Para variar vengo llegando de donde los Pratti, nuestro amigo Braulio estaba de cumpleaños así es que Pratti se puso con una plateada con puré picante (me comí dos platos y medio!) además de varias botellas de buen vino, cervezas y hasta un Old Parr que apareció a las finales. En fin, cometí el pecado de gula con dedicación y contumacia. Todo muy rico, especialmente el vino. Feliz cumpleaños Braulio.
Como muchas veces la conversación giró en torno a la Universidad de Tarapacá y los efluvios alcoholicos abrieron mi mente y me permitieron darme cuenta de algo que antes no había notado. Resulta que hay dos ideas dentro de la universidad diametralmente opuestas: una que admira el modelo de universidad privada y pretende armar una "universidad de prestigio", próspera, generadora de negocios, de altos ingresos y no muy escrupulosa en lo académico.
El otro modelo es el antiguo ideal de universidad pública, sobria, con mucha vocación social e ideas políticas vagamente socialistas, con excesiva preocupación por las carreras funcionarias y los derechos adquiridos, que ven los negocios como algo medio pecaminoso y les horroriza la frase "el negocio de la educación", su modelo ideal es la antigua universidad Federico Santa María con profesores semi-dioses y alta exigencia académica.
Yo no tomo partido por ninguno de los dos modelos, creo que ambos tienen sus ventajas y desventajas. Si fuera por mi el ideal sería algo intermedio que tenga la flexibilidad del modelo privado y el idealismo del modelo público. Sin embargo tengo que reconocer que si se puede hablar de un "alma" o de una "vocación" de las instituciones, la Universidad de Tarapacá tiene en lo más profundo el ideal de universidad pública, con todas sus virtudes y defectos.
Yo entré a estudiar en el año 1978, cuando era Universidad del Norte y tenía una tremenda mística, la mayoría de mis profesores de entonces todavía hacen clases u ocupan cargos de poder dentro de la universidad y puedo decir que conozco a mi gente, la mayoría de ellos tienen todavía muy viva la vocación de universidad pública, que puede estar llena de vicios y defectos pero tiene una virtud: son idealistas.
Por eso cada vez que la universidad trata de entrar a competir con las universidades privadas (o públicas con vocación de privadas como la Arturo Prat) termina perdiendo. Por eso el diseño original de la Fundación Para el Desarrollo de la UTA fue un fracaso, que la universidad se dedique a hacer buenos negocios es tan difícil como creer que la iglesia pueda tener éxito administrando un bar topless. Es un problema de vocación.
Y a todo esto con la vocación de universidad pública no les ha ido nada mal, la UTA debe ser una de las universidades mejor administradas de Chile, sin deudas y con un enorme patrimonio e infraestructura, en ese aspecto debe ser una de las más importantes y financieramente sanas del norte. En fin, creo que la vocación es una idea que hay que tener en cuenta antes de ponerse a criticar algunos vicios y deficiencias de la UTA, que los tiene bastantes.
Pasando a otro tema me llamó la atención esta noticia: "Abogado de empresa Wagner denunció acciones similares (intervención ilegal de correos electrónicos) a tres diputados. El ministro del Interior Belisario Velasco y el subsecretario Felipe Harboe aseguraron que la cartera no ha recibido ninguna notificación formal sobre el supuesto hackeo a computadores perpetrado desde una de las oficinas gubernamentales, que habría afectado a la empresa de transporte de valores Wagner. Esto a raíz de la querella interpuesta ayer por el abogado Fernando Uribe-Etxeverría ante el 7° Juzgado de Garantía, contra quienes resulten responsables del presunto delito. La intervención de los sistemas informáticos -dicen- se habría realizado desde un computador ubicado en la oficina 201 del Palacio de Gobierno, correspondiente al Ministerio del Interior"
Que puedo comentar; en lenguaje sesentero los pillaron chanchitos. En lenguaje políticamente correcto fue una desprolijidad inexcusable. Y en lenguaje del coa sería hora que los buenos muchachos dejen de abusar de la IP de la Oficina de Estudios Para Políticas Agrarias porque está tremenda de funada. Como tan rascas señores!
NULLA DIES SINE LINEA. Filosofía barata, historias, historietas, moralejas, chamullos, relatos absurdos, la vida de un vago, cosas de Arica, literatura, música, pornografía, política, física, cocina regional, minas, copete y cosas por el estilo. The awesome, absurd and often bored adventures of our Man of Mystery in Arica, from the trenches, in the Northern Front. Sacar a mil, sacar a mil. Streams of brilliance often spring from boredom. "Be yourself, but bigger"
Creo que independientemente de la vocación que tenga la universidad, igual no debe descuidar el negocio que representa. Sea cual sea la vocación o giro de una institución ésta debe asegurar un financiamiento que garantize su sustentabilidad.
ResponderBorrarUna institución como el Hogar de Cristo debe velar por una eficiente obtención y manejo de recursos. No para ganar más plata, sino para aumentar más su cobertura de ayuda y sostener dicha cobertura en el tiempo.
Todas las buenas intenciones necesitan ser financiadas para llevarlas a cabo. Desde el origen de las civilizaciones el dinero es transversal a toda actividad humana.
De esta forma creo que las dos visiones, vocación pública o de negocios, no solamente no son excluyentes, sino que son perfectamente complementarias.
El reconocer la necesidad de la existencia del dinero como medio de transacción no tiene nada que ver con la compostura. Necesitan usarlo desde los curas hasta las putas!.
ResponderBorrarEs cierto que hay gente que demoniza al dinero asociándolo con conceptos como burguesía, capitalismo, imperialismo, etc. Sin embargo, la visión de un mundo aséptico de dinero, donde todos seamos una gran comunidad de hermanos "lana" que vivamos de los frutos de la madre tierra... me resulta más chocantemente almidonada y compuestita.
A propósito de censura ¡como me gusta censurar! de verdad lo disfruto.
ResponderBorrarClaro que no son visiones excluyentes como tu dices, pero si definen algo así como la "personalidad" de la institución, es algo que no puedes evitar y que no viene de opciones racionales sino de sentimientos más profundos.
Ten en cuenta que la mayoría de los profesores de la UTA llegaron en los años de la Junta de Adelanto y la industrialización. Además que siempre han sido funcionarios, muy pocos han tenido un trabajo "real" en su vida.
Y lo de la plata, como escribí en la entrada, se las han arreglado muy bien con el modelo de U pública y han conseguido varios miles de millones del fisco con proyectos Mecesup, FNDR y similares. Así han conseguido ser casi tan solventes como una U privada sin "comercializaese" (y lo pongo entre comillas por la ironía de todo el asunto)
(Ja!, a veces es necesaria la censura).
ResponderBorrarCoincido con lo de la personalidad o sello institucional. Esta personalidad deriva, en la mayoría de las veces, del origen e historia que tengan las instituciones. De hecho, la mayoría de las universidades regionales que al menos en parte provienen de la UTE, aún conservan algunas de sus características como, por ejemplo, que muchos de sus profesores son masones.
Sin embargo, también en muchas de estas universidades regionales (pienso en la U. de La Serena, U. de Talca, U. de la Frontera, etc.) esta personalidad se ha ido desdibujando y va apareciendo otro sello que las caracteriza.
Claro, acá en el norte la Universidad Arturo Prat (ex Sede Iquique de la U de Chile) tiene marcada cultura de una universidad privada, parece un chiste porque la UTA es casi caricatura de universidad pública y la UNAP caricatura de privada, son muy extremistas.
ResponderBorrarComo tu dices tiene mucho que ver la historia de la institución. Yo hasta hace poco tiempo era admirador del modelo privado, pero hay algo importante en que esas universidades flaquean: por lo general les falta mística, los modelos de negocio que tienen estas sustituyen el antiguo auto-engrupimiento de las universidades públicas con un marketing muy poco convincente.
Así, alumnos y profesores son cínicos y con cero idealismo, lo que no es malo pero algo de eso debiera tener toda universidad.
Ese auto engrupimiento es como la sal en las comidas, en exceso (U de Chile, COncepción, etc.) apesta, pero en su justa medida le da sabor a la cosa. Las universidades sin mística son desabridas.