Los jotes andan rondando.

Eso, partimos mal, los viejos vicios y martingalas ariqueñas para sacar billete al fisco vuelven a aparecer con la implementación de la nueva Región Arica-Parinacota.

El CORE aprobó una propuesta pública para confeccionar la estrategia de desarrollo regional por 60 y tantos millones de pesos. A la voz de pesos todos empezaron a saltar como cabinzas y la CORDAP con la Municipalidad hablaban de una "alianza estratégica" mientras que la Universidad de Tarapacá, que se cree con el mejor derecho (como si tuviera puras lumbreras) anunció que participaría sola en la propuesta.

Todo el mundo detrás de los cochinos 60 millones, que no dejan de ser plata si se los reparten, digamos, entre unos 10 genios. Que mal, que verguenza y que triste espectáculo ¿no se acuerdan cuando los consejeros de la Junta de Adelanto trabajaban Ad-Honorem?, otros tiempos, otra gente . Mi más profundo repudio para la manganada de frescos, así no llegaremos a ninguna parte.

Otra curiosidad ariqueña: ocurre con un juez de garantía en Arica, que tenía especial predilección por los derechos de los detenidos en casos de drogas. Así fue como sistemáticamente les otorgaba la libertad provisional (andan como 80 prófugos gracias a sus dictámenes), prohibía que difundieran sus nombres o los filmaran, etc. etc. o sea, se tomaba demasiado en serio eso de las garantías, especialmente con los traficantes.

Los honorables políticos locales empezaron a reclamar con lo que pusieron a la Suprema en un aprieto. Como un juez no puede ser castigado por sus fallos, vino un supremo visitador y desempolvó un antiguo incidente que tuvo el juez en Valparaíso, arreglado y olvidado hace tiempo, y lo resucitó armando un cuaderno de remoción.

Hay dos cosas bien hipócritas en todo esto. Una es la actitud de los políticos, que culpan a los jueces por aplicar las leyes que ellos mismos diseñaron, ese cinismo de pasarle la pelota a otros por sus propios errores es evidente y asqueroso en algunos ¿por qué no pensaron dos veces antes de aprobar los procedimientos absurdos que permiten estas situaciones? ¿que culpa tiene el juez si solo aplica la porquería de leyes que los propios políticos redactaron y aprobaron?.

Lo otro lamentable es como los supremos se prestan para estas martingalas con tal de quedar bien con los políticos, un juez no puede ser sancionado por sus fallos cuando estos se ajustan a derecho y usar una cuchufleta para removerlo se presta para toda clase de abusos. La corte suprema como siempre, obsecuente, injusta, siempre al lado del que tiene el poder de turno. Antes con los militares, ahora con los políticos.

En fin, una vez que empiezo a despotricar me cuesta parar, por lo menos esta vez puse una entrada con mis chocheras entre medio. Ahora me voy a dormir, hasta mañana.