Nací en Santiago pero a los 14 años ya estaba viviendo en Arica, luego de cuatro años en la entrañable Isla Grande de Chiloé, en 1974 volví a Arica nuevamente: y así es como llevo 35 años en aburrilandia. Aunque he viajado a muchas partes del mundo, espero que el día que estire la pata sea en este mismo pueblucho olvidado de la mano de Dios que se ajusta a mi manera de ser como un calcetín a mi pie. No hablo por los demás pero para mí este es el lugar perfecto.
Me decía Joe el otro día que si la belleza natural de la ciudad se cuidara mejor, podría ser como Santa Mónica o cualquiera de las más famosas ciudades de la costa en California, puede ser, pero yo prefiero que quede así nomás. Arica puede tener belleza natural pero no tiene nada de belleza creada por el hombre, al contrario, las murallas rayadas, tierrales por todos lados, basura, hay que tener ojo agudo para ver entre todo eso lo lindo que es el océano o el desierto cuando se pone el sol. Pero los lugares muy "escénicos" aburren rápidamente, son mejores para visitar que para vivir, algo parecido a lo que pasa con las mujeres perfectamente bonitas.
Cuando viví en Quellón tenía una pieza al lado de mi dormitorio que daba justo al golfo, en verano era una de las vistas más maravillosas que recuerdo cuando por la tarde, el cielo se incendiaba y se reflejaba sobre el mar mientras en el fondo, los volcanes Corcovado y Puntiagudo llegaban a brillar de blancos. Los primeros días me quedaba horas hipnotizado mirando el espectáculo, después ni lo notaba. En esos años me dió por el dibujo, coloqué un colchón en el suelo y pasaba todo el día dibujando, pero demasiada belleza nos pone insensibles.
Ese efecto lo he visto muchas veces, dicen que la bahía de Hong Kong es uno de los paisajes más impresionantes del mundo y así me pareció cuando llegué, aunque igual pasado un par de días ni lo notaba. También dicen que con las mujeres demasiado bonitas pasa algo parecido, al menos así me han contado. Yo no podría opinar sobre eso porque soy el marido perfecto y solo tengo ojos para mi santa mujer. Como todos saben, yo soy un tipo serio.
En fin, Arica es como esas mujeres que son bonitas por dentro y mientras más la conoces la vas encontrando más linda, cada día te vas dando cuenta de algo especial que antes no habías notado. Bueno, ustedes dirán que bicho me picó que me pongo a escribir estas tonteras tan cursis y sentimentales, la verdad es que me llegó una invitación en Facebook del grupo de la revista Memoria de Nuestro Pueblo de la ciudad de Rosario, Argentina, y cuando estuve viendo me di cuenta de lo especial que es vivir en provincia, no es algo sencillo de explicar sin caer en los lugares comunes, pero creo que en Rosario, de donde son mis primos Nicolás Pedro y los Radeljak -y tal vez en casi todas las ciudades de provincia- existe un sentimiento muy parecido.
Claro que no todo es almibar, Arica no es el paraíso y tiene montón de problemas. Por eso en mi columna de hoy en La Estrella escribí sobre los inconvenientes de no tener una estrategia. Como no es fácil encontrar la columna desde la edición online mejor la copio a continuación, aquí va en 1600 caracteres exactos, incluyendo el punto final:
La fiebre y el cáncer
Si se hiciera una encuesta en Arica preguntando cual es el mayor problema regional, se de antemano la respuesta que ganaría por goleada: el desempleo. Aunque el refrán dice “la voz del pueblo es la voz de Dios”, creo que en este caso el pueblo comete una equivocación enorme: el desempleo es solo un síntoma y las cosas nunca van a mejorar si nos dedicamos a combatir la fiebre olvidando el cáncer que la provoca. Si definimos que el desempleo es el problema principal, entonces cualquier actividad que genere empleo sería una solución, no importa si es depredadora, contaminante, ineficiente o tenga que vivir dependiendo de subsidios permanentes. Pan hoy y hambre mañana, esto es lo que ha pasado en Arica durante muchos años.
Y el cáncer consiste en que no tenemos un gran objetivo, ni tampoco una estrategia para lograrlo. Por eso las políticas regionales solo reaccionan respondiendo a exigencias de cada grupo de interés, los que siempre usan el mismo argumento: las fuentes de trabajo que generan, supuesta o realmente. Si vamos a la deriva, sin un objetivo único y con muchas demandas sectoriales que compiten por subsidios, nada resultará bien. Esta situación se arrastra desde la desaparición del Barrio Industrial cuando al menos había una estrategia y un objetivo claro, que ya no se puede repetir. Sin embargo desde esos años nunca se volvió a replantear una visión para la ciudad. Y es que para hacer una estrategia se necesita tener la mejor información económica, cosa que tampoco existe. Tal vez ahí es donde está el cáncer, y el desempleo sea solo la fiebre.
caramba, tiene parientes en Rosario! eso es a unos 150 km. de donde yo vivo. Aunque no es un pueblito, precisamente. Seguro que si contribuye a la publicación con sus crónicas de Arica se lleva el premio.
ResponderBorrarAh claro, Rosario es una gran cuidad con un millón o más de habitantes. Pero igual me dio la impresión de ese interés por la historia, vecinos conocidos, en fin, cosas tan comunes de la provincia. En Concepción o Viña del Mar en Chile también se da algo parecido.
ResponderBorrarEl viejo Bradanovic llegó a Chile y estuvo un tiempo con sus primos Radeljack en Rosario, de hecho lam Paola Radeljack fue quein me mandó hace años los srchivos del libro Jeka con el que empecé la historia de mi abuelo. De allá también es Nicolás Pedro Bradanovic, entusiasta historiador ferroviario rosarino ¡estamos en todos lados!
Ya lo veo! un peligro! ¿y no organizan la gran-reunión-de-todos-los-bradanovich alguna vez?
ResponderBorrarBradanovic, perdon. Una vez fui a la reunión de todos los Ulschmidt. Que manga de locos.
ResponderBorrarAh Bradanovich, Bradanovic la misma cosa, no creo que nunca nos juntemos porque nos persigue "el sino de los Bradanovic" que consiste en andar siempre al borde de la miseria. El abuelo se gastó la buena suerte de varias generaciones por venir :((
ResponderBorrarHay diferencias entre ciudades. Rosario no es precisamente un pueblo como corrige Ulschmidt.
ResponderBorrarArica es como dice Tomás, a veces la idealiza un poco, o mucho, pero tiene su encanto. Pero no todos los lugares de provincias son así. Concepción por ejemplo no tiene ningún tipo de identidad propia, no es ni una gran ciudad ni una aldea, pero ciertos códigos sociológicos lo hacen ver a sus habitantes como "provincianos" igual, muy preocupados del qué dirán, etc.
Al final, yo creo que Tomás tiene un plus que es el mayor valor de estar en Arica: sus amigos. Yo he conocido algunos, gente simpática, patachera, grandes conversadores, para nada discriminadores, gente común-común pero parecen buenas personas. Qué lo van a sacar de Arica a éste! :D
Claro, el asunto de los amigos es importante. Hay cosas que no existen en las capitales pero que siempre ves en provincia, por ejemplo las "familias tradicionales", que son familias que viven desde varias generaciones en provincia y conocen a todos, cuando esas familias se disgregan las ciudades pierden mucho, porque son como la espina dorsal de las sociedades locales.
ResponderBorrarVivir en provincia tiene todo un cuento, incluso en ciudades grandes, hay mucha más preocupación por la identidad y cosas así.
Me encanto este post!
ResponderBorrarEs todo lo que puedo decir por ahora; tu sabes, algunos trabajamos... ;P
Inmoral!
ResponderBorrarQue falta de respeto
que atropello a la razón!
No, esta cuestión es escándalo, hablando de trabajo en este blog.Palacio del fundamentalismo al ocio.
ResponderBorrarA propósito Lilian, es increible, pero yo siendo medio ápatrida y mercenario de oficio,cambiaría cualquier pueblucho de estos si tuviera que elegir algo en europa, canadá o usa.Sin la menor pena. Y cuando me ha tocado la opción, ha sido en puros paises pobres y deprimidos, grrr
Quizás, Mendoza y el reaturant donde Facu, me lo llevaría como recuerdo, del resto, nada, puro sentimentalismo. Asi somos los rudos.
Charles, Charles Bronson.
Jajaja, es que vos creis que vai a llegar a Europa a vivir como en las películas ; te estoy viendo en un getto leeno de ugandeses y somalíes llorando por volver a Chile.
ResponderBorrarGood times are over, ahora estamos en tiempos difíciles como diría Dickens, paciencia nomás.
Ah no po, al menos llegaré al Marriott, asi lo tengo planeado. Para eso soy socio con vencimiento el...2005...chuuu, como pasaron los buenos tiempos.
ResponderBorrarwuajajaja!!
ResponderBorrareso, no te fijaste q la cuenta ya estaba vencida!!!!
lol!!
ResponderBorrarel comentario de Jorge me recordo un chiste que recibi por email de un chileno que se va a vivir al extranjero. Lo conocen? Quieres que lo coloque aca? Estan permitidas tales informalidades en este blog?
Dale nomás, este es un lugar serio pero los VIP pueden permitirse sus licencias ;D
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