Dólares, euros, criptomonedas: Parte 3

He escrito varias veces antes sobre la tecnología blockchain y también sobre las criptomonedas como el bitcoin, especialmente como funcionan y las amplias posibilidades de estafa que aparecen  en torno a supuestas "inversiones" relacionadas con el bitcoin o cualquiera de las cerca de 19.000 criptomonedas distintas que existen.

Todo eso que ya he escrito debería ser suficiente para hacerse una idea de que se trata, pero me parece que hay otras cosas más generales que todavía no he comentado, algunas de esas son cosas fundamentales, que modelan las tendencias de largo plazo tal como he tratado de explicar con el dólar y con el euro.

El que haya leído un poco de historia encontrará semejanzas y paralelos entre las actuales criptomonedas y otros intentos de crear dinero que han existido a lo largo de la historia. 

Quiero poner hoy como ejemplo los paralelos entre criptomonedas y los Dólares del Congreso, que fueron el primer papel moneda que existió en los Estados Unidos.

Los padres fundadores tenían una gran desconfianza hacia el gobierno y sus regulaciones, a diferencia de nuestras constituciones tercrmundistas, dedicadas a consagrar privilegios, la Constitución de los Estados Unidos está dedicada casi integramente a defender a los individuos contra los abusos y privilegios de quienes estaban a cargo del estado.

La filosofía fundacional americana descansaba en la protección de las libertades del individuo frente al Leviatan estatal, por eso la canción nacional lleva esa línea "the land of the free and the home of the brave" (la tierra de los libres y el hogar de los valientes). Una consecuencia de esto era la repugnancia que sentían hacia el señoraje monetario del gobierno, es decir su facultad monopólica de emitir dinero. Muchos preferían que cualquiera imprimiera su propio dinero y que este fuera aceptado o rechazado según la confianza que los demás tuvieran en él.

Esa misma idea tuvo Satoshi cuando inventó el bitcoin, el concepto base es que ninguna autoridad política o estado es necesaria para que la gente confíe en el dinero, para esa confianza basta el consenso y la reputación. Si lo piensan bien, así es como funciona -por ejemplo- el comercio online, donde pagamos un producto por adelantado y casi a ciegas, basados solo en fotos y descripción y nos quedamos esperando que envíen exactamente lo que pagamos. ¿Qué pasa si eso no ocurre? Ponemos una queja y calificamos mal al vendedor, su reputación -supuestamente- se mancha y nadie más le compra.

Esto no es un sistem perfecto, pero funciona bastante bien en Aliexpress, eBay o MercadoLibre porque la compra de un artículo bien identificado es un proceso sencillo y resulta fácil detectar una estafa o incumplimiento. No ocurre lo mismo cuando usamos una criptomoneda, que es un proceso mucho más complicado y si somos estafados no tendremos a quien reclamarle. Fíjense como en las compras online donde Aliexpress y los otros ofrecen cierto nivel de garantía de satisfacción, pero las transacciones en criptomonedas son peer to peer, así es que no hay nsdie que pueda garantizar que no van a estafarte.

Cuando se establecieron los Dólares del Congreso hubo una fuerte controversia, Jefferson creía en un país descentralizado donde cualquiera podía emitir moneda, Hamilton en cambio tenía la idea que un banco central era indispensable. En 1830 Estados Unidos no tenía banco central y el gobierno autorizaba a los bancos privados a emitir sus propios dólares. 

En 180 habían cerca de 10.000 tipos distintos de dólares circulando y al ir a comprar con un billete, se debía negociar en el mostrador su valor y el precio del bien, ya que si el billete era del Banco de Filadelfia su valor se estimaba diferente a si era emitido por un hotel de Virginia, esto complicaba enormemente el proceso de compras y ventas. Y para que hablar de las "falsificaciones", bastaba que cualquiera inventara un banco e imprimiera billetes con ese nombre, ni siquiera necesitaba imitar a los billetes "reales". El caos que esto produjo fue el fin de los "Dólares del Congreso", luego de eso Abraham Lincoln decretó la emisión de una moneda unificada con respaldo del estado: los "greenback".

Eso que pasó en los años del Far West tiene un paralelo actual con El Salvador, donde al presidente Nayib Bukele se le ocurrió la estúpida idea de declarar las criptomonedas como dinero de curso legal. Como si esto fuera poco compró con plata del estado millones de dólares en bitcoins que -como se sabe- han perdido cerca del 50% de su valor en el último tiempo.

A mi que me gusta ver youtubers, he podido ver la desesperación de muchos salvadoreños que tienen ahorros o reciben pagos en una "moneda" cuyo valor respecto del dólar cambia cada minuto. Hasta el momento la aceptación de bitcoins como medio de pago es voluntaria, pero existe terror entre los comerciantes que la vayan a hacer obligatoria ¿cuanto va a cobrar un comerciante en una "moneda" que no sabe cuanto va a valer el día o la hora siguiente? Existe un caos espantoso y El Salvador está al borde de la cesación de pagos, en buena parte gracias  esta brillante idea.

Como decía, existen actualmente como 19.000 criptomonedas distintas: Bitcoin, Etherium, Luna y muchas más. Cada moneda sufre variaciones violentas e incluso algunas como Luna ya no valen prácticamente nada ¿qué pasa con los que invirtieron mucha plata en esa moneda? Pueden ir a reclamar a la FIFA, tal vez les hagan caso. El Bitcoin, la moneda más antigua ha perdido cerca del 50% de su valor. Creo que fue el año 2017 o algo así cuando Bitcoin perdió 90% de su valor, después volvió a recuperarlo pero perfectamente pudo haberlo perdido para siempre.

Hoy es fácil hablar contra el Bitcoin porque prácticamente todos los que han invertido en esa moneda están sufriendo fuertes desvalorizaciones, pero ese no es el punto. Como solo responde a expectativas del momento Bitcoin puede subir o bajar muchísimo, sin necesidad de una razón "lógica" que lo explique, entonces no se puede planificar nada con él, es como comprar un boleto de la lotería o en el mejor de los casos como un juego de ruleta

Muchas de las predicciones que se han hecho todos estos años a favor del Bitcoin han resultado falladas. Decían que sería el valor refugio por excelencia contra un inminente colapso de la moneda fiat (en particular del dólar). Bueno, el mercado ha hablado todos estos años y Bitcoin nunca ha servido como moneda refugio, con su volatibilidad, nadie en su sano juicio invertiría en eso para proteger el valor de sus activos. En tiempos muy difíciles, el Bitcoin pierde valor, el dinero fiat y los metales preciosos en cambio se fortalecen.

Algunos ricachones que han metido gran cantidad de plata en criptomonedas, como Musk, Kawasaki o Sailor, las defienden a brazo partido y aseguran que es una gran oportunidad para comprar ahora que el precio está por el suelo, pero el consejo viene muy de cerca, lo que pasa en realidad es que están tratando de hacer subir el precio para no enfrentarse a las pérdidas billonarias que vienen en camino.

Nunca, jamás hay que hacerle caso a los consejos de un inversor exitoso. Si ellos saben algún secreto mágico para hacerse billonarios -lo dudo- seguro que se lo tendrán guardado bajo siete llaves, y los consejos "desinteresados" que generalmente entregan no son otra cosa que intentos de manipular el mercado a su favor, haciendo que los giles compren o vendan según lo que a ellos les interese.

Todo el que invierte en Bitcoin hoy es un ignorante, porque no existe nadie que conozca a fondo todo el proceso y que haya auditado toda la cadena de aplicaciones de software por las que el dinero se convierte en una anotación en el blockchain y viceversa. No es tan terrible ser ignorante pero hay que tener en cuenta que existen dos clases de ignorancia.

Una es -por ejemplo- la del campesino analfabeto, que cuando le hablan de algo intelectualmente sofisticado no lo entiende y se da perfectamente cuenta de eso, podríamos llamar a eso la "ignorancia del tipo 1". Pero hay otra que es la del ingeniero, economista o cualquier otro profesional preparado, que solo tiene conocimientos superficiales de un asunto pero cree que lo entiende todo perfectamente, esa sería la "ignorancia del tipo 2".

Los que invierten en Bitcoin actualmente son todos ignorantes del tipo 2, tengo amigos que son ingenieros, magister y doctores que hablan con mucha seguridad sobre el asunto, están realmente convencidos que se trata de algo que ellos dominan. Esa ignorancia es la peor, porque la falsa seguridad del que no sabe es mucho más peligrosa que la ignorancia simple, usan argumentos de autoridad y lo peor es que muchas veces terminan convenciendo a los ignorantes del tipo 1.

Las criptomonedas fueron una pésima idea, todas, aunque la tecnología blockchain es un invento brillante, todavía no encuentra aplicaciones que le saquen provecho, ni Bitcoin ni ninguna otra criptomoneda son dinero, ni siquiera se le acercan, se parecen mucho más a una ruleta y las burbujas de precios que han alcanzado algunas criptomonedas se deben a que han capturado emocionalmente a un gran número de incautos, que tienen poca o ninguna idea de lo que están haciendo pero se sienten expertos inversores.