Accidente cerca de mi casa
Un choque abajo de mi casa nos dejó sin luz, un chico de 16 años perdió el control del jeep que manejaba y chocó contra un poste dejando el vehículo listo para la chatarra.Menos mal que no hubo víctimas pero estuvimos toda la tarde y npche sin energía eléctrica. Es la crónica de un accidente anunciado, todos sabíamos que iba a ocurrir algo así y días antes yo estuve filmando sobre el peligro que significaban los "lomos de toro" que algún estúpido funcionario ordenó colocar en la calle. Era cuestión de tiempo.
Apareció el padre del muchacho gritándole furioso en la calle, que triste espectáculo ver al tipo convertido en un energúmeno, cuando lo que correspondía era asumir y alegrarse que nadie hubiese salido herido o muerto, partiendo por el hijo. No hay nada peor que ver a alguien incapaz de controlarse, es indigno. Todo esto me lleva a pensar en eso de juventud y vejez.
Post molestam senectutem
Que curioso que nunca había escrito sobre esto antes, siendo un asunto que me toca personalmente y algo sobre lo que pienso cada vez que un buen amigo estira la pata, lo que está ocurriendo cada vez con más frecuencia. Claro que nunca me ha apenado la muerte ajena, ni siquiera la de la gente que más he querido, dese chico me acostumbré a tomar la muerte de otros como un asunto de broma, pero eso no evita que piense a veces cuando y como me irá a tocar la broma a mi mismo.
Y llegamos entonces a cierta preocupación por quedarnos ciegos, inválidos, contraer cáncer o cualquier otra sucia y fea enfermedad, como a los de mi edad les toca ver frecuentemente a sus amigos. Recuerdo a un gran amigo que estuvo agonizando un año entero. por cirrosis, yo estuve con él un par de horas antes que se fuera para el otro lado y su condición era tan desastrosa que solo pudimos bromear y reírnos un poco. No es el único caso, recuerdo varios más pero que diablos "el cobarde muere mil veces, el valiente solo una", cuando me toque a mi me preocupo, no antes.
Y conste que yo no soy viejo ni mucho menos, tengo apenas 64 años, en poco más seré un adulto joven de 70, y en un abrir y cerrar de ojos pasaré a ser galán maduro de 80. Tal vez a los 100 llegue a sentirme un poquito viejo, porque, haciendo memoria, no veo la más mínima diferencia entre el muchacho que era yo en 1967 y el que soy hoy, soy exactamente el mismo muchachito. Hasta que me miro al espejo, ese desagradable acusete que me muestra la boca sin dientes, la cara como globo desinflado y el pelo cada vez más escaso.
Ayer tarde me he mirado en el espejo, pues sentía por mi faz curiosidad
y el espejo al mostrar mi cuerpo entero, retrató la dolorosa realidad
Estoy viejo, hay arrugas en mi frente, mis pupilas tienen un débil mirar
y mis labios temblororos y arrugados, saboreando están los besos
que ayer dieron y hoy no dan
Que bueno es ese vals, se llama "El espejo de mi vida", y refleja bien algunas de las preocupaciones que van apareciendo cuando uno envejece. Por ejemplo la pérdida de apariencia. Yo nunca fui muy bonito que digamos, con 1.72 m no soy para nada alto, pero me tocó en suerte lo que Sir Alec Guinness llamaba "un rostro anodino" o sea facciones promedio sin nada que llame la atención, de esas caras fáciles de olvidar. Bueno, a medida que pasa el tiempo ese tipo de caras se van haciendo fácil de reconocer porque nos ponemos feos, pero que diablos, es la mala suerte del pobre, no todos podemos envejecer como Sean Connery.
El envejecimiento es por definición un proceso de deterioro en muchos sentidos, no deja de ser inquietante ver a Muhammad Alí convertido en un viejito con parkinson, o a Brigitte Bardot fea y arrugada como hoja de lechuga, para uno que no ha tenido físico perfecto ni mucho menos, envejecer es menos chocante, algún consuelo nos queda. Otra incomodidad es recordar los buenos viejos tiempos, nuestras épocas de oro cuando teníamos el mundo a los pies
Tuve amores y mujeres a porfía, fui mimado y halagado con afán
pero aquella juventud que yo tenía, fue muy loca y no la supe aprovechar
Con los años huyeron mis privilegios uno a uno mis idilios vi fugar,
y hoy tan sólo de este apogeo me quedan, bucles, retratos, pañuelos,
cartas de amor y nada más.
Sin contar con las incomodidades y enfermedades propias de los años. Yo lo veo en mi buen amigo McDonnell, que me lleva como 10 años por delante y -pese a tener salud increíblemente buena- tiene problemas con la vista, los bronquios y mil pequeñas molestias más, entonces veo como trata de sobrellevar las molestias con buen humor y vodka, pienso "tengo que aprender de este tipo".
Una de las alternativas ante el inevitable envejecimiento y decadencia es ponerse quejumbroso, y eso es más o menos lo mismo que el padre que les conté al principio, que se puso a gritar descontrolado a su hijo en la calle. Es indigno y por supuesto inútil.
El viejazo
La sensación de envejecer la tenemos todo el tiempo, desde niños la sentimos y nos causa cierta vaga inquietud, pero en algún momento específico de la vida a todos nos llega "el viejazo", eso no es paulatino, es un golpe y nos llega en un momento específico, gatillado por cualquier cosa: mirarnos al espejo, perder un diente o lo que sea, la cosa es que de golpe un día cualquiera nos damos cuenta que ya no somos jóvenes.
Ante el viejazo las personas reaccionan de muy distinta manera, yo por ejemplo, primero me asombré porque fue algo totalmente inesperado y luego se me ocurrió escribir sobre eso, asì fue como salió mi publicación ¡Cumplí 46 años! que coloqué entonces en mi sitio web, hasta me hice el ánimo de brindar por eso, esto lo he republicado varias veces, lo que muestra que todavía pienso igual
¿Qué hacer?
"Invertir para la vejez" es algo que la mayoría de las personas estiman sensato y conveniente, yo también lo pienso así. Sin embargo la clase de inversión en que yo pienso no es una jubilación, un seguro de salud ni ninguna de esas cosas estúpidas e inútiles, yo creo que hay que invertir en amigos y en reputación, que es lo único que importa cuando llegamos a viejos. Mientras más nos acercamos a la molestam senectudem, más importancia va cobrando la reputación y los amigos.
No me asusta la miseria porque casi toda mi vida he sido pobre, puedo aceptarla sin problemas. No me asusta la enfermedad ni menos la muerte, porque por más que me preocupe y me asuste no voy a poder evitarlas, asustarse por eso solo muestra cobardía, solo hay que esperar enfrentar con dignidad cuando llegue el momento. Pero si me asusta envejecer sin amigos y desacreditado, ser apreciado por los demás es una necesidad humana muy fuerte y los que desperdician esa oportunidad abusando, engañando y sacando provecho de los otros solo consiguen pan para hoy y hambre para mañana, envejecer con amigos y con reputación para mi es muy importante.
NULLA DIES SINE LINEA. Filosofía barata, historias, historietas, moralejas, chamullos, relatos absurdos, la vida de un vago, cosas de Arica, literatura, música, pornografía, política, física, cocina regional, minas, copete y cosas por el estilo. The awesome, absurd and often bored adventures of our Man of Mystery in Arica, from the trenches, in the Northern Front. Sacar a mil, sacar a mil. Streams of brilliance often spring from boredom. "Be yourself, but bigger"
Wena pelao sacaste trago. ¡Salud!
ResponderBorrarHAy que puro seguir la receta del McDonnell: vodka y buen humor ¡SALÙD!
ResponderBorrarCuando mis compañeras del 4° año de humanidades del viejo Liceo Coeducacional de Arica, en 1959, decidieron ponernos nota a los varones del Curso, en esos juegos de juventud, (me imagino que calificando el porte, la distinción y elegancia, el refinamiento y el garbo) me pusieron un 4,5 grande fue, apreciado Tomás, mi desazón y pesadumbre por la humilde puntuación obtenida.
ResponderBorrarYo, que hasta ese momento me autocalificaba como el mejor de todos, la máxima expresión del baile del rock´n roll, el líder de los motonetistas Vespa y Lambreta de la plaza y el mejor nadador de La Lisera fui corriendo a verme ante el espejo y, en efecto, las damas como siempre tenían la razón. No daba el ancho ni calificaba para ser adonis sino más bien hefesto.
Muy bueno tu escrito De Senectude… Es lo que hay… Jajajaja…
¡Es lo que hay Gustavo! Cuando jóvenes el espejo nos miente y nos creemos bonitos, pero a medida que pasa el tiempo el espejo se pone cada día más honesto. Hay que acostumbrarse nomas, no queda otra jaja!
ResponderBorrarLos lomos de toro (acá, no se porqué, son de burro - pero cumplen la misma función) parece que no tienen medida oficial o que algunos los levantan sin consultar manual alguno. Los hay levísimos y otros como para romper la mayoría de las suspensiones, amén de provocar un accidente.
ResponderBorrarTambién los hay señalizados, menos señalizados y los trampas mortales.
Ah, si los funcionarios respondieran por sus errores !
Lo del tipo que perdió la compostura con su joven hijo me hizo acordar los años que llevé a mis hijos a encuentros futbolísticos infantiles. Cuánto padre gritón, por Dios, exigiéndole al hijo que sea el crack que él tampoco pudo ser. Un bochorno. Uls
Faltó mencionar que el vieajzo llega a veces al saber que algo que en su momento fue como la última novedad lleva ya una década de antigüedad o que el niño o bebé que uno conocía ya está entrando a la universidad. También ocurre con cosas que llevan más data de lo que uno cree aunque sean pocos años de diferencia. Para qué hablar de cómo era la infancia de uno y la tecnología de esa época, ahí si que uno se siente anciano.
ResponderBorrarUlschmidt, en Chie están prohibidos en general, pero lgunas municipalidades se las han arreglado para instalar una especie de mini-lomos reflectantes, que no tienen ningún otro efecto que inducir maniobras peligrosas en lo conductores imprudentes o inexpertos que tratan de esquivarlos. Son verdaderas fábricas de accidentes.
ResponderBorrarPerder el control en público delante de un hijo o cualquier niñ chico es un espectáculo indigno, pobres niños. Para qué decir los padres que le gritan a los niños jugando fútbol, eso si que es degradante. Y jurn que lo están haciendo "por su bien"
Hola.
BorrarManejar con 16 años(sin licencia, sin la edad minima para conducir), es un delito. De seguro, sacando el auto a escondidas. Quizás el chico problema de la familia.
Pa mi, bien dado el reto, aunque sea incomodo de ver.
Otra cosa, como dicen mas arriba, es retar a tu hijo en eventos deportivos o artisticos, donde uno acompaña o lleva al hijo. Alli es ridiculo.
Frx, no hay peor viejazo que ver a una ex novia de hace 30 o más años atrás, esa experiencia no se la doy a nadie. Clao que eso pasa con las que feron muy minas en su momento, las que fueron siempre normales o feas no les afecta, incluso algunas se arreglan con la edad. Para que hablar ver a los hijos de amigos que conocimos de guaguas...
ResponderBorrar"la edad es solo un número, no una excusa para dejar de divertirse" es mi mantra y lo vengo recitando desde que tenía 14 años cada vez que saludo a alguien por su cumpleaños (en octubre cumplo 43 si Dios y don Sata quieren). Despues de los 40 empecé a llenarme de achaques y dolores donde antes no sentía y hay veces en que uno se cuestiona si va a despertar al día siguiente o si el destino nos dice "hasta aquí no más llegamos". (Escribo estas lineas antes de ir al funeral de un amigo mío que falleció ayer producto de un shock hipoglicemico el día de ayer, que a pesar de que llegó a tiempo a la urgencia, era demasiado tarde y murió en el hospital). "La muerte está tan segura de vencer que nos da toda una vida de ventaja".
ResponderBorrarSobre los lomos de toro, ¡que estupidez más grande! solo a un imbécil se le puede ocurrir semejante tontera, solo por obligar a alguien a bajar la velocidad. aparte que son mal hechos, no hay un "estandar de construccion" y que aún persisten en la ciudad, hay otros que son verdaderas trampas mortales y diques de contencion de aguas lluvias.
En mi caso José, el número ya es un poco alto jaja. En fin si envejecer y morirse es lo más normal, en una de esas mañana cae un meteorito y estamos todos muertos.
ResponderBorrarSobre la estupidez que son los lomos de toro, mejor nombre es el de Argentina "lomos de burro" porque solo a un burro se le puede ocurrir colocarlos!
Segun San Yo, cada uno tiene la edad de lo que se come. :-)
ResponderBorrarClaro que como dice el himno seremos humus...
Nos habebit humus
ResponderBorrarnos habebit humus
jaja, cierto,
Según la Regla de San Wilson yo también sería viejito, aunque no tanto :D
"rememorando secum et cum iuvenibus " diría, ejem, Catón El Censor o alguno de esos que andaban con sábanas en el Senado.
ResponderBorrarTambién está la vidala que dice
yo soy como el tigre viejo / me gusta la carne tierna
A quien no le gusta el filete Ulschmidt, pero en mi caso, viejo y sin un cinco no hay como! A estas alturas de partido... jaja
ResponderBorrarCon la ayuda de mi amigo Google pude saber que diablos dijo Catón!
Don Tomás, mientras haya alguien que lea sus experiencias y anecdotas, usted logrará trascender a través del tiempo. A diferencia de alguien que depende de la belleza o habilidades físicas, las mentales son las que duran muchísimo más y sólo se pierden cuando no se utilizan (la persona no habla con nadie, no sabe como invertir su tiempo, no hace funcionar su raciocinio). En función de lo anterior puedo decir que le queda cuerda para un laargo rato. - Alberto Garcia
ResponderBorrarSi Alberto, a mi me alegra mucho compartir mis aventuras y ocurrencias, a veces entretenidas, otras no tanto, pero mientras hayan amigos tenemos cubierta la necesidad más importante! el resto es challa
ResponderBorrarMe acordé de unas ex compañeras de colegio que tuve, una era relativamente bonita y la otra una gorda fea. Muchos años después vi que la primera ya no era tan atractiva como antes pero la otra se había transformado totalmente, con el aspecto de diosa aria que tenía resultaba inconcebible relacionarla con la gordita fea que conocí. Hasta el día de hoy me cuesta creerlo.
ResponderBorrarYo esperaba eso de mi mujer, Frx. "A ver cuándo te transformás en una diosa aria", pero en fin, nada.
ResponderBorrarJajajajaja, la suerte puede ser muy cruel.
ResponderBorrarUlschmidt las esposas muy lindas pueden ser un problema, mejor que sean leales y buenas personas porque para lindas, con una módica suma se consiguen para todo lo que sea menester, en cambio la buena persona es medio difícil de conseguir, especialmente si se trata de una diosa aria
ResponderBorrarHola Bsilio, yo pienso que un tipo ue se muestra incapaz de controlar su furia en público es un pobre diablo, no hay nada más despreciable, para mi, que alguien incapaz de mantener la calma en un momento difícil.
ResponderBorrarEl problema ahi no es el niño, esa es la consecuencia de ser hijo de un pobre diablo. Y claro sacó el auto sin permiso y debería ser castigado por eso, ero de manera inteligente, no por los gritos de un pobre histérico.