Páginas

25 febrero 2023

Refrito del sábado: viajar no era gran cosa

Viajar no era gran cosa (publicado originalmente el 17 de abril de 2006)
Ayer en la tarde me fuí a la casa rodante y dormí la más rica siesta que he tenido en años, estuvo tan buena que ni me acuerdo que habré soñado pero seguro que fue algo agradable. Y después de eso me puse a soñar despierto, como todos hacemos cuando no tenemos algo más productivo que hacer, lo que en mi caso pasa muy seguido

Entonces empecé a imaginarme como iba a quedar el Colt, que le cambiaba el radiador, le sacaba los papeles y lo usaba para viajar a todas partes. Mucha gente sueña con tener lo que quiere, pero yo -a estas alturas- prefiero querer lo que ya tengo, me gusta imaginar que lo que estoy haciendo sale bien y cosas por el estilo.

Pero lo que quería contarles es una historia curiosa sobre sueños imposibles que me pasó hace años. Estudiaba en la universidad, creo que en segundo año y era -lejos- el más muerto de hambre de mi carrera, tenía una polera café y otra azul que las había hecho durar más de dos años y comía solo de vez en cuando. 

Me acuerdo clarito que estábamos en la puerta de la federación de estudiantes conversando con dos compañeros: Gladys y el Chago. De la conversación salió el tema de lo que cada uno de nosotros soñaba tener en el futuro, si es que llegábamos a titularnos. 

La Gladys dijo que con un buen trabajo, un auto y departamento propio ella estaría feliz, que ese era su sueño, el Chago dijo que su sueño era titularse e irse a vivir a Italia, de donde vinieron sus padres. Y yo, que nunca tuve grandes expectativas dije que soñaba con viajar, andar en avión y conocer todo el mundo.

Lo curioso es que los tres cumplimos exactamente lo que soñábamos y pasó lo más improbable, porque yo fuí el primero; al poco tiempo de esa conversación encontré trabajo en Iquique y antes de dos años ya estaba viajando por todo el mundo

Unos años atrás me encontré con la Gladys en Iquique; me contó que había sido jefa del Departamento de Estudios de Telefónica durante varios años y ahora se cambiaba a la Universidad Santo Tomás en buenas condiciones, no fue necesario que le preguntara si tenía su departamento y su auto, porque se notaba que estaba ganando buena plata. 

Y el año pasado recibí un mail de Santiago Ghillino contándome que llevaba varios años viviendo en Rapallo, Italia, o sea cada uno de nuestros sueños fue cumplido, nos tocó a los tres.

Lo curioso es que cuando volví de ese viaje a mi minúscula casita en la población 11 de Septiembre, después de haber puesto mi trasero en varios hoteles fastuosos, comiendo exquisiteses y dándome lujos de Aga Khan, me sente a pensar ¿y ahora qué?, ya había cumplido mi sueño así es que no me quedaba otra que morirme. 

Pero nada, pensé que después de todo viajar no era gran cosa así es que me puse a imaginar un nuevo sueño, que también se me cumplió pero con resultados desastrosos, chuscos y que no pueden ser publicados. Desde entonces tengo más cuidado a la hora que se me mete alguna idea en la cabeza, no vaya a ser que se me cumpla

4 comentarios:

  1. viajar fue mi expectavia mayor casi toda m vida
    Era el sumun.
    He leído literatura de viajes, crócinas de conquista, de exploradores, en fin, ha sido el componente mayor de mis lectoras toda mi vida.
    No hace tanto me encontré con una compañera del secundario del pueblo vecino. Ee lectora como yo, y de un psar clasemediero, mas que menos. Me contó de un encuentro con una amiga de mayores posibilidades, bien casada, que con su esposo habían hecho un viaje al cenro de Europa.l
    La amiga de mi amiga no sabía muy bien donde había estado. Fue en avión, los hoteles ya estaban pagados, unos días la llevaron a ver museos y palacios, en un lugar había churros de agua danzantes en otros cuadros y armaduras. Mi amiga, mientras la escuchaba, la iba completando: eso fue aquí, eso fue allá, eso es porque cuando los turcos otomanos sitiaban Viena a alguien se le ocurrió el croissant.... etc... etc...
    La que no fue - ni probablemene vaya nunca - sabía todo porque se la pasó leyendo y la que fué porque el marido tiene plata no sabía muy bien donde estuvo - pero estuvo.
    Es así. Yo, por mi parte, no conozco más que brevemente dos países aparte del mío - y pensaba que a mi edad iba a conocer unos cuarenta - pero, eso sí, siempre tengo un proyecto de viaje en cierto. a 20 o a 20000 km. Uls

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. No hay mejores viajes en la vida que los que uno hace tirado en el sofá leyendo un buen libro.
      "El cuarteto de Alejandría" se llama el librazo de Lawrence Durrell y que describe tan bien esa ciudad que si la vivitara estoy seguro que me llevaría una tremenda desilusión.
      Todas las ciudades donde estuve las disfruté mucho más leyendo sobre ellas que estando allá. En el camino del aeropuerto Narita a Tokio me enfureció comprobar que es igualito a la entrada de Agua Santa en Viña del Mar, lo mismo las ciudades, siempre encontraba cosas parecidas a algún lugar de Chile o más deslucidas de como las había imaginado.
      Por eso ya no me entusiasma viajar, son puros problemas, nervios, cansancio, esperas aburridísimas en los aeropuertos, mala noche en los hoteles con una almohada que no es la mía.
      Yo se que hay mucha gente que le apasiona viajar pero yo no soy de esos, de ser por mi no me movería a ninguna parte.

      Borrar
  2. DON TOMAS,
    Muy interesante su entrada de hoy.
    Le sugiero enlazar sus columnas en un índice de materias como lo ha hecho en "Links Temáticos ".

    https://tombradtematico.blogspot.com/

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Hola Centurio. Si huebiese hecho las cosas bien desde el principio y hubiese etiquetado cada entrada con los tahs adecuados, lo que dices sería muy sencillo.
      Sin embargo al comienzo puse trahs y al poco tiempo me aburrió y dejé de ponerlos. Si ahora quisiera clasificar todo el blog por temas, revisando cada una de las 5.149 entradas y colocando las etiquetas, ahi si que me vuelvo loco.
      La moraleja es: el flojo trabaja dos veces, o el ocio nada engendra

      Borrar

"Send me a postcard, drop me a line
Stating point of view
Indicate precisely what you mean to say
Yours sincerely, wasting away
Give me your answer, fill in a form
Mine for evermore
Will you still need me, will you still feed me
When I'm sixty-four"