juez y le había pegado su par de cornetes a Usía; ¡ningún empleado del tribunal lo quería acompañar!. en todo caso la visita de cárcel era super divertida para mí.

Tiempo después encontraron que el gendarme encargado de estadísticas de la cárcel había falsificado unas sentencias rebajándo la pena a los presos; a uno le dieron años y salió a los pocos meses, hasta el día de hoy es algo muy fácil de hacer y si algún día caigo preso, lo primero que haré será hacerme amigo del encargado de estadística. Bueno, el caso es que inventé un sistema de "sentencias seguras" donde la sentencia se escribía en un papel especial, foliado y con código de barras que no se podía falsificar, el sistema se estuvo usando por algunos años y supongo que ya habrá caído en desuso para alegría de los malandras. La cosa es que fuimos a inaugurar el sistema con el Jefe de la cárcel, un Ministro de la Corte, el Jefe de la Corporación Judicial y toda la pompa correspondiente, vamos todos por el pasillo cuando nos cruzamos con un preso que era amigo mío, ladrón de autos y que trabajaba de mozo en la cárcel, al verme puso una tremenda cara de sorpresa y me dice "¡pero Tomás, cuando te pescaron!". todos quedaron plop.

En fin, no tenía nada que escribir así que leyendo lo del ladrón de teléfonos me acordé de mis años en la corte de los milagros, tiempos aquellos.