Ventajas comparativas de los valles de Arica

Las ventajas comparativas son un concepto económico poco comprendido, pese a que se conoce desde hace siglos. El problema es que la opinión común se queda con las ventajas absolutas, que he mencionado varias veces acá. Cuando Adam Smith escribió que, aunque en Escocia se podían plantar viñas haciendo costosos invernaderos, era mucho más conveniente importar el vino de Francia que tenía un clima especial para las vides. Ese es un ejemplo clásico de la ventaja absoluta, sin embargo es muy engañoso cuando no se considera el costo de oportunidad.

Un ejemplo intuitivo muy sencillo es el que se presenta en el video que acompaña esta entrada, del curso Developing Economics que dice lo siguiente:

La famosa presentadora de televisión Martha Stewart tiene una habilidad increíble para planchar y lo hace mejor que la mayoría de sus compatriotas, le encanta planchar, sin embargo "no se puede dar el lujo" de planchar sus propias camisas, pues el tiempo que dedica a la televisión le produce millones de dólares, no lo puede gastar en planchar y debe dejar ese trabajo a otra persona, aunque sea mucho menos productiva en eso que ella. Ese es el concepto de costo de oportunidad: cuando alguien tiene varias ventajas absolutas no le conviene dedicarse a desarrollarlas todas, sino que solo las más rentables comparativamente.

Ese fue el gran aporte teórico de David Ricardo y lo mostró con un enredado ejemplo del vino en Portugal y las telas en Inglaterra, que nunca entendí completamente. En el video que muestro y el siguiente, se muestra con un ejemplo numérico mucho más claro -de computadores y camisas- como las ventajas comparativas, junto con el comercio, no solo son buenas para el país con más ventajas sino que mejora la productividad para todos, gracias a un buen uso del costo de oportunidad.

Es increíble, todo eso se conoce desde el siglo 19 y la gente común y sus representantes -los políticos- lo siguen ignorando, como si no existiera ¡si hasta los años sesenta se aplicó una vuelta al mercantilismo! y hay países en América Latina donde todavía se aplican esas políticas, que ignoran hasta las ventajas absolutas, son ideas desacreditadas desde la época de Adam Smith.

Pensemos por ejemplo en los valles de Azapa y Lluta en Arica, donde es un lugar común decir que es "el mejor lugar del mundo para plantar tomates y hortalizas". Claro que no es cierto, ni siquiera existe la ventaja absoluta, porque para afirmar eso se debe presumir que existe agua gratis y abundante, lo que no es así.

Pero supongamos que por obra de un milagro brotaran manantiales por todas partes, haciendo el agua gratis y abundante. ¿Sería entonces el mejor lugar del mundo para producir tomates y hortalizas? Probablemente ¿convendría plantar con tomates y hortalizas por todos lados? Claro que no, por la misma razón que a Martha Stewart no le conviene planchar sus camisas y por la que Miami Beach, un lugar ideal para plantar cítricos está repleto de mansiones de lujo: el costo de oportunidad.

Cosas como la división del trabajo, la conveniencia de dedicarse a lo que uno tiene ventajas, considerar los costos de oportunidad, las ventajas de abrirse al libre comercio, etc. son ahora evidentes, no es "neoliberalismo" sino simplemente ideas más o menos obvias -esa es la genialidad de los que se dieron cuenta de ellas- que han mostrado en el tiempo dar excelentes resultados. ¿No estamos mejor hoy que en la Edad Media, antes que se aplicaran estas ideas? ¿Por que entonces son ignoradas por los políticos y la gente en general?, se me ocurren varias explicaciones:

Ignorancia: los políticos y la gente común son bastante ignorantes y siempre están dispuestos a aceptar explicaciones superficiales, especialmente cuando sirven para justificacrse.

Intereses especiales: siempre hay grupos de interés especial pequeños pero poderosos políticamente, interesados en que el gobierno de turno use su fuerza para darles alguna clase de privilegios.

Ideologías engañosas: tienen mucho que ver con la ignorancia, son ideas sencillas pero convincentes para los que tienen el cerebro flojo y son incapaces de elaborar ideas más racionales, hacen uso abundante de la poesía, sentimentalismo y cosas por el estilo.

En fin, hay muchas más, pero creo que fue Anah Arendt (o como se escriba) la que dió una buena descripción de este problema, cuando dijo que el ser humano tenía una capacidad maravillosa de poder decir "está lloviendo" en medio de un día de sol. Esa capacidad de poder negar lo evidente, que tiene frente a sus narices es lo que nos distingue de los animales y es a la vez la más potente y la más dañina de las facultades del cerebro humano.