Nadie sabe para quien trabaja

Creo que vale la pena copiar esta conversación entrre el presidente del sindicato de minera La Escondida -la mayor mina de cobre privada del mundo- con un asesor del Ministerio del Trabajo, que muestra lo que está pasando en Chile hoy y nos permite pronosticar lo que muy probablemente va a pasar en el corto y mediano plazo. La conversación es más o menos así:.

 “…me dijo ¿cómo veíamos la cosa? Y yo le dije, súper bien para nosotros. ¿Me puede explicar? No le queríamos explicar al principio, pero se lo expliqué. Le dije: mire señor, nosotros tenemos esta propuesta que es lamentable. Nosotros vamos a votar huelga y vamos a hacer efectiva la huelga”, contó Tapia a los trabajadores.

“Pero, ¿cómo?, ¿por qué? Porque nunca han negociado con nosotros, siempre ha sido imposición. Mire asesor, nosotros nos vamos 30 días de huelga y descolgamos al día 30 todos los viejos y nosotros… Le conté toda la historia”, añadió el dirigente.

El medio detalló que esa es una estrategia por parte de la organización, que planea el descuelgue masivo y que el grupo restante se apegue al artículo 342 del Código del Trabajo y así negociar en 18 meses.

“Y me dijo ‘no pueden hacer eso. Van a cagar al país’. Lo único que atinó a decir fue van a cagar al país, y ¿quién ve por nosotros? Entonces, ¡que se vaya el país a la chucha!“, relató Tapia.

Poco antes, los sindicalizados habían rechazado el bono por 18 millones de pesos -unos 30 mil dólares- que les había ofrecido la empresa adicionales a su sueldo. Para que se hagan una idea, esos 30 mil dólares equivalen a algo más de un año de buen sueldo de cualquier trabajador privado en Chile, más el sueldo normal, que reciben, que en promedio debe andar por los 30 a 40 mil dólares más al año.

Esta actitud tiene furiosa a mucha gente normal, que en chile gana apenas una fracción de esa plata. Dicen que los mineros son unos sinverguenzas, pero su actitud es muy racional y además tienen la ley de su parte. La empresa no los podrá reemplazar y si no se pone de rodillas frente a sus demandas tendrá una pérdida enorme. La referencia al lugar donde se iba a ir el país, es por lo que ocurrió el año pasado cuando la empresa no cedió, afrontó una pérdida millonaria y el crecimiento del país se fue al diablo por el efecto de la caida violenta de nuestro mayor producto de exportación.

Para la empresa es una decisión difícil porque los sueldos de los trabajadores han crecido mucho por efecto de los años de boom con el precio del cobre. Al igual que con los impuestos, los sueldos de estas grandes empresas pueden subir pero es casi imposible bajarlos, la empresa será mucho menos productiva y podría dejar de ser atractiva para los dueños, especialmente si tenemos en cuenta que el cobre está amenazado por tecnologías emergentes como el grafeno, mucho más abundante y potencialmente mucho más barato.

Podrían ceder y perder competitividad, a mediano plazo esto sería un golpe mortal si el precio del cobre tiene una baja importante. Podrían ponerse firmes, hacer una pérdida relativamente pequeña y menos riesgosa en términos estratégicos, aunque pierdan unos cientos de millones de dólares es mejor eso que arriesgar la operación viable por la baja en la productividad, que es un factor vital en tiempos que el precio amenaza con bajar. Finalmente podrían hacer costosos y masivos despidos, costarían una fortuna pero podría ser lo más prudente para cuadrar al sindicato con el objetivo de la empresa.

Esas deben ser las opciones que hoy están barajando, bueno, también existe la opción de Maerks: simplemente cerrar las operaciones e invertir en otro lugar más favorable. No hay que olvidar que la inversión minera empezó con la estabilidad jurídica del Código Minero, que era muy favorable para el inversionista, cuando esta ventaja no exista las empresas simplemente pueden ir dejando morir los negocios y mandárse a cambiar. Desinvertir es el arte de saber cuando soltarle la cola al tigre.

Los mineros por su parte, que en promedio no se caracterizan por tener mucha educación, solo están interesados en el corto plazo. En el año a año, gracias a la Reforma Laboral promulgada durante Bachelet, cuentan con todo el aparataje legal para producir pérdidas enormes, ese es el incentivo del corto plazo y ellos sin duda lo van a aprovechar mientras puedan, hasta que empiecen a quedar cesantes al menos, por matar la gallina de los huevos de oro. Nunca una fábula había ilustrado tan bien la situación que está ocurriendo.

Los mineros no son canallas, ni abusadores, solo son ignorantes y tontos, manejados por sus líderes sindicales y sobre todo por los abogados de estos, que son los que más ganan. Cuando yo sea grande sueño con ser asesor de las negociaciones sindicales en una gran empresa minera de Chile, ni siquiera un notario tiene un trabajo tan envidiable como ese, son abogados que se forran todos los años. Hay tres factores que pronostican un negro panorama para el crecimiento en Chile, estos son:

El royalty
Desde hace muchos años, silenciosamente la inversión minera ha ido desapareciendo en nuestro país. La inversión en grandes proyectos nuevos es irrelevante, desde que nuestros honorables liderados por un señor que terminó preso por pedofilia, aprobaron la Ley del Royalty Minero, que dejó ganancias ridículas para el fisco pero hirió de muerte la confianza de los inversionistas en el país.  Allí fue cuando comenzó todo. Don Jorge Lavandero, recuerden bien ese nombre.

Los eco-ratas
Luego ha aparecido un pequeño ejército de oportunistas y agitadores políticos, que para su provecho personal desfiguran la realidad y mienten predicando un falso ecologismo "¡no a las tronaduras en Isla Riesco!", "¡No al Proyecto Dominga!", son por principio opositores a cualquier inversión importante, han derrumbado proyectos vitales para Chile, desde Hidroaysen hasta la "Termoeléctrica" de Cerro Chuño, que un bribón y sinverguenza que hoy se dice "honorable" usó para conseguir una silla enla Cámara de Diputados. Que basuras más grandes. Finalmente tenemos
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La herencia maldita
No es culpa de los trabajadores mineros ni de las empresas, fue un gobierno extremadamente corrupto, incapáz e irresponsable el que promovió e hizo aprobar este tercer clavo para sellar el ataud de nuestro crecimiento económico. Seguramente recordarán a esa señora de siniestra reputación, cuyo apellido es Blanco, bueno, ella era la ministro del trabajo durante Bachelet y tuvo la desfachatez de declarar "cuando esta ley entre en vigor, las huelgas serán prácticamente inexistentes", ah las malditas víboras y su maldita herencia.Nos jodieron a todos.

Los pobres mineros ni se dan cuenta que también son víctimas, embrutecidos con su trabajo, tal vez se puedan comprar un 4x4, 0 km con el bono, el que se depreciará un 30% apenas salga del concesionario. Además buena parte de los millones la disfrutarán los patas negras con que sus mujeres le ponen los cuernos mientras ellos se pelan el lomo trabajando en su turno minero. Al final, nadie sabe para quien trabaja.