Sir Keir Rodney Starmer, el actual primer ministro inglés del Partido Laborista, fue elegido el año 2024 con gran votación después de 14 años de gobiernos conservadores.
Los tories -conservadores- que estuvieron antes de él fueron: Cameron, May, Johnson, Truss y Sunak. Cameron fue el único que duró como 6 años en el puesto, los demás en promedio dos años, incluso Sunak creo que duró menos de un año.
Esa seguidilla de primeros ministros conservadores muestra que -si bien Inglaterra prefiere elegir a los tories- los políticos electos han resultado unos chantas, y por eso en 2014 decidieron probar con el laborista Starmer.
Mala idea, Starmer lleva poco más de un año y la política inglesa está en ua de sus peores crisis. Protestas violentas en la calle, escándalos por los regalos millonarios recibidos, y la guinda de la torta: una acusación del Tribunal Supremo por haber caido varias veces en actos inconstitucionales.
Starmer -igual que Trump- es de esos que piensan que las leyes no lo limitan, y que tiene poder suficiente como para enfrentar a los que considera sus enemigos sin preocuparse por minucias legales.
Pero tuvo la mala idea de meterse contra la realeza impulsando una iniciativa para despojar al rey de sus prerrogativas sobre la Commonwealth, diciendo que se trataba de una institución obsoleta y onerosa.
Carlos III reacionó rápido, de manera discreta se reunió con todos los representantes de la Commonwhealt y aplicando un poder que no se ejercía hace muchísimos años, no acató la desición de Starmer.
Sir Keir no calculó con quien se estaba metiendo, incluso el más tonto de los monarcas carga con la experiencia de siglos -generaciones- para manejar el poder. No sería raro ver cualquier día de estos a Starmer renunciando y ver un a un tory de nuevo en Downing Street, ojalá que no elijan a otro idiota.
En fin, en todas partes se cuecen habas.
Y ya que estamos en miserias políticas, quisiera poner un pequeño comentario sobre la locura que ha desatado los resultados electorales de Franco Parisi en las últimas elecciones presidenciales.
Andan muchos asustados con Parisi y su 20%, muchos lo ven como un futuro líder político que irá ganando poder en el tiempo e incluso podría llegar a la presidencia en algún hipotético futuro.
En política todo puede ser, no hay nada imposible, pero yo creo que Parisi no tiene un gran futuro, no lo veo de presidente en realidad.
Lo he dicho muchas veces, la gran fortaleza de Parisi es su simpatía, nunca he conocido a alguien a quien le caiga mal, y ese es un gran activo para cualquier político. También habla de corrido, es muy articulado y convincente, aunque no brilla mucho por su inteligencia.
Esas son sus fortalezas, pero también tiene muchas debilidades que siempre lo llevan a una cadena periódica de autodesrucción.
Su capacidad para meterse en situaciones escandalosas es enorme: cuando se arrancó para no pagar la pensión alimenticia a sus hijos y ex mujer, los gastos fraudulentos presentados en una de sus campañas, la acusación por acoso sexual a sus alumnas en una universidad de Estados Unidos, la desastrosa administración de los colegios de la Masonería, la no menos desastrosa administración de un edificio...
En fin, los follones son incontables, parece tener un imán para involucrarse en situaciones deshonestas, vergonzosas y escandalosas. Es algo de su personalidad y cuando acumula fama encantando algunos incautos, al poco tiempo la pierde porque se encuentra metido en algún escándalo.
Es algo de su carácter que yo creo le va a pasar una y otra vez, no tiene estatura de líder y en mi opinión se convertirá en una segunda versión de Marco Henriquez Ominami. Recuerden que MEO sacó 1 millón 400 mil votos con un 5% en la elección del 2009.
Y antes que se me olvide: una cosa es Franco Parisi y otra muy distinta el Partido de la Gente (de los giles dicen los odiosos).
El partido de la Gente agrupa a buena parte del 80% de Pareto, que se aburrieron de ser engañados por políticos y ahora quieren que los engañe otro estafador, esta vez de fuera del sistema.
A ellos no les afectan para nada los escándalos de Parisi, ni que sea un chanta, simplemente les cae bien y votan por él.
Con un ejercicio imaginario simple, de pura aritmética, se puede sospechar que el 20% de Parisi debería venir principalmente de gente que antes votaba por la Concertación o la Nueva Mayoría.
Si Republicanos lo hacen bien van a votar por ellos en las próximas elecciones, incluso creo que muchos votarán por Kast ahora porque al chileno normal se le hace muy difícil votar por una comunista.
El mejor regalo que tuvo Kast fue la primaria oficialista donde pusieron a Jara de candidata. No podría haber soñado algo mejor que eso.




(Publicado originalmente el 24 de abril de 2008)