25 marzo 2008

Sabiduría flaite

Anoche me fuí a acostar cansadísimo, estuve todo el día ayudando a un amigo y en la noche andaba como si me hubiese atropellado un tren. Dormí de un viaje, bajo la anestesia del cansancio y me desperté hoy en la mitad de un sueño. Ahora se por que no me acuerdo de los sueños: son historias aburridas y sin sentido.

Poco a poco vuelvo a recuperar la consciencia y ya estoy de nuevo despierto, aunque todavía un poco confundido. Debí haber dormido un poco más seguramente. Sigo leyendo En el Viejo Almendral de Joaquin Edwards Bello, que libro más entretenido, lo voy consumiendo de a pedacitos para que me dure. Edwards Bello es uno de los pocos novelistas chilenos que sabía redactar, formado en el periodismo conocía el valor de los dialogos, y de párrafos cortos y claros, una idea, un párrafo, miren:

"Después de un rato, el señor Higinio me sacó de apuros; rió con malicia y dijo:
-Tal vez quiere un caballo más vivo.
-Eso mismo - respondí.
Otros hombres de las caballerizas habían salido a mirarnos y sonreían de manera enigmática, sin mezclarse en la conversación...
El señor Higinio cambiaba de expresión; su mirada no era pareja. Si se dirigía a mí era una; cuando lo hacía a sus familiares era otra...
La lucha de clases es feroz y se encuentra hasta en la sopa. El hombre rústico, el gañán, pretende engrandecerse diciéndose que el futre no sirve para nada; la política ayuda a estas ideas, dando a entender que la gente acomodada de la ciudad explota al pobre y no es capaz, a menos que pruebe lo contrario..."

Redactaba bien el inútil de la familia -así le decían a Edwards Bello sus millonarios parientes- la verdad es que redactaba mucho mejor que otros pisiuticos como Huidobro, y para que hablar de los insoportables escritores proletarios como Nicomedes Guzmán, Pezoa Véliz, o los criollistas soporíferos como Mariano Latorre o Coloane. Chile nunca fue un país de buenos novelistas y cuando Edwards Bello se dejó tentar por las novelas de ideas como El Roto y otros mamarrachos parecidos que escribió, tuvo resultados lamentables. De lo que yo conozco, algunas novelas de Edwards Bello y de Manuel Rojas son lo único rescatable.

Ayer vi en un seminario al hijo de Oscar Ladarraetche usar la palabra sabiduría flaite, me llamó la atención el concepto, decía que el Banco Central debería usar mas calle, más cancha, mostrar la cuchilla a los especuladores. Algunos de los que escuchaban se ponían la mano en la frente, otros se tapaban los ojos y la mayoría miraba a un punto indefinido entre el podium y el techo. Lamentable el señor economista, profesor de la Chile, hijo de un prócer de la Concertación , que con su retorica seguramente encantará a los huachacas y republicanos de la nueva izquierda.

El problema de las dinastías es que normalmente sufren un problema desgenerativo, el hijo de Einstein no tenía ningún brillo pero si su papá lo hubiese hecho sacar un doctorado en física y lo hubiese podido colocar enseñando en Princeton como lo hacen hoy los políticos veríamos el mismo deterioro que hoy se nota en la política: Frei hijo, Bush hijo, Ominami hijo, Rossi hijo, Lagos hijo, Aylwin hija, Etcheberry hijo... uff, que lista interminable.

"Agradezco al gobierno el haber confiado en mis capacidades aún siendo un recién llegado al servicio público y darme la oportunidad de probar lo que valgo a pesar de no tener trayectoria, y aprovecho de desmentir todos esos rumores de mala leche que han sugerido que mi llegada al puesto de Alto Comisionado tiene algo que ver con el hecho de que mi padre sea presidente de la republica"

Bah, mejor me voy a dormir una siesta.

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"Send me a postcard, drop me a line
Stating point of view
Indicate precisely what you mean to say
Yours sincerely, wasting away
Give me your answer, fill in a form
Mine for evermore
Will you still need me, will you still feed me
When I'm sixty-four"