Nos estamos volviendo a juntar los amigos de siempre. Esta vez an la casa de Waldeke que está viudo de invierno y aparece al fondo tomando la foto, mientras yo ataco una cebollita bajo la atenta mirada de mi amigo de tantos años don Jote Viera.
Cada día más viejos, así es que ahora comemos y tomamos poquito, ahí se nota el peso de los años. Hicimos un mini-me, con chuletas de chancho, prietas, chorizos, cebollas, pebre y no recuerdo que más, un par de botellas de vino y listo, el Tito Torres sonríe a la cámara mientras yo sigo depredando la parrilla
Finalmente el arquituerto sacando fotos tal vez para mostrarle a su querida esposa que se está portando bien. Con él y el Prati tenemos la misma edad, a punto de cumplir 70 somos la patrulla juvenil , los demás viejucos tienen más años que una banda de lorosEn fin, un buen momento como siempre, Como decía Serrat mi santa madre me lo decía: cuídate mucho, Juanito, de las malas compañías.Nada interesante que contarles hoy, tengo nucho que hacer con el auto y unos arreglos en la casa, así es que ya con esta me despido. Hasta mañana
Hola Tomas- que lindo ver rostros de mi querida Universidad Catolica del Norte y verte salir a disfrutar la vida sin tener que estar reaguardando "el fuerte". Un par de observaciones: 1) cómo lo hace Tito para tener tanto pelo todavía? Y 2) cómo te hiciste tan amigo de "los profes"? Cari,os para ti y la family desde Baltimore
ResponderBorrarHola Lilian! Lo del pelo del Tito es uno de los mayores misterios de la física cuántica, nadiue se lo explica ¿usará un peluquín? Parece que no porque le he visto las mismas mechas tiesas durante décadas.
BorrarMi amistad con estos personajes es de los años ochenta cuando trabajámos juntos en Super Audio, al Viera yo lo conocía del 86 más o menos en la Zona Franca donde él era gerente de Nueva Compañía.
Desde esos años no hemos dejado de juntarnos, el Viera es una especie de "amado líder" porque alrededor de él se organiza todo, pone la parcela y los amigos. Desde esos años 86-87 más o menos nos hemos juntado en el Ferroviario, El Coteto, Los Aleros, el Cavancha y muchos otros lugares que hoy están desaparecidos, pero sobre todo en la casa de alguno de nosotros.
Llegamos a tener un grupo como de 60 que nos juntábamos en la parcela pero entre los que ya no viven acá y sobre todo los que ya NO VIVEN, estamos reducidos a cinco gatos. Pero aún hay patria, todavía nos juntamos a comer, tomar y hablar las mismas tonteras de siempre
Jajajaja que bien. Y mientras casi todo el resto del país está resguardado de los temporales en Arica la gente sigue celebrando y tomando El solcito
BorrarObvio pos hombre ¿de qué temporal me habla???
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