07 julio 2010

Ser chinos pero no tontos

Los maestros constructores tienen dos problemas fundamentales: hacer una esquina perfecta y mantener las cosas a nivel. Cuando se hacen los cimientos de una casa o lo que sea, tienen que asegurarse que las esquinas estén exactamente a 90 grados porque mientras más grande es el rectángulo base, una pequeñísima desviación de los 90 grados irá creciendo y finalmente llegamos a que las esquinas no cierran. Imagínense que al hacer los cimientos de las grandes pirámides de Egipto hubiesen construido las esquinas "al ojo", al cerrar el cuadrado base les habría quedado más chueco que la moral de un político.

Si lo piensan bien, no es sencillo hacer una esquina perfecta, pero desde los tiempos más antiguos alguien descubrió como hacerlo. Los sumerios usaban una cuerda con 12 nudos espaciados igualmente, al doblarla formando un triángulo ¡voila!, queda la esquina perfecta
Le llaman a veces "el triangulo sagrado" por la serie de cosas asombrosas a que está ligado, de ese triángulo aparece el teorema de Pitágoras y la trigonometría que nos permite miles de aplicaciones prácticas. A los sumerios les encantaba el número 12, por algo dividieron el año en 12 meses, el día y la noche en 12 horas cada uno.

Algo tan sencillo como la necesidad de construir esquinas y rectángulos perfectos, llevó a descubrir las relaciones entre los lados y los ángulos en un triángulo rectángulo y las funciones de los ángulos: seno, coseno y tangente:
Nos podemos imaginar una partícula que gira circularmente en torno a un centro, si proyectamos la posición de la partícula hacia los ejes tendremos un triángulo rectángulo, el tamaño de los lados de este triángulo va cambiando a medida que la partícula gira: crece hasta llegar a un valor máximo, luego disminuye hasta cero, sigue disminuyendo hasta un mínimo negativo y crece para llegar de nuevo a cero, miren:
¿Que ha pasado? primero teníamos un triángulo rectángulo, fijo que construímos para poder hacer esquinas perfectas, pero luego nos imaginamos una partícula moviéndose en círculo que proyecta un triángulo que va cambiando a medida que la partícula se mueve: acabamos de introducir un nuevo actor: el movimiento (y el tiempo). Pasamos de una situación estática a otra dinámica:
Lo curioso es que algo tan simple como la esquina perfecta y el triángulo rectángulo, nos permite modelar y explicar una enorme cantidad de fenómenos de la naturaleza: las oscilaciones, vibraciones o movimiento ondulatorio, cuyo ejemplo más clásico es el de el péndulo de un reloj que se mueve a medida que pasa el tiempo:
¿Es este el único fenómeno ondulatorio que conocemos? ¡claro que no!, los sonidos, la luz, la electricidad, el magnetismo, las ondas de radio, las ondas cerebrales, los impulsos musculares, incluso la física nos sugiere que todo el mundo natural, la materia y la energía son de naturaleza ondulatoria.

Todo empezó con el problema de hacer una esquina perfecta y terminamos haciendo un modelo que sirve para todo el universo material. Pero esperen un poquito porque si miran el símbolo del Yin y Yang o se toman la molestia de leer los divertidísimos textos de la antigua filosofía china (Chuang Tzu y Lao Tze entre los mejores) verán que hasta los chinos tenían la misma inttuición, mieren esto nomás y comparen con los dibujos de arriba:
¿Vieron? ser chinitos pero no tontos, cualquier parecido entre todo esto puede que no sea pura coincidencia. Hasta mañana.

6 comentarios:

  1. Creo que al teorema de Pitágoras los chinos lo habían resuelto bastante antes que Pitágoras, entre otras con una elegante demostración gráfica basada en despliegue de áreas. Ahora, en cuanto al Ying y el Yang, acá no tuvieron un sesgo, una discriminación, nada de machismo - como flechas de un lado y cruces del otro - nada de esto arriba aquello abajo, mejor o peor, bueno o malo, sino un simétrico conflicto y equilibrio. Bastante interesante y distinto a nuestros esquemas que mas bien son del Bien contra el Mal.

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  2. Esa es una diferencia fundamental entre lo que conocemos como "pensamiento occidental" y las demás maneras de pensar. Desde la época de los griegos (Platon y aún antes) existió el pensamiento dual donde una parte tiene que aniquilar o se tiene que imponer sobre la otra: el bien sobre el mal, Dios sobre el Diablo, lo espiritual sobre lo material, etc. esta visión de dos opuestos en conflicto donde uno se tiene que imponer sobre el otro para lograr el equilibrio es de naturaleza estática, aborrece el cambio y la inestabilidad. Gracias a esa manera de pensar es que existe la ciencia, que se ha basado durante muchos siglos en la "búsqueda de verdades" estáticas y eternas "comprender los secretos de la naturaleza por medio de la razón" esto es sin que existan contradicciones lógicas. Esa forma de pensar es la que ha producido grandes avances tecnológicos y la imposición del pensamiento occidental sobre todos los demás.

    Otras culturas en cambio (los chinos, incluso culturas de indíos precolombinos) tenían la idea de los opuestos complementarios, en perpetuo intercambio, donde la estabilidad es el flujo de intercambio y no la aniquilación del otro. Si bien esta manera de pensar es muy lógica no le hace asco a las contradicciones, lo que hace bien inútil para obtener avances tecnológicos y científicos en general. El método científico es producto 100% occidental.

    Por eso los escritos de los antiguos chinos nos parecen tirados de las mechas y llenos de contradicciones, en lugar de abominar la contradicción como nosotros la disfrutan :)

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  3. [Mi opinión] La contradicción no permite erigir un buen edificio científicamente arriostrado (por así decirlo), pero filosóficamente es imposible concebir al mundo sin paradojas.

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  4. Si Sergio, muy de acuerdo, es una foma mejor y más concisa de decirlo

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  5. No se. Fibonacci en la Edad Media introdujo los números decimales en Europa y tardaron en aceptarse. Al cero lo descubrieron hasta los mayas pero los europeos necesitaron copiarlo. Las observaciones astronómicas árabes o chinas fueron mejores que las europeas hasta el Renacimiento. Hay un despegue absoluto de la ciencia occidental desde el siglo XVI para acá, pero son quinientos años contra cinco mil de civilización mas o menos sofisticada. Y no creo que en cualquier universidad coreana y ni hablar nipona les falte entender algo del sistema científico occidental - probabemente lo entienden mejor que la mayoria de los occidentales. Pudo existir una ventaja cultural durante un rato, pero ya pasó.

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  6. Ah Ulschmidt pero yo me refiero al "pensamiento occidental" que se enseña sin contrapesos como conocimiento científico aquí, en Corea, China y en todos lados. A lo que añadiría que se considera el "pensamiento científico" de tradición occidental como la única clase de conocimiento "respetable" en todo el mundo.

    Existe entre los occidentales una especie de "principio antrópico" que nos hace creer a todos que la ciencia occidental es el único conocimiento válido y respetable, cuando hay cosmovisiones como las de India, China antiguas, indigenas que son completamente a-científicas , que solo se aceptan como religiones medias raras o exoticas.

    Claro que la ciencia ha recogido el cero de los hindues, el álgebra y el sistema decimal de los árabes y etc. etc. pero la cosmovisión o manera de pensar binaria que no acepta las inconsistencias lógicas o las contradiciones es 100% occidental y hoy domina el mundo desde América LAtina a China sin contrapeso.

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"Send me a postcard, drop me a line
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Will you still need me, will you still feed me
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