5G
El estándar 5G para telefonía celular se implementó hace cinco años, después de una carrera desenfrenada y billonaria por adjudicarse las frecuencias, y por establecer los estándares de la tecnología que prometía revolucionar totalmente el mundo de los teléfonos celulares.
Se desató una competencia global entre países y empresas, para imponer y desplegar la tecnología de 5G, no solo para construir la infraestructura necesaria, sino para la investigación y desarrollo de nuevas aplicaciones y servicios que aprovecharían las capacidades del 5G, como velocidades más rápidas, menor latencia y mayor capacidad de conexión.
Creo que fue la primera arremetida de las empresas chinas intentando imponer una hegemocía global, cosa que veían como un objetivo estratégico. Y la agresividad con que trataron de "persuadir" a los países para que adoptaran su tecnología al final los perjudicó mucho.
Desde luego se ganaron la enamistad de las empresas y gobiernos occidentales, especialmente de los Estados Unidos que reaccionaron prohibiendo de facto a los escaparates de apps como Google Play a licenciar su software a empresas chinas.
El Internet de las cosas
La especificación 5G tiene como ventajas una velocidad y ancho de banda 10 veces superior y una menor latencia que los 4G ¿Cómo no iba a ser mejor? Así fue como todas las empresas del sector se pusieron de cabeza a pensar que harían con tanta velocidad y ancho de banda.
Pero resulta que las aplicaciones populares, en especial Youtube cuyos servicios son los más exigentes en velocidad, ancho de banda y latencia, funcionan sin problemas en 4G,.
Eso de los videos que se congelaban a cada rato es cosa del pasado, gracias a los enormes avances en compresión y eficiencia desarrollados por las propias plataformas.
Había que encontrar entonces una aplicación disruptiva -el Facebook de la 5G- que desatara na popularidad explosiva y que solo funcionara gracias a las prestaciones del nuevo estándar.
Se pensó entonces en "el Internet de las cosas", que implicaba conectar electrodomésticos, vehículos autónomos, automatización del hogar (domótica), en fin, conectar "todas las cosas" a Internet.
Llevamos varios años en eso, y resulta que no ha aparecido ningun uso útil de ese tipo. Hoy, después de inversiones multibillonarias, la mayoría seguimos usando 4G, y los que han pagado por equipos 5G más caros, no tienen en que diablos usarlos y no notan ninguna gran diferencia.
En pocas palabras, ese fue el gran fiasco del 5G y el Internet de las cosas.
Los autos 100% eléctricos
A estas alturas, con BYD al borde de la quiebra y de los más de 130 fabricantes chinos de estos autos hoy solo quedan en pie como 17, con los problemas de Tesla y otros, creo que ya podemos hablar que la industria de autos eléctricos ya es un enorme fiasco tecnológico.
Recuerdo cómo me discutían hace unos 8 años atrás que ese sería el futuro y que los días del motor de combustión interna estaban contados. También me acuerdo de la impresionante ofensiva de marketing de los fabricantes y cómo aparecían, casi todas las semanas, noticias sobre las tecnologías milagrosas que se venían desde China.
Toda clase de anuncios absurdos "baterías nucleares" que podrían recargar cientos de Kw en un minuto, en fin... no hubo estupidez que no se dijera y los políticos de todo el mundo -tontos e ignorantes- las compraron todas.
Leo en Internet
"La Unión Europea anunció oficialmente el fin de la venta de vehículos nuevos con motor de combustión interna (gasolina y diésel) a partir de 2035, según el Parlamento Europeo. Esta medida se enmarca dentro de los esfuerzos de la UE para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y avanzar hacia la neutralidad climática"
¿Qué estarían fumando esos idiotas? ¿Creyeron que con un decreto podrían hacer aparecer una tecnología que no existe para reemplazar la actual que es inviable? En fin, hoy muy pocos creen que se va a poder implementar algo así.
Porque no había que ser ningún Einstein para entender que es completamente imposible reemplazar los vehículos de combustión por eléctricos.
Los autos eléctricos jamás llegaron a ser escalables con su problema fundamental de tiempo de recarga, peso y costo de las baterías. Pero la gente común le encanta creer que exsiten los milagros, que China sería la nueva potencia mundial y encontraría la solución para todos esos "pequeños detalles técnicos".
Los vehículos eléctricos son mucho más antiguos que los de combustión y si no los han reempazado es porque sus problemas son insalvables en un futuro previsible.
Eso no quiere decir que todos sean malos: hay aplicaciones ultralivianas como motos o city car que pueden resultar muy prácticos, pero diseños como los de Tesla o BYD fueron una aberración desde el momento de su diseño.
La energía "gratis" solar (eólica, mareomotriz, etc.) para todos
Tal como los vehículos eléctricos, las energías renovables no convencionales para generación de potencia fueron un fracaso desde el momento de su concepción.
He escrito mucho sobre esto antes, y sobre la avalancha de publicidad engañosa que se viene haciendo durante décadas. Resulta que detrás de los autos eléctricos y los paneles solares está el lobby global del Gobierno Chino y sus operadores.
Esto empezó hace más de 10 años atrás cuando Al Gore presentó el documental "Una verdad incómoda" que recibió el aplauso cerrado de todo el wokismo mundial, las burocracias internacionales, las ONG, la prensa y -para variar. la inefable Academia Sueca, que lo honró con el Premio Nobel de la Paz.
¿Se imaginan si ese chiflado corrupto hubiese sido elegido presidente? Habría sido peor que Donald Trump y a estas alturas todo Occidente sería una gran colonia China. ¡De la que nos salvamos!.
La verdad es que al refinar el silicio dopado, pasa algo análogo a cuando se destila el alcohol: la cabeza y la cola de la barra purificada no tienen la pureza requerida para litografiar chips electrónicos pero si tienen grado metalurgico, es decir una pureza del 99.99% que sirve para fabricar paneles.
Eso explica por qué los paneles han bajado tanto de precio, casi todos los fabricantes de silicio para chip también venden silicio purificado para paneles, su materia prima es el desecho, es decir prácticamente gratis.
Pero nada es gratis en este cochino mundo, y por más que bajen de precio, el sueño de la casa autónoma desconectada de la red no es práctico en ningúna ciudad del mundo, aparte de lugares apartados donde los postes no llegan,
Alemania hace muchos años cayó en ese engaño, inducidos por la propaganda engañosa, y fue un enorme fracaso, en España la misma cosa, la sobrepoblación de granjas solares explica buena parte de los problemas energéticos españoles.
En fin, otro cuento chino. Hay muchas otras tecnologías que han resultado un fiasco, como los vehículos de conducción autónoma por ejemplo, que a mi me tuvieron bastante impresionado al principio.
Otros, pese a que técnicamente funcionaron bien, nunca tuvieron éxito comercial o no desarrollaron aplicaciones prácticas lo suficientemente atractivas, a mi también me entusiasmó mucho el sonido cuadrafónico en los ochentas y el Raspberry Pi, al que le metí mucha mano pero nunca pude dar con algún uso práctico atractivo.
Lo que si ha funcionado
Drones: quien se hubiera imaginado que algo que todos considerábamos un juguete para regalar al sobrino chico, de un día para otro -por obra y gracia de la guerra- se iba a convertir en una de las tecnologías más revolucionarias, útiles y peligrosas de este siglo.
Siempre las guerras traen -aparte de la muerte y destrucción- cosas buenas, aparecen nuevas y mejores tecnologías y ordenan el naipe, especialmente cuando van ganando los buenos y los malos reciben sus merecidas palizas, como lo estamos viendo ahora con la invasión de Rusia a Ucrania.
Los drones son una gran tecnología que todavía tiene mucho que ofrecer, pero también potencialmente trae enormes peligros cuando caen en malas manos.