Allende fue el primer millenial (publicado originalmente el 17 de diciembre de 2018)
La cosa empezó durante el primer gobierno de Bachelet, cuando se produjo la protesta escolar masiva en los colegios secundarios, la "Revolución Pinguina" que llevó al estrellato a muchos chicos que en ese tiempo eran dirigentes estudiantiles.
Recuerdo que esas protestas en un primer momento tuvieron el apoyo transversal de casi todos los sectores políticos y de gran parte del país, porque era primera vez que los dirigentes no eran solo chimpancés que vomitaban consignas memorizadas, sino eran articulados y claros en sus planteamientos.
Tenían el "hablamiento", el don de la palabra o el arte de engrupir, algo a lo que ahora, años después, ya nos hemos acostumbrados y no nos impresiona tanto como entonces.
Porque es cuestión de escuchar a cualquiera de estos que hoy andan alrededor de los 30 años y por Dios que hablan bonito, no es que sean inteligentes -ni por broma- son igual de brutos que antes pero al haberse criado en Internet adquirieron ciertas habilidades argumentativas que, usadas para manipular, resultan muy convincentes.
Traten de discutirle a un milennial nomás. A veces, solo por divertirme un rato, yo me pongo a discutir con el Tomás Jr. Es muy chistoso ver las habilidades para racionalizar y encontrar explicaciones a todo. Es algo característico en casi toda esa generación.
Pero me estoy saliendo del tema, aunque esa disgresión era necesaria. Luego vino el primer gobierno de Piñera y muchos de los líderes secundarios ya estaban en el olvido, pero los más perseverantes, ahora eran líderes universitarios y seguramente el recuerdo del poder que tuvieron durante la Revolución Pinguina los incentivó para repetirse el plato, haciendo una huelga universitaria contra Piñera que duró casi todo un año.
Y lo hicieron, esta vez con muchos más recursos porque tenían financiamiento y logística prestados desde el progresismo político, que estaban asustados con la posibilidad de pasar muchos años sin poder. Los ayudaron con tuti y hasta los metieron en los partidos, cada viejo político empezó a patrocinar a sus entenados, así nació la G-90 o los "liberales" por ejemplo.
Bachelet les elevó la cambucha
El gobierno de Bachelet, que detestaba a los políticos tradicionales -con un rencor que les traía desde su primera presidencia- les dio la oportunidad de oro y llenó los ministerios y altos cargos de estos millenials que, de una manera u otra dejaron lo académico y se dedicaron 100% a la lucrativa profesión política.
Entonces se crearon dos vertientes de estos chicos empoderados: por una parte los que se quedaron dentro de los partidos tradicionales y por otra los que escogieron un camino propio: crear movimientos, partidos y confederaciones.
En el primer grupo estuvo gente como Peñailillo, Vallejo, Cariola, que preficieron -con diversa suerte- quedar bajo el paraguas de un partido tradicional.
El segundo grupo fueron más creativos y formaron distintos movimientos, que se convirtieron en mini-partidos y finalmente, aliados con los humanistas -eterno vagón de cola de nuestra política- más varios independientes que necesitaban un paraguas que les diera cupo para las elecciones, formaron el Frente Amplio: el partido de los millenials.
El frente amplio fue una buena idea, captó a la izquierda tradicional agotada en el largo ejercicio del poder. Un diagnóstico correcto percibía que el votante común de izquierda se resentía al ver a sinverguenzas y presuntuosos como Peñailillo forrándose a costillas de sus votos.
También su táctica de aglutinarse en un refrito de los "frentes populares" fue adecuada pues es lo que ha permitido tradicionalmente a la izquierda llegar al poder,ya que nunca ha dejado de ser minoritaria en Chile.
Todo muy bien hasta allí, el problema insalvable es que pese a que la idea era buena el Frente Amplio no tienen ni una sola idea, en su estrategia, la casilla de "cultura y valores" está vacía. Lo único que parecen compartir la mayoria de los movimientos es el "allendismo", pero ¿que diablos es eso?
Aquí entra el Chicho
Algo característico de Allende fue también su escasa ideología, nunca escribió un libro decente, su tesis de grado ya la conocemos y fundamentalmente era un tribuno, un discurseador famoso por su muñeca política, que usaba para mantenerse a flote.
¿Que puede significar ser "allendista" si hasta hoy nadie sabe lo que pensaba Allende realmente? Un día hacía una declaración revolucionaria y al otro una conservadora, como no dejó libros se le cita por sus declaraciones y de esas hay miles, todas muy pintorescas contradictorias y ninguna muy profunda.
Nadie sabe exactamente que clase de sociedad quería instalar Allende. Yo viví en esos años y recuerdo bien la confusión ideológica total que reinaba. Creo que ni el propio Allende sabía para donde iba el programa de la Unidad Popular, era todo un descontrol, despelote total con políticas reactivas de corto plazo, apagando un incendio tras otro que ellos mismos iban provocando con sus equivocaciones.
Recordando esos años creo que entiendo lo que significa ser "allendista" y se me aparece -como en un golpe de luz- la verdadera naturaleza del Frente Amplio, el conglomerado de los millenials.
Los millenias son en general flojos, vividores, manipuladores grandes discurseadores y amantes de las apariencias. Así mismo era el Chicho ¡Allende fue el precursor de los millenials!
Por eso los tenemos en el congreso, gracias a la muñeca política y al hambre de poder que heredaron de su padre espiritual. Nadie puede negar que en las últimas elecciones, gracias a una inteligente disposición de la parrilla de candidatos, obtuvieron muy buenos resultados en proporción a los votos y muchos de sus candidatos salieron con un 1.5% a un 5% de los votos: "muñeca política".
Dan grandes discursos, pueden hablar mucho sin decir nada porque sus ideas tienen la profundidad de un charco en la vereda, pero son tribunos, igual como Allende, hablan lindo.
Y sobre todo van avanzando y manteniémdose en el poder a punta de apagar incendios, creando consignas y dando palos de ciego para todos lados ¡como Allende! Ahora entiendo por qué los del frente Amplio -el partido de los millenials- se declaran allendistas, son los mismos. Ojalá no vayan a terminar igual nomás, porque también son bastante bocones, tal como el Chicho.
Fe de RATAS, Allende si dejó un par de libros pero son colecciones de discursos y unos pocos bodrios como "La cía chilena al socialismo" y cosas por el estilo: cero aporte
El fenomeno actualmente conocido como Millenial, viene desde la década de la revolución de las flores en los 60s. Eso explica un poco el hecho de que Allende tuviera el mismo comportamiento que estos niñatos.
ResponderBorrarPero la radiografía apunta a algo más allá. Los Boric, Jackson, Sharp entre otras lumbreras, son los abajistas zurdos, burgueses "con conciencia social", los manipulados mentalmente por los jesuitas en su infancia, que pululan en las ONGs y en la fundación TECHO. Estos weones (otra cosa no sé que decirles) que se tragaron el cuento de la justicia social, pero en realidad son niñatos que pasaron de la mesada del papi burgués capitalista a pechar de la cuenta unica fiscal. Esos son verdaderos sociópatas, manipuladores emotivos y extorsivos con un discurso mitómano patológico, que hicieron de la mentira una praxis generalizada, solo estan dejando en claro que el verdadero enemigo que tienen no es el de la vereda de enfrente, sino que LA REALIDAD, "LOS PORFIADOS HECHOS" como diría Vladimir I. Lenin.
Ninguno de los actuales millenials que nos gobiernan le han trabajado un día a nadie.
Como no tienen ideología y son demasiado flojos para leer -o los que leyeron son demasiado flojos para pensar y digerir la que leyeron- sustituyen las ideas con criterios estéticos eso de "y será hermoso" los retrata de pies a cabeza
Borrar¿Sera un toc eso de revisar los refritos? San google lo situa en 17 diciembre 2018 Allende: el primer millenial.
ResponderBorrarA lo dicho agregaria que Allende fue un narciso de libro, pero eso es frecuente en politicos y lo que resultan "exitosos" en otras areas. La difrencia con el enfermito que tenemos en La Moneda, es que este tiene un trastorno narcisista perverso, del tipo de Casto, Stalin, Polpot, Hitler, etc. EL mandaria eliminar , sin ni el menor asco,a todos lo que se le opongan ... si tuviera el poder de hacerlo.
¿Y que puse yo, ah?
Borrar¡Lee bien hombre antes de criticar! Si bien es cierto una o dos veces en mi vida me he equivocado por culpa de mi presbicia eso es un evento extremadamente raro, como los eclipses o menos.
¿Qué haría Boric si pudiese hacer todo lo que le da la gana? ¿O Allende, Pinochet o nosotros mismos? Ah, eso no hay como saberlo, porque afortunadamente nadie en este perro mundo puede hacer todo lo que se le da la gana. Algunos a veces les sale pero normalmente no.
Por ejemplo ni Hitler, Stalin, Castro... etc. hubiesen querido los resultados que tuvieron, todos fracasaron. Nadie tiene ese poder, menos mal
Y ya que estamos en eso, si yo pudiese hacer todo lo que se me antoja, después de matar a mis enemigos y después a todos los que me caen mal y seducir a todas las minas que me gustan ¿qué más haría? Creo que sería medio aburrido que todo nos salga como queremos jaja