22 septiembre 2018

Refrito del sábado: algo de filosofía barata


Esta entrada la escribí es septiembre de 2006 y se refiere a que solo debemos respetar las leyes que nos convienen, ignorando la hipócrita prédica que habla del "sagrado respeto a las leyes" qu supuestamente debe tener todo buen ciudadano. Nada de eso, solo respetamos la ley cuando nos conviene y lo demás es cuento, pero esto tiene una segunda lectura que creo es interesante. En fin, sin más trámite, aquí vamos:

Filosofía barata del lunes

¿Quien pondría en duda que siempre es bueno respetar la ley aunque no nos guste?. Yo lo pongo en duda pues, no solo eso, sino que ademas pretendo demostrarles que una persona inteligente solo respeta la ley bajo ciertas condiciones como:

a) Cuando le conviene
b) Cuando el riesgo de castigo es lo suficientemente probable

¡Pero como! diran ustedes, respetuosos de la Ley y el Orden, ¡ahora si que se nos volvio loco el Tomasito!. No señores, nada de eso, solo sigan leyendo y verán.

A ver, un ejemplo in extremis para empezar. Imagínense que son judíos en Polonia durante la ocupación nazi ¿obedecerîan como corderitos las leyes raciales? Claro que no, solo alguien muy estúpido lo haría. O si llevan a un familiar agonizante al hospital ¿obedecerían cada luz roja aunque no viniera nadie por el cruce? No hace falta que me contesten.

A veces en Tacna la gasolina es mucho más barata que en Arica y cuando yo viajo aprovecho de llenar el estanque, lo que técnicamente es un caso de contrabando. Pero aduanas no tiene como controlarlo así es que no les preocupa el asunto ¿debiera preocuparme a mí? ¿pasar noches de insomnio pensando en lo que dejó de recaudar el fisco? Claro que no. Como dijo Fujimori no soy ningún caído del palto.

Los dos primeros ejemplos mostraban como es normal no respetar una ley lo suficientemente inconveniente, el último nos mostraba como es normal no respetar una ley cuando estamos bien seguros de que no seremos castigados. ¿Y adonde quieres llegar Tomasito, a que nos convirtamos todos en delincuentes? pregunta indignado mi imaginario interlocutor. Todo lo contrario, el ideal para mi sería que todos obedezcan las leyes. Pero en verdad a mi no me interesa el ideal, sino las realidades y por eso creo que es fundamental entender por qué la gente a veces obedece la ley y por que a veces no.

Y lo que yo creo es que obedecemos o no la ley según pensemos si nos conviene o no, bien por el beneficio mismo o por temor a un castigo cierto. Cuando una ley nos beneficia la obedecemos por conveniencia, y si nos perjudica igual la podríamos obedecer por miedo al castigo. Bueno, hasta aquí no he dicho nada nuevo, todo esto es más o menos de Perogrullo. A lo que quiero llegar es a lo peligroso que es llenarnos de leyes perjudiciales o absurdas sin poder obligar a su cumplimiento. La gente le pierde el respeto al sistema, tal como muchos católicos se lo perdieron a la Iglesia cuando prohibió los anticonceptivos.

En países más prácticos que los nuestros tienen mucho cuidado de hacer leyes que convengan y se puedan hacer cumplir. Nosotros como países jóvenes, atolondrados, llenos de legisladores idealistas, ignorantes y charlatanes nos llenamos de leyes absurdas y difíciles de controlar, que nadie cumple ni respeta. Aunque es cierto que el sexo oral o la prostitución son ilegales en ciertos estados de USA, en general y para cosas prácticas sus leyes son bastante realistas. Podría decirse que en USA y en otros países poco idealistas es conveniente cumplir la ley.

Todo esto a propósito de un post de Hernando, quien estudia y vive en el corazón de Gringolandia, donde nos cuenta como en USA muchas personas identifican lo justo y lo correcto con lo legal. Se podría creer que esto es por alguna clase de educación mejor y más moral que reciben nuestros amigos del norte, pero yo lo dudo, he conocido varios americanos mucho más transgresores -por pricipio- que nosotros. No es raro escucharles "rules are made for break it" o "I really love to break rules" y tampoco les he visto esa santurronería hipócrita nuestra cuando nos referimos -con los ojos en blanco- al sagrado respeto por la ley.

Aunque en la práctica ellos respetan más la ley que nosostros: el candidato que perdió las elecciones en Mexico se porta como un rufían y desconoce la derrota, los gobernantes argentinos viven pateando el tablero y desconociendo sus propios compromisos. Para que hablar de los chilenos, campeones del doble estandar, moralistas en apariencia e inmorales a la primera oportunidad. Cualquiera de estas cosas significaría un gran desprestigio en otros países, por acá no pasa nada.

Y al fin mi punto es que, con malas leyes lo racional es no respetarlas. Con ignorantes y mediocres en el parlamento siempre tendremos leyes malas y siempre será más conveniente "tomar el autobus sin pagar" como escribió Mariano Grondona en uno de sus artículos más brillantes.

Ese es el problema de fondo: las leyes malas, absurdas, abusivas solo se sostienen con la fuerza y cuando la fuerza mengua...bueno, algunos de ustedes ya saben como se hace...

8 comentarios:

  1. Su post da para mucho, pero me concentro en la relación de los anglosajones con la Ley. Me refiero a lo cultural, a lo que uno puede captar viendo sus representaciones artísticas. En USA un género de culto son las historias de juicios en la novela, el cine o la televisión. Ahora mismo reviso la oferta de Netflix y tienen varias series de abogados: "La Ley de los audaces (suits)" "How to get away with murder" y alguna mas.
    En nuestra cultura jamás habría tanta pasión por parodias de jueces, fiscales y defensores, sus artilugios y sus luchas de palabras.
    En el fondo los americanos creen de verdad en el sistema de justicia, creen que las cosas se deciden ahí, que funciona como última instancia - aunque acepten que hay trucos, trampas, etc...- mientras que para nosotros es una calamidad recurrir a él. Uls

    ResponderBorrar
  2. Ah Ulschmidt, hoy me levanté tarde!

    Ciertamente los Americanos y europeos del norte tienen una cultura con un componente fuertemente puritano, por el calvinismo y todas esas religiones protestantes basadas en "el teor a Dios" (cosa que en nuestros países no existe). Pero que sean puritanos no implica que sean más morales, más buenos, más respetuosos de la ley ni nada de eso, simplemente tienen otra retórica.

    Es parecido a la retorica anti-corrupción que tuvimos en Chile por muchos años (seguramente influida por los inmigrantes alemanes e ingleses que permearon nuestra cultura) Eso no significaba que fuésemos menos corruptos, la verdad es que somos más hipócritas, nada más. Es una especie de respeto por las formas, mucho más que por el fondo.

    Y en USA hacen espectáculo e historia de todo: los juicios, los inspectores de policía, los bomberos ¡todo es material para show! Es increíble eso de los pequeños museos, en el camino entre Miami y Orlando está lleno de museos de "memoralabia" (o como se escriba) acerca de las cosas más absurdas, creo que las películas de juicios deben ser parte de eso

    ResponderBorrar
  3. Un detalle que se me olvidaba. Siendo los países del norte más puritanos, eso tiene una consecuencia directa que son los castigos más fuertes y efectivos. En Inglaterra -que es el modelo en estas cosas- hay cárcel para los niños, existen niños condenados a 20 años o con perpetua, en ese sentido son mucho más prácticos que nosotros, durante la Revolución Industrial existía la cárcel por deudas, y eran mazmorras asquerosas, al menos así las describe Dickens. Cosas así hicieron que los britons "rule the waves" o como se escriba, desde su pequeña islita

    ResponderBorrar
  4. un resumen de nuestra idea latinoamericana sobre la Ley, en versos del "Martín Fierro":

    La ley es tela de araña, y en mi ignorancia lo explico,
    no la tema el hombre rico, no la tema el que mande,
    pues la rompe el bicho grande y sólo enrieda a los chicos.
    Es la ley como la lluvia, nunca puede ser pareja,
    el que la aguanta se queja, más el asunto es sencillo,
    la ley es como el cuchillo, no ofiende a quien lo maneja.
    Le suelen llamar espada y el nombre le sienta bien,
    los que la manejan ven en dónde han de dar el tajo,
    le cae a quién se halle abajo, y corta sin ver a quién.
    Hay muchos que son doctores, y de su ciencia no dudo,
    mas yo que soy hombre rudo, y aunque de esto poco entiendo
    diariamente estoy viendo que aplican la del embudo.

    que se escribió por 1870 pero es igual a lo que pensamos hoy.
    Por eso sería tan importante que Lula, Cristina, etc.. vayan y queden presos un buen tiempo. Sería como un milagro en nuestro sistema, nosotros no creemos que la gente en el poder pueda ser juzgada de verdad. Ellos tampoco lo creen, por eso roban como corsarios cuando están arriba, no temen ningún castigo.

    ResponderBorrar
  5. Excelente Martín Fierro Ulschmidt, es como el Quijote sudamericano, da referencias para todo!

    La ley al lado de los poderosos se da en todos lados, tiene que ser un crimen muy, muy grande, como los sobornos de Lula o los robos de la Sra K, para que un poderoso vaya preso. A veces ni eso. Recuerdo cuando Nixon dimitió, el primer decreto que firmó Gerald Ford fue firmarle el perdón presidencial más amplio, reteniendo todos sus privilegios de ex presidente. Como dice el dicho

    "La ley es lo que manda el rey
    la costumbre, lo que hace la muchedumbre"

    El que está cerca del rey (o del político de turno en su versión moderna), est´por sobre la ley para casi todos los efctos prácticos. Tiene que desatar una indignación popular MUY grande para que la ley los toque

    ResponderBorrar
  6. Algo asi como la esperanza de la sancion, probabilidad por intensidad, es lo que disuade de incumplir algo. Como la intensidad, en condiciones normales, es necesariamente limitada ( por ej. durante el GM era mala idea traficar, como lo es hoy robar en Arabia Saudita) solo aumentar la probabilidad de sancion es el mecanismo utilizable.
    Por supuesto la probabilidad importante, no es la real sino la percibida ; de ahi que creo que hay que publicitar mas las sanciones que las faltas y propagrandear a grandes voces lo maravilloso del cumplimiento de la ley.

    ResponderBorrar
  7. y pq no sale mi comentario? enfin, va de nuevo ... el asunto que trata Tomás es un clásico de la teoría del derecho, acerca de la validez y eficacia de las normas jurídicas ... da para harto y depende de la posición jurídico-filosófica ... Kelsen es un clásico al respecto, también Alf Ross y otros autores han tratado el tema, Dworkin, Bobbio, y entre los nacionales Agustín Squella sintetiza bien el asunto ... pueden googlear y encontrarán bastante para ilustrarse ... tema espinudo en todo caso

    ResponderBorrar
  8. Wilson, es cierto, la expectativa de sanción debe ser el más potnt de los incentivos. Eso se ve perfectamente en las "protestas" callejeras, desde que empezaron a ser toleradas sin sanción la frecuencia y cantidad aumentó exponencialmente. Si yo pienso que el robo puede quedar impune me convierto en ladrón mañana mismo.

    Karim, es que son dos cosas distintas. La discusión entre abogados y sus distintas teorías puede ser infinita, hay muchos puntos de vista y opiniones, todas legítimas, pero existen en una realidad paralela a la aplicación rel del derecho que hacemos las personas comunes, que ocurre tal vez en el 90% de los casos cuando decidimos si obedecer o no una ley, en eso las teorías son discusiones bizantinas y lo que manda es como cada uno de nosotros aplica en la realidad su criterio, obedeciendo o rompiendo una ley determinada. Al final la obediencia de la ley es una cosa bien prosaica, que no se ajusta a ningún marco teórico sino que lo decidimos ada uno en cada momento. Yo pitutié casi 10 años en tribunales y los mejores jueces que conocí entendían muy bien que la ley es al final un asunto de decisiones personales, muy alejada de las especulaciones que se hacen en las escuelas de derecho.

    Un ejemplo clásico de esto fue la Reforma Procesal Penal, un fiasco equivalente al Transantiago pero de efectos mucho peores, ideado por profesores como el Sr. Riego y varios teóricos más que en su vida pisaron un tribunal, más que de visita y aún así impusieron ese catastrófico cambio. Pero la costumbre, lo que hace la muchedumbre, a la larga siempre se impone a cualquier teoría, "se acata pero no se cumple" es algo que viene desde los tiempos coloniales

    ResponderBorrar

"Send me a postcard, drop me a line
Stating point of view
Indicate precisely what you mean to say
Yours sincerely, wasting away
Give me your answer, fill in a form
Mine for evermore
Will you still need me, will you still feed me
When I'm sixty-four"