Diez años más tarde el gobierno chileno en un gesto de fraternidad al pueblo del Perú envía a Lima los restos de algunos héroes peruanos fallecidos en las batallas de Tacna y Arica, el día 8 de julio de 1890 son embarcados desde Arica los féretros que transportan los restos de los héroes peruanos en el vapor “Lima”, encabezaba la delegación peruana de recepción el Vicealmirante don Manuel Melitón Carvajal, héroe de “Angamos”, uno de los sobrevivientes del “Huáscar”, los restos enviado a Lima para ser sepultados en la cripta de los héroes del 1879 correspondían entre otros a: Alberto Téllez, Alfredo Maldonado, Gregorio Albarracín, José María Vázquez, Carlos María Vidal, Enrique Chocano, Nicolás Ortiz, Samuel del Alcázar, Alfonso Ugarte, Adolfo King, Francisco Álvarez, José A. Belaúnde, Carlos Escobar, Guillermo Santana.
Arica, Junio 8 de 1880.
La Historia de la guerra en que estamos empeñados, contará entre sus más brillantes episodios la jornada de ayer. Difícilmente podrá acumular en otro punto la naturaleza y la ciencia militar mayores elementos de fuerza y de resistencia, posiciones naturales invisibles, fortalezas inexpugnables, poderosísima artillería, minas convenientemente colocadas para estallar, en el momento oportuno, todo hacía de este puerto una poderosa ciudadela, que podría sin temeridad, defenderse contra un grueso ejército. Sin embargo en poco más de una hora de combate, estuvieron en nuestro poder todas las fortalezas del enemigo, sin que los cañones ni las explosiones formidables de las minas, ni el nutrido y mortífero fuego de fusilería, hecho por 2.000 hombres bien parapetados, pudieran detener la marcha de nuestros soldados, que luchaban a pecho descubierto.
Cupo en suerte vencer mayores resistencias y por lo mismo, adquirir mayor gloria a los regimientos 3º y 4º de línea, que han merecido bien de la patria con su bizarro comportamiento.
Reciban, pues, los bravos de esos dos cuerpos, las felicitaciones que les envío en nombre de la nación. Recíbanlas igualmente los regimientos Buin y Lautaro, la artillería de la División, el batallón Bulnes, los escuadrones de Cazadores y 1º y 2º de Carabineros de Yungay, porque todos ellos han cumplido noblemente con su deber en los puestos que se les designaron.
A los que cayeron en el campo debemos envidiarlos porque tuvieron la suerte de morir por la patria, honrándola con sus sacrificios y con la gloria imperecedera que le han dado.
Entre ellos merece especial mención el teniente coronel don Juan José San Martín del regimiento 4º de línea, que fue siempre un jefe distinguido y murió heroicamente preocupado hasta su último instante de la suerte y de la gloria de su país.
El General en Jefe.
Dispone igualmente el general que el cadáver de don Rafael Sotomayor, depositado en el “Cochrane”, sea conducido al sur, junto con el del Comandante San Martín, y que los cañones del Morro, hagan los honores de ordenanza, a los restos del ex Ministro de Guerra y Marina, en conformidad a la Orden del día, expedida en las Yaras, el 21‑5-80.
El Ministro Sotomayor de profesión abogado, había fallecido el 20 de mayo, 18 días antes de la toma del morro. Se había desempeñado como Ministro en Campaña, su muerte se debió a un ataque de apoplejía, alrededor de la una de la tarde, siendo asistido por el Cirujano Jefe, Allende Padín (abuelo del ex presidente Salvador Allende). Sus restos fueron recibidos en Santiago por el Presidente, Ministros y Comandantes en Jefe y hoy reposan el Mausoleo de la familia Sotomayor.
El cadáver del Comandante San Martín, fue entregado a la familia compuesta de su pequeña hija y su hermana Luz San Martin y es posible que se encuentren perdidos en el cementerio de Chillán o Coihueco.
San Martin a los 14 años había ingresado como soldado raso al 4º de Línea en Chillán y a los 41 muere en el Morro, como su Comandante. El niño de Coihueco, nacido entre los bosques de Ñuble, que arrullado por el viento entre los guayes y el río que salta entre las rocas de su cauce, queda allí tendido sobre la arena de la pampa, muerto por la Patria.
San Martin a los 14 años había ingresado como soldado raso al 4º de Línea en Chillán y a los 41 muere en el Morro, como su Comandante. El niño de Coihueco, nacido entre los bosques de Ñuble, que arrullado por el viento entre los guayes y el río que salta entre las rocas de su cauce, queda allí tendido sobre la arena de la pampa, muerto por la Patria.
¿Que les parece la fotografía y la historia? para mi son totalmente nuevas, lo mismo el hecho que el abuelo de Salvador Allende haya sido cirujano de guerra durante la campaña y haya atendido en su muerte a don Rafael Sotomayor, uno de nuestros mayores héroes de guerra, quien también fue tatara-abuelo de mi prima política Laurita Croqueville Sotomayor viuda de Bonilla. Ah que historias, hasta mañana.
Tengo en mi poder el discurso completo del traslado de los féretros en 1890. Lamentablemente me estoy mudando y ya lo guardé, pero apenas lo tenga disponible transcribo algunos párrafos. La edición que tengo es de 1909. siempre sostuve que es interesante para los ariqueños conocer la historia de su ciudad en la época peruana hasta 1880 y en la época "casi peruana", entre 1880 y 1929. Chile ha ocultado durante mucho tiempo esa historia y especialmente durante el gobierno de Pinochet. Iquique era más grande y poblada que Arica, y también tiene mucha historia peruana oculta entre los genes de sus propios pobladores actuales.
ResponderBorrarPor supuesto,Armando!
ResponderBorrarArica - lo dice en la propia historia de Arica de la Wikipedia que no puede mentir - era el principal puerto de salida de la plata potosina hasta que se habilitó la ruta a Buenos Aires.
Pero, a su vez, esta ruta se habilitó con la creación del Virreinato del Río de la Plata.
Pero resulta que cuando el rey Carlos III pedía informes a sus delegados elucubrando fundar un virreino al sur del Perú los informes del gobernador del Buenos Aires no llegaron y el informe de Manuel de Amat y Juniet opinó que en Buenos Aires apenas debía fundarse una Audiencia y que el Virreinato austral debía centrarse en Chile y abarcar hasta el Atlántico.
Cuando el proyecto estaba en estudio, y la única opinión autorizada era la de Amat y Juniet, un comandante mercernario alemán al servicio de Portugal en Sao José do Norte, Brasil, atacó el fuerte español de Santa Bárbara y reouperó Rio Grande para la corona portuguesa. Fue el 1 de Abril de 1776. Llegada la noticia a España, en Junio llamaron al ex-gobernador de Buenos Aires, le dieron un Virreinato con cabeza en esa ciudad y tropas y provisiones para que volviese a reconquistar el terriorio (cosa que hizo, pero después se perdió y ganó varias veces más)
Así Chile no fue cabeza del Virreinato al Sur y Arica cedió su predominio a Buenos Aires. El alemán responsable de todo esto fue:
http://de.wikipedia.org/wiki/Johann_Heinrich_B%C3%B6hm
... Amat y Juniet, me faltó decir, era el Virrrey del Perú y evidentemente prefería otro virrey al Sur suyo del lado del Pacífico y no en el Atlántico. Pero el ataque portugués asi como la ocupación inglesa de Malvinas convecnieron a Madrid que necesitaban una cabecera en esa lado de Sudamerica.
ResponderBorrarTodo eso lo estudiamos en el colegio. Recuerda que el curso de Historia del Perú es muuuy amplio, ya que hasta ese momento el Perú abarcaba toda la Sudamérica hispana incluyendo a Panamá (menos Venezuela, naturalmente, que era una capitanía de México). Al momento de independizarse Buenos Aires, Arica y Tacna fueron de los primeros dominios que proclamaron la independencia del Perú. Zela, Paillardelle, Unanue, etc, ilustres tacneños y ariqueños fueron los grandes forjadores de nuestra independencia. Castilla, gran tarapaqueño, sirvió al ejército realista derrotando a los independentistas chilenos en 1816, recibiendo sus primeras medallas en Santiago ese año, luego ya en el lado patriota peleó en la batalla de Ayacucho y consolidó la independencia del Perú, del que fue presidente 3 veces. La consolidación de nuetra nacionalidad se dio en las audiencias de Lima y Cuzco, que confoormaron la base del actual Perú, pero nació en nuestro sur.
ResponderBorrarAh y hablando del crucero que fue a rescatar los restos de los héroes en Arica, aquí la canción criolla compuesta en esa ocasión.
ResponderBorrarYa salió el crucero Lima,
todo cubierto de luto
recorriendo aguas chilenas
en busca de Miguel Grau.
El valiente Miguel Grau,
con su Huáscar se batió
le volaron medio cuerpo,
y en el mar se sepultó.
Adiós Tacna bella palma, Adiós Arica laurel
ya se fue tu hijo querido, no lo volverás a ver. (Bis)
(Hablado)
Por Piura y el Perú, Almirante Miguel Grau
con tu Huáscar en la gloria está.
Si Leónidas el bravo espartano
defendiendo su patria murió,
Miguel Grau, el valiente peruano
con su Huáscar se inmortalizó.
Si en Lima por mí preguntan
díganles que preso estoy
el que quiera rescatarme
en Santiago de Chile estoy.
Adiós Tacna bella palma, Adiós Arica laurel
ya se fue tu hijo, no lo volverás a ver.
Notable. El curso oficial de historia argentina, en cambio, propone mas bien un nacimiento mágico en 1810. El período colonial es descripto como una aburrida siesta sin novedades y ocupa una página del libro. Todas estas opciones - tener un gran pasado, no tenerlo, pretenderse una nación que se forjó de la nada, etc...- son decisiones políticas educativas.
ResponderBorrarAh amigos,tanto tiempo. Me avergüenza confesar que estaba dedicado a algunas actividades bajas e innobles cn objeto de rellenar mis escualidos bolsillos, pero heme aquí de nuevo, ocioso como de costumbre.
ResponderBorrarArmando, un amigo de Tacna me comentaba que hay temas históricos que son una especie de tabú en ambas ciudades:en Arica se trata de borrar todo lo que ocurrió antes de 1880 y en Tacna todo el período entre 1880 y 1929, es más o menos entendible en vista que los territorios pasaron por distintas manos. Hay un gran trabajo histórico pendiente en estas ciudades. En una de esas el vals se puede encontrar en mp3, voy a buscarlo.
Ulschmidt, como dices las historias oficiales son siempre con fines educativos y edificantes, yo pienso que si se falsea con tanta facilidad hechos que pasaron no hace muchos años, de los que tengo perfecto recuerdo ¡como no se habrán falseado los que pasaron hace 100 o 200 años! Por eso a mi me interesa mucho más la historia cotidiana de quien se casó con quién o a quién le pusieron los cuernos, la farándula histórica no se si será más o menos exacta pero al menos no hay tantos interesados en acomodarla.
por supuesto, por supuesto: lo importante es saber a quien le pusieron los cuernos! (no es que la Ley Bradanovic no se cumpla para todos: es que a uno le gusta enterarse de cuándo y cómo... tratándose de los vecinos)
ResponderBorrarPero no nos engaña porque sabemos que la Historia le apasiona. Pienso que a Armando también y a varios que concurrimos acá. En lo personal destruí varias capas de historia: la escolar, la oficial, la nacionalista, la revisionista, la populista, la liberal. etc.. Aquí se escribe mucho sobre todo y yo he leído bastante. Ningún fenómeno es simple y las versiones arrecian. Toda historia en el fondo es el intento de establecer un Mito.
A todo esto acaba de ganar Humala en el Perú, un nacionalista relacionado con el etno-cacerismo: los vahos de la Historia se mezclarán con el crecimiento globalizado? descenderá Viracocha y nos mostrará el camino mientras desciende la cotización de la Bolsa?
Ah lo de los cachos ¿podrán haber historias más importantes? SObre todo los detalles: donde,como,cuando, con quien, cuantas veces, jajaja!
ResponderBorrarUlschmidt, Armando, les encuentro toda la razón y a mi me encanta leer historia -la oficial y de la otra- porque incluso cuando son inventos nos cuentan verdades. Es como escribió Vargas Llosa "la verdad de las mentiras".
Los mitos y los héroes no importa si son de verdad o mentira pero dicen mucho sobre el pueblo que los crea. Por ejemplo cuando yo leo la historia de Arturo Prat, la mayor parte de su vida pobre, oscuro, bueno para sacrificarse ¡es un ideal chileno! aunque el real Arturo Prat no haya sido así que importa, es el chileno apocadito, genio y figura que de repente muestra que tenía un lado heroico que nadie le conocía. Esos son arquetipos.
La mujer de Prat, doña Carmela, fiel al arquetipo se negó durante toda su vida a aparecer en un acto público de homenaje a su marido. Y no porque no estuviese orgullosa -lo estaba mucho- sino porque pensaba que "no se debía ostentar".
Los paises y las ciudades, todos estamos modelados de mitos, por eso la historia es tan interesante. Que sea verdad o mentira es lo que menos importa, lo que importa es que muestra como nos vemos a nosotros mismos y lo que queremos creer.
Yo creo en la opinión de Tácito sobre la Historia; "La ley de la Historia consiste en no decir nada falso, ni omitir nada verdadero".
ResponderBorrarDesde esta perspectiva siempre me ha parecido despreciable el "crear figuras heroicas donde nunca las hubo". Es cierto que los gobernantes peruanos requerían de "crear o montar" héroes ya que en aquella época carecían de estos y necesitaban urgentemente de esos modelos; se acercaba la invasión a Lima por parte de las fuerzas chilenas.
A continuación trascribo a ustedes el parte del segundo comandante (accidental) del Morro de Arica, Manuel Ignacio Espinosa, obviamente, de nacionalidad peruana:
" Mientras tanto, la tropa que tenía su rifle en estado de servicio seguía haciendo fuego en retirada hasta que los enemigos invadieron el recinto, haciendo descargas sobre los pocos que quedaban allí; en esta situación llegaron a la batería el señor coronel don Francisco Bolognesi, jefe de la plaza, coronel don Alfonso Ugarte, V. S., el teniente coronel don Roque Saenz Peña, que venía herido, sargento mayor don Armando Blondel y otros que no recuerdo; y como era ya inútil toda resistencia, ordenó el señor Comandante General que se suspendiesen los fuegos, lo que no pudiendo conseguirse de viva voz, fue el señor coronel Ugarte personalmente a ordenarlo a los que disparaban sus armas al otro lado del cuartel, en donde dicho jefe fue muerto."
No es un parte chileno el que dice que Bolognesi ordena cesar el fuego y rendirse, no, es el propio comandante peruano.
Seguir ensalzando o creando héroes que no lo fueron, no es la finalidad, creo, de ningún historiador serio.
Saludos
Bueno, los "hechos" históricos siempre son discutibles incluso siendo relatos de primera mano. Yo recuerdo el montón de historias que circuló por años (muchas todavía circulan) sobre la muerte de Allende en la Moneda, o sobre muchos relatos de torturados de gente que yo conozco, que son cien por ciento inventados, que cada vez cuentan una versión distinta e igualmente detallada. Este se produce en todos los bandos y si es así en cosas tan cercanas como los años 70 me imagino como será con la Guerra del Pacífico.
ResponderBorrarLa creación de historias ex-post eds una necesidsd política y existe en Perú tal como en Chile, los hechos gruesos sin embargo, existieron, y son lo que importa, lo demás es puro adorno que puede ser cierto o no, eso interesa poco o nada, no creo que merezca siquiera discutirse.
Un estupendo comentario, denota sabiduría, prudencia y ponderación
Borrar¡Muchas gracias Peyo! A propósito puede que seamos parientes lejanos, mi bisabuelo 9º era Jerónimo del Pozo Silva y del Peso, como muestro en
Borrarhttps://drive.google.com/file/d/1T701fCUQvYaaPbvgaF-JVXrYYQHOLyi1/view
Hay mucha información de familia en mi blog de genealogía
https://genealoghiabradanovic.blogspot.com
¡Saludos!