¡Que gran video! Siempre habrá un ariqueño que saque la cara, dejando en alto el nombre de nuestra querida ciudad. ¿Quien dijo que los ariqueños somos sobrios? Esto corresponde a una de las reuniones virtuales de la comisión que está encargada de redactar nuestra nueva constitución política, específicamente se trata de la Sesion Nº 58 de la Comisión Medio Ambiente.
Desde hace algún tiempo la política chilena me empezó a parecer aburrida y no tengo nada que comentar al respecto. En especial los intentos de escribir una nueva constitución política por una comisión repleta de gañanes, oportunistas, sinverguenzas, estúpidos y sobre todo ignorantes, donde tienen su tribuna los curaditos, me parece un asunto pintoresco y divertido.
No me pienso unir al coro de jeremiadas ni me voy a escandalizar con todo esto. Ni tengo intenciones de ponerme a criticar los errores y ridiculeces del presidente, sus ministros ni la corrupción y nepotismo que recién estamos empezando a ver. Tampoco creo que tenga utilidad despotricar contra la ineptitud que es tan grande y evidente en Su Excelencia y su gente que ni necesita críticas, solo hay que sentarse a verlos y disfrutar del espectáculo.
Pero este video me pareció interesante porque muestra una característica muy chilena que es el miedo a aparacecer diciendo o haciendo algo políticamente incorrecto. Mientras mi coterráneo curado decía cuanta estupidez le pasaba por la cabeza -y está en su perfecto derecho porque para eso lo invitaron- nadie del resto de los participantes tuvo el valor para pararlo y decirle que estaba haciendo un daño enorme a la legitimidad del proceso.
Eso se llama cobardía moral, es la misma clase de cobardía que tuvo Sebastian Piñera cuando, aterrorizado por su futuro político, le hizo caso a cobardes como Larroulet y otros pajarracos excecrables y propuso esta genial idea de hacer un plebiscito y una convención constitucional..Esto muestra como la mayoría de los chilenos somos moralmente cobardes, no nos atrevemos a levantar la voz cuando debemos para arremeter contra estos "empoderados".
Nada más patético que ver al pobre gil que conducía la cosa pidiendo un aplauso para despedir al borrachin, y ver a la vieja de lentes y la otra tipa aplaudiendo servilmente. Pena y verguenza ajena me produjó la falta de valor de esas personas, porque el asunto fue ese: cobardía pura y dura.
Por eso me saco el sombrero frente a algunos de los convencionales de derecha, destacando por supuesto a Teresa Marinovic, que si han tenido el valor de enfrentar a estos orcos y oportunistas. Y por eso banco a Johannes Kaiser, pese a que algunas de sus ideas me provocan mucho rechazo pero son valientes y eso, para mi, los hace dignos de respeto. Todo mi respeto.
En fin, creo que no vale la pena dedicar mucho teclado a estas cosas que son completamente irrelevantes. Solo un tonto puede creer que "una nueva constitución" va a tener alguna importancia. Si es que llega a aprobarse el mamarracho que están haciendo no va a durar nada, y en el muy improbable caso que llegara a durar, nadie le va a hacer caso, porque Chile puede estar repleto de estúpidos pero no de locos.
Eso nomás, debe ser el primer comentario de política nacional en mucho tiempo y tal vez pase otro buen tiempo que no escriba de esto, porque no es un asunto que me interese.
Divertido el curahuilla y su estado social comunitario pero sobre todo muy coordina'o.
ResponderBorrarSi como dices es la cobardia, sin duda en muchos convencionales, y en general en muchos politicos; el terror de discrepar del aparente concenso, hasta que este se quiebra.
Pero tambien el delirio de muchos de considerar corrcto oir al borrachin y no ver que los deja en ridiculo,, sienten (y sin duda tambien creen que piensan), que es una especie de sahumerio contra la politica tradicional que atacan, un exorcismo. Sera divertido ver a ese tipo de creyentes ante el nepotismo, el amiguismo y el apitutamiento de los Merluzos...
Por mi que opinen lo que quieran, están en su derecho, pero lo que dices es cierto, muy rápido se van a dar cuenta que los que llegaron al poder son más tránsfugas todavía que los que recién se fueron. Así está la cosa
ResponderBorrarConcuerdo. Cada vez vale menos la pena hablar de la contingencia nacional. Es como recordar cada día que el pasto es verde.
ResponderBorrarSi, se ha puesto muy aburrido todo y no hay mucho que comentar lo que obliga a de repetir una y otra vez lo mismo.
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