Nunca digas nunca

Ouch, ayer en la noche después de terminar las clases me apareció el resfrío ¡la gripe porcina me alcanzó! ahora ando como pavo con los ojos y nariz goteando, maldición, yo que pensaba disfrutar del domingo y lunes poniendo al día varias cosas pendientes, ahora parece que no podré hacer nada, estoy juntando ánimo para salir a comprar algo con seudoenfedrina, hacen el crack con eso así es que no puede ser malo.

Bueno, acabo de ir a la farmacia donde compré mi dosis de crack, también aproveché de comprar finisteride para la pelada, es bastante caro pero encontré unas que traen la dosis más concentrada y vale lo mismo así es que puedo partir la pastilla en 4 partes ¡ya no voy a ser cabeza de rodilla! al menos por un tiempo, espero.

Hace un tiempo hubo un asunto muy extraño relacionado con las farmacias, cuando la Fiscalía Nacional Económica consigió que la cadena de farmacias Ahumada "confesara" haberse coludido con otras dos grandes cadenas de farmacias para fijar los precios.

Esto causó una enorme ola de indignación en la opinión pública y bastante popularidad para el gobierno, yo sin embargo estoy convencido que se trató de una operación política tal como fue el "caso Spiniak" que permitió la elección -si mal no recuerdo- de Ricardo Lagos y terminó con un arreglo bastante turbio entre la izquierda y derecha en esos años. Como muchos de nuestros actuales políticos vivieron en la ex República Democrática Alemana, seguramente trajeron su experiencia de la Stasi, aplicando estas tácticas new age de guerra psicológica.

Lo de Spiniak fe un montaje bien grosero, al final se desinfló cada uno de los rumores que creó y alimentó La Nación, el diario de gobierno que se ha transformado en el altavoz por donde se amplifican todas estas cuchufletas. Es pura manipulación de opinión pública, sirve para alinear a los ignorantes tras los intereses del gobierno.

Fíjense como es el asunto de las farmacias, en Arica vivimos en la frontera y nos resulta muy fácil comparar los precios de los remedios respecto del Perú, resulta que en términos nominales los remedios en Perú son todos más caros que en Chile, si los ajustamos a la paridad de poder de compra, es decir cuantas hamburguesas MacDonalds necesitamos para comprar un mismo remedio, resulta que en Chile los remedios son mucho más baratos todavía.

A propósito de la colusión de precios entre las grandes cadenas de farmacias, nuestro profesor de dirección estratégica comentaba que solo un analfabeto económico podría pensar que va a existir una guerra de precios entre tres actores de ese tamaño y por diseño siempre va a existir una banda o colusión implícita en los precios, esto no es culpa de las farmacias sino el efecto lógico de poner barreras de entrada y limitar la competencia, al no permitir la venta de medicamentos que no requieren receta fuera de las farmacias.

Lo curioso es que la propia Fiscalía Nacional Económica, el gobierno, los políticos en masa y los medios de comunicación se prestan para un montaje así de burdo, alimentándolo solo porque es una causa popular entre la masa de ignorantes. Eso se llama manipular a los tontos.

La concentración vertical entre laboratorios y farmacias es efecto del propio gobierno, que otorga un monopolio de facto que favorece a las grandes cadenas de farmacias y a una relación casi incestuosa con los laboratorios, no en vano los laboratorios farmacéuticos son el negocio legal más rentable que existe en el mundo, seguidos por la producción de software genérico.

Y finalmente llegó el golpe de estado a Honduras, con lo que América Latina vuelve al ciclo de gobiernos corruptos-golpes militares que muchos ingenuos creían que se había terminado para nunca más. Claro que no, mientras exista la corrupción y la incapacidad polítca seguirán los golpes militares donde, a la suerte de la olla, el poder puede quedar en manos de gorilas o de gente seria y patriota. Seguramente este golpe será de cortísima duración y en Honduras se llamará a elecciones cuanto antes, pero es un aviso que los militares no son neutros ni indiferentes a la suerte del estado, otros candidatos son Bolivia, Venezuela y Argentina, cuando las cosas se ponen malas y los políticos terminan arruinando a un país entonces aparecen los militares, eso está en nuestro ADN.

Menos mal que en Chile estamos muy lejos de algo así, pero ojo, no se confíen demsiado ni se les olvide que esa es nuestra constante histórica. Los que hoy abusan con la ingenua esperanza del "nunca más" no saben que nunca hay que decir nunca.