Uno menos

Otro fin de semana estudiando, recién terminamos el módulo de Dirección de Capital Humano, creo que fue uno de los mejores del programa, Carlos Lagos Rodriguez, profesor del INCAE durante muchos años hizo un curso muy bueno. Cerramos con un resumen acerca de lo que más y lo que menos nos había servido. A mi no me gustaron los grupos T de los que escribí el otro día. Lo que más me interesó fue el método de casos que ya conocía pero nunca lo había visto hecho por alguien que ha escrito cientos de casos y enseñado según esa metodología por años. Me quedó claro su utilidad, sus limitaciones y como se hace. Si hago clases el próximo año sin duda que voy a usar algunas de las cosas que vimos acá.

La cosa es más o menos así: los casos son relatos de una situación real, como en una autopsia se hace todo el proceso de análisis y toma de decisiones en una especie de mesa redonda. No hay una solución correcta ni respuestas correctas, sino que se evalúa por la cantidad y calidad de los argumentos que usa cada uno. Es muy dinámico porque mantiene a todos en continua discusión, con el profesor y entre ellos. El caso se tiene que conocer muy bien antes de presentarse a clases porque las preguntas son rápidas y directas, una respuesta "estupida" no es mal calificada, pero no saber que responder es lo peor, sin hablar de la vergüenza pública de no saber lo que están hablando. El problema es que como las preguntas son específicas el que no domina completamente la historia queda de inmediato en evidencia.

Bueno, el método lo conocía pero nunca lo había visto aplicado tal como debe ser, creo que fue una gran experiencia. Claro que el asunto tiene varias limitantes, primero que se aprenden muy pocas cosas, un caso deja tres o cuatro enseñanzas fundamentales, no más. Otro problema es la evaluación muy subjetiva, aunque la cantidad de participaciones puede ser contabilizada, la calidad de los argumentos es evaluada en el momento por el profesor. No es la panacea pero creo que es un complemento muy bueno para motivar y enseñar las cosas fundamentales. Para lo demás están las clases tradicionales, talleres y el karaoke de power point.

Ya llevamos 8 de los 15 módulos terminados, nos queda operaciones, ética, habilidades directivas, finanzas y estrategia II, la nada misma. Incluso ya estoy pensando en la tesis. Admiro el sistema norteamericano por lo práctico y poco pretencioso, tal vez no se aprenda mucho pero lo que se aprende por lo general sirve, nada de conocimientos hundboldtianos -o como se escriba- eso es cosa de cada cual, la universidad debería ser la más práctica de todas las escuelas, al menos en el pregrado, la mayoría de los profesores anteriores traía formación de Europa, principalmente de la Sorbonne, y se nota la diferencia aunque ya sé que generalmente es malo generalizar.

Bah, a otra cosa. Llegó de vuelta el Tomás Jr a pasar las vacaciones, se ha echado varios ramos pero -optimista- confía que todavía puede sacar la carrera en 4 años, eso habría que verlo. En todo caso creo que la pasada por la universidad le ha hecho bien, está más interesado por la historia y un pelito menos bruto que de costumbre, bien por él, a ver cuanto dura.

El lunes espero mover por fin la casa rodante, la tengo abandonada en la playa, la han chocado varias veces y le han roto dos vidrios, si sigue así terminará incendiada por algún okupa. Menos mal que un amigo me ofreció un lugar donde guardarla así es que el lunes sin falta le pondremos el coco al furgón del Mouse y a arrastrar la casa. Aprendí una buena lección con esto y ojo para el que esté pensando comprarse una casa rodante: es una inversión maravillosa si uno va a vivir permanentemente en ella, en caso contrario es una fábrica de problemas, un horrible dolor de cabeza. Si alguien piensa comprarse una casa rodante "para salir de vacaciones" que lo piense diez veces, es la compra más tonta que se puede hacer. Lo dice la voz de la experiencia.

Ah este fomingo no se me ocurrre nada que comentar, mejor me voy a dormir siesta un rato. Hasta mañana.