09 febrero 2023

Una mala noticia

Hoy bajé al centro a cortarme el pelo, poco a poco la ciudad va recobrando la normalidad después de las hecatombes que significaron la histeria del Covid-19 primero y después la entrada masiva de inmigrantes ilegales, en especial desde Venezuela y Colombia.

Hoy pocos mantienen la absurda paranoia de los contagios y la explosión de delincuencia, crimen violento y vagabundos también parece estar amainando, porque los malandras ya se están dando cuenta que en Arica no hay a quien robarle y es un lugar donde resulta relativamente fácil controlar a los delincuentes.

Poco a poco, pasito a pasito estamos volviendo a la normalidad después de los años más oscuros en la historia de nuestra ciudad desde hace mucho tiempo.

Una pésima noticia fue saber que mi peluquero de tantos años -al Tomás Jr. le cortaba el pelo desde que nació y hoy tiene treinta y tantos- cerró definitivamente la famosa peluquería "Cristian", la más tradicional de la ciudad donde se cortaba el pelo todo buen ariqueño: desde jueces y autoridades hasta vagos y cesantes como yo.

Era una gran peluquería y un verdadero club. Don Luis ya nos había conversado que pensaba cerrar este año, pero nos dio su teléfono porque ahora iría a cortar a domicilio. Me pareció una idea espléndida, pero cuando empecé a llamarlo el teléfono no contestaba y su local hoy está vacío. Qué gran pérdida.

En fin, nada bueno dura para siempre. Antes me cortaba el pelo don Silvio en esa misma peluquería, pasados los 90 años le llegó el alzheimr y tuvo que retirarse, luego murió el hermano de don Luis que también trabajaba allí y ahora fue el mismo don Luis que se retiró. Todo cambia, ya nada es como antes.

La cosa es que fui al Edificio Richards, el más antiguo de Arica y que siempre ha sido el lugar de las peluquerías, entré a la primera peluquería que vi y me atendió una señora peruana muy simpática que me preguntó -¿cómo quiere que le corte?- y yo le dije como siempre -haga lo que quiera- le dio mucha risa, me cortó el pelo y conversamos sobre el Perú, pasé un buen rato.

Pensar que antes me angustiaba cortarme el pelo...

14 comentarios:

  1. Mi peluquero me duro sus 45 años, el tiempo pasa. Aparentemente ahora se usa menos eso de quedarse con lo que funciona por años y años, y buscar opciones casi obsesivamente.
    A proposito lei por ahi algo como "este pais tiene mas peluquerias narco que panaderias"...no es malo, disminuir el consumo de pan. :-)

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    1. Las narco-peluquerías son una nueva industria que llegó con la inmigración ilegal, antes no existían en Chile y uno tenía que ir al barrio chino cuando quería comprar "algo", ahora vas al peluquero y le preguntas ¿cómo es?, le pagas y te da el vuelto en papelillos jajaja

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  2. Yo siempre peleaba con l peluquero porque me cortaba mucho el pelo.
    Yo le decía: Eres weon. A mi me gusta el pelo largo y si me lo cortas tanto no quedo conforme y me demoro más en volver. No hubo caso. Siempre lo mismo.
    Hasta que un día dije, esto no puede ser tan difícil y me compre un juego de tijeras. Dejé la embarrada, pero no se notó mucho porque tengo bastante pelo.
    La próxima vez me quedo mejor y ahora, hacen unos 10 años que no voy a una peluquería.
    El dicho de mi padre lo sigo rigurosamente. "Bien cortado, mal cortado, quince días, emparejado"

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    1. Es que cuando tienes harto pelo te puedes dar el lujo de dejarte el pelo largo, yo nunca pude, crecí en la época de los hippies y no me podía dejar crecer el pelo porque me aparecían los medios agujeros en la cabeza! En fin, es la suerte de algunos.
      Lo mismo con cortárselo uno mismo, si tienes harto pelo unos tijiretazos de más pasan colados pero si tienes cuatro mechas como yo, un tijiretazo mal dado y aparece el cráneo brillando en todo su esplendor

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  3. Acá en Conce ya no hacen la torta que mi hermano consumía para los cumpleaños, descontinuaron las empanadas y un sandwich que me gustaba en el Burger King y que comía por años y bueno, durante mucho tiempo hemos visto el inicio y el fin de varios locales y servicios predilectos.

    Son cosas rutinarias o no tan rutinarias que se dan por sentadas hasta que se pierden. Afortunadamente acá aparecen cosas que compensan las pérdidas, pero uno tampoco sabe hasta cuándo.

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    1. Esa es otra, en todas las ciudades hay alguna fábrica de empanadas o sandwichería de la que nos hacemos adictos. Como yo soy muy cagado les compro una vez a las mil quinientas pero igual son infaltables.
      Acá en Arica las empanadas Lico-lico (el fundador fue un chino y los peladores decían que eran de gato), también de La Temucana, que el dueño se cansó de ganar plata y vendió la marca.
      En sandwich era El Dinámico, que creo que ya no existe, hace tanto que no salgo...

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    2. Acá en Conce han habido varios restaurantes o sandwicheras buenas pero muy efímeras que han cerrado por A, B o C motivo y si no cierran, bajan la calidad y dejan de ser tan buenas como antes.

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  4. A los vecinos del Lico Lico alrededor de la plaza 1o de Mayo siempre se les perdían los gatos y uno que otro perro (a veces, cerca del 18) Son anécdotas de los años que viví en Arica y nunca se olvidan. Un amigo aseguraba haber visto trampas para cazar gatos en los techos, y nunca quería que su perro saliera a la calle. Es que estas muy gordito y te van a hacer empanada, jajaja.



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  5. "Uno nunca sabe lo que tiene, hasta que lo pierde" reza un dicho antiguo.

    A medida que el estallido del lumpen y la pandemia avanzaban en el país, el centro de santiasco dejó de ser un lugar atractivo, antes solia visitar lugares que creí estarían para siempre, pero con el tiempo y las circunstancias, terminaron cerrando sus puertas. tiendas donde hice como amigos a sus locatarios, cerraron y se fueron, muchos cerraron sus puertas con la esperanza de volver, pero jamás volvieron. Otros cambiaron de rubro y dirección y se me hizo dificil volver a contactarlos.

    Ahora donde vivo todavía está la peluquera buena onda que me corta el pelo desde que me cambié de casa en el 2010 y he sido su cliente fiel. es casi media hora o 45 minutos de chachara y tijeretazos, ella si sabe cual es mi corte de pelo favorito (corto, de gentleman), aunque una vez por un machetazo terminé siendo un jarhead (corte regular que usa el USMC) y tuve que usar una baseball cap por un buen tiempo.

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    1. Así es, cuando se pierden las cosas uno las lamenta y desde el 2019 hasta hoy han ocurrido verdaderas tragedias con los negocios de barrio, e incluso supermercados, todo por los malditos trolls, que sus almas se pudran en el infierno..
      Para mi sería absolutamente imposible un corte mohicano porque todo el pelo lo tengo por los lados, arriba me quedan cuatro mechas a lo Condorito, snif

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  6. ¿Todavía existen Los Figaros?

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    1. Ya no, justamente ,pensaba ir a cortarme allí (18 de septiembre al llegar a Lynch) y me encontré que hay una "barbería" venezolana o algo así, snif

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  7. Buenas tardes Sr. Tomas, aquí pasando lectura semanal, siempre tan variados sus temas, aunque no siempre comento.


    Por falta de tiempo dejé de ir a la peluquería, así que tuve que aprender a cortarme el cabello yo solo con máquina, ya tengo unos 12 años, al tener mi casa propia no había peluquería cercana y no queda de otra que aprender, o era invertir 3 horas en ir y venir o en 15 minutos en mi casa, preferí la segunda opción, y con unas 5 ocasiones ya pude agarrar práctica.

    Acá en mi ciudad también van en extinción esas famosas peluquerías tradicionales atendidas por gente muy mayor, ahora muchas parecen estéticas de última moda atendidas por gente joven que hacen todo tipo de peinados y hasta figuras y líneas de corte, claro para la gente con buena cabellera, yo nunca tuve buen cabello, así que nunca usé cortes de moda.

    Otro establecimiento que van para la extinción en mi ciudad Saltillo Coahuila, imagino que, en el resto del país, son las tiendas de la esquina, micro tiendas con lo más básico y que están siendo sustituidas por las tiendas Oxxo, con mucha mayor infraestructura y con horario de 24 horas.

    En fin, todo cambia o se moderniza.

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    1. Hola Ricardo, que bueno verte por acá.
      Es una suerte poder cortarse el pelo uno mismo, a mi me encantaría poder hacerlo pero tengo el problema de poco pelo muy delgado e irregular, ¡así es que un solo tijiretazo mal dado y me queda el cráneo al descubierto! Es un problemón.
      Lo que comentas de la desaparición de los negocios tradicionales es verdad, se ve en todas partes y la razón es natural ¡los que lo atienden se van jubilando o se mueren!
      A medida que envejecemos, el peluquero, el mecánico, el gásfiter el carpintero y el abogado de confianza se van perdiendo y cuando necesitamos uno tenemos que partir de cero buscando. Es muy desagradable, pero la ley de la vida me imagino.
      Acá también los supermercados le quitan algo de público a los negocios de barrio, pero estos últimos se defienden por la cercanía. De solo pensar en estacionarme en los grandes espacios del supermercado me bajan las ganas de ir, solo lo hago cuando necesito algo que no haya en ningún otro lado.
      Eso de que atiendan las 24 horas me parece extraordinario, me encartaría que acá tuviésemos algo así.

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"Send me a postcard, drop me a line
Stating point of view
Indicate precisely what you mean to say
Yours sincerely, wasting away
Give me your answer, fill in a form
Mine for evermore
Will you still need me, will you still feed me
When I'm sixty-four"