Que cosas pasan en América Latina. El ex presidente Lugo de Paraguay, antes que le viniera la inquietud por el servicio público fue pastor de almas, llegando al grado de Obispo en la iglesia católica. Pero el señor Obispo empezó a tener problemas cuando algunas mujeres lo demandaron por paternidad: o sea había engendrado hijos que no quiso reconocer y la justicia, vía exámenes lo obligó a reconocerlos.
Parece que Monseñor era como un burrito en primavera, porque no fue una sino tres mujeres distintas que lo denunciaron por dar este particular tipo de consuelo, no solo al alma acongojada sino que también al cuerpo -probablemente mal atendido- de las damas en cuestión. Algunos dirán que el celibato es obsoleto y que mejor que atendiera señoras a que se dedicara a los niños, yo no lo veo así. Si un fulano es capaz de dejar emabrazadas a varias mujeres y despúes dejarlas abandonadas a su suerte con el crio, creo que es válido poner en duda su condición de hombre.
Aunque bueno, muchos lo hacen. Pero si además, después de hacer la chanchada se va a hacer misa y se sube al púlpito a predicar mientras busca entre las feligresas a su próxima presa, creo que lo menos que se puede pensar es que se trata de una porquería de ser humano, capaz de las peores hipocresías. Bueno, no es extraño que con esos antecedentes de sicopata a Monseñor se le haya ocurrido entrar a la política, y si tenía tal facilidad para engrupirse a las minas tampoco es raro que se haya cuenteado a un electorado mayoritariamente estúpido, como son en todas partes donde hay elecciones.
Si yo supiera que a un tipo como Lugo, hipócrita y caradura profesional, lo persiguió una turba y le rompió las costillas a patadas no me habría dado mucha pena. Tal vez habría sentido la misma oculta satisfacción que cuando pillan a un carterista en la calle, descarado y prepotente para quien la cárcel no es castigo, y le dan una buena pateadura. O que a un asaltante de casas lo recibieron con un certero disparo en la cabeza. La verdadera justicia tiene mucho de retribución y venganza.
Finalmente al hipócrita no lo soportó ni su propio partido y el parlamento en menos de 24 horas lo despojó del cargo que alegremente ostentaba, para escándalo de progres, de otros idiotas latinoamericanos y también nuestro mandatario para variar. En practicamente todas las constiituciones democráticas el parlamento, con un quorum suficiente puede hacer un juicio político y mandar para la casa al presidente. El propio Nixon tuvo que renunciar para evitarse esa verguenza. Que puedo decir, me alegro tanto como cuando a un ladrón lo persiguen y lo patean en la calle: justicia por mano propia.
Traté entonces de borrar ese ejecutable de inicio usando Ccleaner y cuando estaba en eso vino la catástrofe típica de cuando un virus se activa. Empezaron a aparecer cientos de ventanas una encima de otra y finalmente una muy parecida a un servicio de Microsoft diciendo que el disco duro tenía sectores dañados y que había que repararlos. Estúpidamente cometí mi segundo error consecutivo haciendo click en "reparar" cuando empezaron a aparecer mensajes que no eran de Windows decidí un apagado de emergencia, manteniendo apretado el botón de encendido.
Al volver a encender se cargó el Windows pero sin ninguno de los servicios ni programas en el menú, ni siquiera podía mirar los discos así es que coloqué "explorer" en la ventana de ejecución, lo que me permitió mirar el disco: mi carpeta de usuario estaba completamente vacía.
Pensé que era un buen momento para correr el antivirus (AVG) y así lo hice, después de una hora o algo más encontró y eliminó los dos virus que tenía. Eso es lo que debí haber hechos al principio pues, y me habría ahorrado un montón de problemas.
Ya no tenía virus -lo volví a chequear en startup- pero mi carpeta de usuario segía vacía aunque noté que tenía un pequeño candado abajo ¡lo tengo! pensé, solamente habían ocultado toda la carpeta y era cuestión de cambiar los permisos de seguridad para recuperar todo. Estuve como una hora más tratando de cambiar los permisos pero no había caso.
Entonces me acordé de los puntos de restauración, con explorer me fuí a la carpeta Windows/System32 y busqué entre los cientos de programas que aparecen el que permite restaurar el sistema a un punto anterior, con eso cambiarían todos los permisos. Por búsqueda y descarte finalmente llegue al famoso programa y escogí un punto de restauración de varios meses atrás. Otro buen rato para restaurar y después problema solucionado: no tenía virus y todos mis archivos estaban de vuelta.
Bueno, como los virus aparecen por temporadas coloco esto por si a alguien más le pasa. Si hay sospecha de virus lo que recomendaría es ir a inicio de windows y en la pequeña ventana que aparece escribir msconfig, luego marcar la pestaña startup o inicio, si encuentran un programa que no conozcan allí es muy probable que sea un virus o troyano. Antes de hacer cualquier otra cosa recomiendo que ejecuten el antivirus (AVG tiene una buena versión gratis) y si en el proceso el virus se les activa, bueno, hagan como yo nomás.
