Refrito del sábado: 21 de mayo

Esta entrada tiene exactamente 14 años y en ella comentaba sobre el Combate Naval de Iquique, que celebramos en Chile en esta fecha. He escrito muchas veces mi admiración por Arturo Prat, que está muy lejos de esa veneración patriotera y chauvinista que nos enseñan en la escuela, la personalidad de Prat y su historia me parecen extraordinarias y siento una simpatía genuina por su figura, en cierto modo, para mi es un modelo. 

Solo me gustaría agregar que de esta historia podemos sacar una moraleja que se aplica perfectamente para los tiempos que corren: Arturo Prat, en la hora de crisis pensó en el largo plazo y en los grandes objetivos, que aunque nos puedan perjudicar en lo inmediato, a la larga dan los mejores resultados. Chile ganó la guerra a partir del gesto de Prat, bueno, también ayudado mucho por la suerte y otras acciones heroicas y abnegadas, pero Prat dio el ejemplo que encendió la chispa y fue capaz de infundírselo a su gente y a los chilenos de su época.

Los que hoy sacan cuentas mezquinas para los cuatro años que vienen, sepan que hay cosas mucho más importantes que una mugrosa elección. Los grandes problemas son efecto de procesos y casi nunca se solucionan de inmediato, hay que enfrentarlos con valor, resolución y grandes gestos que inspiren a los demás. No se puede conseguir nada bueno si pensamos como enanos, eso dejémoslo para los del otro lado, a derecha e izquierda. A veces los países inventan héroes, no se el caso de Arturo Prat, su valor y la corrección de su vida fueron de verdad, están ahí y cualquiera puede verlo. En fin, aquí va el refrito

21 de mayo (publicado originalmente el 22 de mayo de 2007)
Y se nos fue el 21 de Mayo, día en que se recuerda el combate naval de Iquique, cuando probablemente se decidió la Guerra del Pacífico a favor de Chile.. La suerte de las armas, el ejemplo de los tripulantes de la Esmeralda y la habilidad de Carlos Condell crearon un punto de quiebre, que cambió el curso de la guerra que se veía bastante mal para Chile. Dicen que el comandante peruano Moore jamás se recuperó del error que le costó haber perdido la Independencia, se fue para Arica donde murió a muy pocos metros del patio de mi casa, combatiendo de voluntario en una de las baterías del Morro.

Arturo Prat era un marino algo atípico para su época y marcó a las generaciones de marinos que siguieron. Le interesaban muchas otras cosas y mientras estuvo embarcado estudió, primero para sacar su licencia secundaria y después para titularse de abogado. sin embargo estaba muy orgulloso de pertenecer a la armada, porque cuando fue a dar su examen de grado a la Corte Suprema se vistió con el uniforme de gala de la marina, con espada y todo. El portero de la Corte Suprema, como buen portero chileno primero no lo quería dejar que diera el examen y después lo obligó a dejar la espada en el vestíbulo.

Además de ser marino Prat tenía su oficina de abogado y atendía clientes en su tiempo libre, antes de que se declarase la guerra, tenía el sentido del honor y la oscuridad típica del ideal chileno de esos años, siempre mantuvo un bajo perfil hasta el combate de Iquique, su familia era de clase media empobrecida y vivió al tres y al cuatro, excepto en sus últimos años de capitán de fragata. Sus palabras antes del combate fueron cortas y sencillas: primero preguntó si había almorzado toda la gente, después reunió a la tripulación de la Esmeralda y los arengó corto y preciso:

"Muchachos, la contienda es desigual, pero ánimo y valor. Nunca se ha arriado nuestra bandera ante el enemigo y espero que esta no sea la ocasión de hacerlo, mientras yo viva esta bandera flameará en su lugar y si yo muero, mis oficiales sabrán cumplir con su deber ¡Viva Chile!"

Entre las curiosidades de la guerra Prat y Grau eran antiguos amigos porque sirvieron juntos en la guerra contra España pocos años antes, la guerra del Pacífico les obligó a enfrentarse a muerte.

Otra curiosidad es que Chile hizo un contrato de arriendo con la Compañía Sudamericana de Vapores (que todavía existe y hoy es una de las principales navieras del mundo) usando sus buques para la operación anfibia de Pisagua que inició la campaña del norte, de no haber sido por esos barcos no habría tenido como transportar a la gente y equipos. Esa fué también una importante ventaja porque el Perú no disponía de una flota de transporte y tenían que mover tropas y equipos a pie nomás.

Más cosas curiosas, el Almirante Grau, comandante peruano del Huascar envió las pertenencia de Prat a su viuda con una sentida carta de condolencias -no hay que olvidar que habían sido amigos antes de la guerra- que muestra los aspectos versallescos de las guerras de entonces. La viuda de Prat, Carmela Carvajal rechazó durante toda su vida aparecen en ningún acto de homenaje a su esposo. El rostro de Prat se ha usado extensamente en billetes desde los antiguos 100 pesos, los antiguos escudos y el actual billete de 10 lucas. Si se fijan bien, los de 100 pesos decían en la parte de abajo "Convertibles en Oro Conforme a la Ley", leyenda que fue obviada en todos los que vinieron después.

En fin, mi admiración y homenaje para todos los valientes, hombres, mujeres y niños de esa época que combatieron, y sobre todo para los cobardes que igual apechugaron y controlando el miedo fueron capaces de cumplir con su pega.

(... aquí borré las partes de la entrada que se apartan del tema principal)

Fin de un día especialmente aburrido en aburrilandia, me dediqué a limpiar y ordenar un poco el taller-garage, si mañana sigo sin nada que hacer voy a lavar la casa rodante, que está inmunda. También voy a leer algo para disfrutar mis vacaciones, no vaya a ser cosa que se me acabe la suerte un día de estos y tenga que empezar a trabajar. Sin más novedades se despide de ustedes, mis amigos, su seguro y atento servidor, hasta mañana.