Por casualidad llegué al sitio web de Bravetech,una empresa privada ucraniana que se dedica a la integración de drones FVP, sistemas de guerra electrónica y vehículos aéreos no tripulados para reconocimiento.
Obviamente la página está escrita en ucraniano con esos endiablados caracteres cirílicos. Pero como estamos en el Siglo XXI es ya no es problema. porque mi explorador de Internet (Vivaldi) tiene la facilidad de traducción automática,
Estuve curioseando sus productos: bastidores, motores, cámaras, receptores y transmisores, antenas, interceptores de señal y cosas por el estilo. Me recordó mucho los años de la maquila industrial acá en Arica, donde se compraban partes y piezas para electrónica y vehiculos para ensamblarlas acá.
Ellos hacen más o menos lo mismo, compran piezas de diferentes países y las integran con partes fabricadas localmente, recuerdo que así mismo es como funcionaba la industria electrónica en Arica, la integración nacional recibía un premio tributario y era cada vez mayor.
Primero se empiezan a integrar las partes más simples, por ejemplo para los televisores empezaron a incorporarse gabinetes, perillas, parlantes y cosas así de fabricación nacional.
Con el tiempo se agregaron los tubos de imágen, flyback, sintonizadores y otros componentes bastante complejos, todos fabricados acá en Arica. Claro que era económicamente ineficiente, pero Ucrania está en guerra y debe ser mucho más importante la independencia de los proveedores extranjeros que los costos.
Por ejemplo los marcos, hélices, buena parte de los motores, parte de las cámaras, los equipos de comunicación, etc. pueden ser parcial o totalmente hechos localmente, por ejemplo con impresoras 3D.
Buena parte de los gabinetes y marcos se pueden fabricar en cientos o miles de microempresas ubicadas en casas particulares equipadas por una impresora 3D de menos de dos mil dólares, no se necesita fábricas para eso.
Todo esto me lleva a pensar en los cambios fundamentales que están ocurriendo en la guerra este siglo, cosa de lo que muy pocos se dan cuenta. El uso de los drones que ha masificado Ucrania ha puesto patas arriba muchos conceptos, han hecho desaparecer muchas ventajas y aparecer otras nuevas.
Por ejemplo un militar comentaba que las fuerzas armadas europeas -que hoy están amenazadas por Rusia- no ganarían nada poniendo la plata donde la han puesto siempre: tropas y una carrera por armas cada vez más caras y sofisticadas, eso sería un gasto absurdo y en parte inútil.
Ayer un dron ucraniano derribó un helicóptero ruso de varios millones de dólares. En este caso la desproporción del daño es enorme. No solo se perdió el helicóptero sino también su tripulación, que es un recurso escaso y muy valioso en tiempo de guerra.
La cuenta que sacaba el militar que mencioné antes, era que un aumento del gasto en defensa típico se usaría por ejemplo en contratar, formar y equipar, por ejemplo a 5.000 nuevos soldados.
Con un gasto similar se podría contratar y adiestrar a unos 15.000 voluntarios que aprendieran a pilotar drones FPV, un adiestramiento que se puede hacer en muy corto tiempo y mantenerlos en la reserva continuamente actualizados.
Los gastos en aviones caza de última generación, misiles hipersónicos y todo el armamento que hoy se piensa de primera línea son astronómicos. Pero con lo que cuesta un solo caza se pueden fabricar decenas de miles de drones.
Estos drones pueden destruir bombarderos estratégicos y cazas de última generación, pueden destruir los lanzadores de misiles dejando inutilizados misiles por valor de millones de dólares, como hizo Israel con Iran.
Eso también lo está haciendo Ucrania, solo recuerden la Operación Spiderweb o más recientemente la destrucción de plataformas lanzadoras de Izkander, que dejaron inutilizados los millonarios misiles hipersonicos.
Los cambios que están ocurriendo en la guerra son muy complejos porque los combates y batallas entre ejércitos están perdiendo importancia.
Y no es que mañana vayan a desaparecer pero sin duda que buena parte va a ser reemplazado por acciones de sabotaje o guerra asimétrica.
Yo creo que una de las consecuencias de todos estos cambios es que cada vez van a ser más difícles las invasiones y las guerras de agresión, porque la guerra asimétrica hace mucho más sencillo defenderse que atacar.
Y la guerra probablemente se va a hacer cada vez más asimétrica. Hasta antes de la invasión de Ucrania nadie manejaba el concepto de un "enjambre de drones", y como los drones son -relativamente- tan baratos, que cualquier país podrá usarlo.
Ucrania por ejemplo lanza 200 drones sobre una planta de generación eléctrica, las defensas aéreas rusas los botan a todos gastando su munición, con eso se quedan sin defensa aérea por una ventana de tiempo, Ucrania lo aprovecha y les pone un solo misil de crucero donde más les duela.
¿Costo? Bajísimo, la nada misma ¿Efectividad? Devastadora.
Cosas que eran fortalezas en las batallas antiguas hoy son debilidades. El enorme tamaño de Rusia que en la guerra tradicional lo hacía invulnerble frente a una invasión, hoy lo hace tremendamente vulnerable, porque con enjambres de drones los pueden dejar sin defensa aérea.
Un territorio enorme es muy difícil de defender porque ningún país tiene una cantidad infinita de baterías de defensa aérea, por eso Israel pudo resistir los bombardeos iraníes, en cambio Irán perdió la capacidad de defender su espacio aéreo en los primeros bombardeos.
Parece que a veces no es tan malo ser chicos. Chile por ejemplo es un país chico y con una forma parecida a la de Israel: largo y angosto, por eso la importancia de llevarnos bien con ellos a cualquier costo.
Una última cosa que se me ocurre que podría pasar es el declive de las gigantescas empresas que fabrican armamento: los fabricantes de tanques, de aviones caza, corbetas y sofisticados misiles que han hecho enormes fortunas en contratos con gobiernos.
No digo que vayan a desaparecer, pero parece que cada día habran menos armas "decisivas" por su sofisticación. Un dron armado en casa puede inutilizar lanzadores de misiles hipersonicos, que requieren décadas de desarrollo, pruebas e inversiones gigantescas.
Yo creo que Rusia perdió la guerra hace rato, después del fracaso del asalto sobre Kiev y el fracaso de conquistar grandes territorios con rapidez ya no puede ganar, todo lo que venga será pérdida.
No se pudo imponer por el peso de su economía, ni de su demografía, tampoco por la enorme superioridad de armas convencionales. Perdió la guerra contra un enemigo comparativamente diminuto.
¿Qué le queda ahora a Putin? Yo creo que la única opción que le está quedando es seguir el ejemplo de Gadaffi y convertir a Rusia en un estado terrorista. Usando drones y otros medios de guerra asimétrica podrá hacer atentados "anónimos" en toda Europa o incluso en Estados Unidos.
A la larga tampoco tiene mucho que ganar con eso, los terroristas muy rara vez ganan sus guerras, solo miren a Gadaffi, el IRA, la ETA, el Estado Islámico o Bin Laden, la mayoría terminan muy mal. Pero creo que esa es la única opción que a Putin le va quedando.
Corte de cables submarinos, atentados en centrales eléctricas, infraestructura de Internet, derribo de aviones civiles, explosiones en lugares públicos y cosas así. Eso lo puede hacer Rusia con razonable facilidad y a corto plazo al menos, sostendría en pie la popularidad de Putin. Igual, espero que no se le ocurra.
....pero al final, mientras no se pose la bota del infante, no hay terreno conquistado!!!
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