07 marzo 2007

El Pringao

Hoy me convertí en un pringao, hacía mucho tiempo que no me pasaba, pero el otro día conversando con Gabriel Abusleme, que es presidente de la Cámara de Comercio, me comentaba sus problemas para conectar algunos computadores en el segundo piso. En ese mismo instante satanás nubló mi mente y se me ocurrió pronunciar la fatídica frase "¡pero si es muy fácil, basta con que poner un router inalambrico!".

Antes que pudiera echarme para atrás no solo me había comprometido a usar mi cuenta de mercadolibre para comprarles el router sino que -estúpidamente- quedé comprometido para ir a instalarlo. Después de mil pequeñas molestias llegó finalmente el router y hoy -en este mismo momento- me encuentro en la cámara de comercio tratando de instalar el maldito aparato.

Por supuesto que nada de lo que yo sabía me sirvió y tengo de cabecearme desde cero, porque ellos tienen una conexión ADSL, mientras que la mía es cable modem con IP dinámica. La Ley de Murphy siempre atenta contra el pringao. En fin, escribo ahora de vuelta en mi casita y les contaré lo que fué uno de los días más horribles de este año.

No solo tuve que interrumpir mi siesta, dar interminables vueltas buscando donde estacionar para llegar a las 3:30 PM a una oficina con un calor de diablos, atestada con 5 oficinistas y un junior. Empecé confiado porque todo parecía fácil, configuré como ya sabía y...nada.

En fin, volví a la configuración del router, a clonar las MAC, probando...y nada. Busqué otras MAC de la red y fui probando con cada una de ellas...y nada. Estaba tratando de hacer funcionar la maldita cosa en cuclillas y como ya no estoy para esos trotes me empezaron a reclamar las bisagras. Cada cinco minutos pasaba alguien que se paraba detrás a ver lo que estaba haciendo y luego me preguntaba con una risita ¿y funciona...?

El calor me achicharraba y la oficina (como odio esos lugares) me parecía repleta de mirones. Entonces me dije ¡basta! y salí a comprarme un helado para clear up my mind. Me lo comí tranquilamente y lo ví todo claro: tenía que volver cuando nadie estuviera trabajando, entonces tendría paz y podría ocupar alguno de los escritorios. Así es que tomé mis cosas y me fuí para la playa.

A las 6:30 PM ya estaban cerradas las puertas así es que volví, confiado de que podría hacer mis cosas tranquilo, por lo menos sentado. Pero nada, las niñas -mostrando la camiseta- seguían trabajando como si tal cosa. Así es que me puse, furioso, a escribir esta entrada esperando que se aburrieran luego.

Finalmente casi todos se fueron, digo casi porque quedó una secretaria y el junior, así es que volví a la carga probando todas las distintas combinaciones que se me ocurrieron para evitar el error de DNS. La secretaria que quedaba, sentada al lado mío con su mejor voluntad trataba de mejorar mi avinagrado gesto haciéndome simpáticas bromas "lo que pasa es que a esta oficina hay que hacerle un sahumerio, acá nada funciona". Era como echarle sal a la herida supurante, más rabia me daba.

Ojalá todo hubiese quedado allí, porque luego vino lo peor: el junior llegó a sentarse detrás mío para observar lo que estaba haciendo y tratar de ayudar con sus desinteresados consejos. Allí mismo se terminaron las últimas moléculas de buena onda que me estaban quedando, justo en el momento que me dí cuenta que había pasado todo el día dando palos de ciego en un asunto sobre el cual no tenía maldita idea, en lugar de estar perfectamente en mi casa, durmiendo.

Esto no da para más pensé, así es que guardé todas mis cosas y me puse a revisar los comentarios de mi blog en uno de los computadores cableados antes de volver a la casa. Me debí haber ido en ese momento, porque mientras me entretenía en el blog llegó Abusleme y, tratando de ayudar llamó al tipo que había clableado la red, el cual le dijo que probara colocando el nombre de usuario y la conexión en el router.

Vuelta a sacar todo lo que había guardado, ya se había hecho tarde y pasé dos horas más perdiendo el tiempo por nada porque, obviamente nada funcionó. La cosa se veía negra: por bocón me metí en un lío que podría significar ser pringado durante un par de años por venir, y comencé a imaginarme con espanto que me llamaban cada semana para avisarme que la wifi tiene problemas.

En eso ví a uno de los directores de la cámara cuyo hijo es amigo mío y trabaja en computación; entonces se me iluminó la mente: le dije a Abusleme "¡el Nino es el único que sabe hacer estas cosas en Arica!", se que es una canallada, pero mi situación era desesperada, no tenía alternativa. Nino, compadrito, sorry, era un asunto de vida o muerte.

Y una vez más en mi vida saqué la conclusión del pringao: nunca, pero nunca, jamás en la vida ofrezcan hacer un favor configurando un equipo de computación, hay que morderse la lengua setenta veces siete antes de cometer tamaña estupidez.

Y bueno, para los que todavía no lo han leído, aquí les va el muy famoso Pringao Howto.

17 comentarios:

  1. Me siento identificado con el "Yo mismo" de hace un par de años atrás; no sé si por herencia de conductas familiares o por qué cresta era (digo bien) era (yo) un gallo que "pecaba de voluntarioso" y resultaba enfrascado en innumerables problemas, no tan malditos, pero si tan gratuitos como el que me nombras, y como de ambicioso tengo una micra, ¡no era por plata!, era por no se que cresta de actitud solidaria ante quienes, definitivamente no tenían ninguna intención de manifestar agradecimiento alguno, toda vez que uno se presentaba como un simple aparecido en toda la situación, que tenía su propia dinámica interna, ante la cual se es un agente exógeno y errático.
    Con el tiempo (y esto es una máxima que se termina por hacer cierta) aprendí de mi bisabuela Clotilde (una mujer excepcionalmente pragmática y asertiva) que "si quieres ganarte un enemigo en Chile, hazle un favor a alguien que no te lo ha pedido".

    Tombrad; efectivamente no estás solo en esto; cerrar la boca, no pecar de amable y llegar exclusivamente donde te llaman (y no donde no te llaman) son tres cosas esenciales para no convertirse en ese "pobre y triste ueón" que no queremos ser

    [...hasta aquí voy bien por ahora, total tengo de quien preocuparme antes de quienes ni se inmutarían si te cae un piano encima. Toda vez que si uno "fue así" de errático con su solidaridad, algo le queda de eso, pero mejor administrado]

    He dicho

    Hasta mañana.

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  2. jajajaja....asi que el nino baltolu te ayudo?

    Por lo menos te pago algo el Abusleme o no?

    Saludos,

    Robert

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  3. Una vez mas lo digo :
    Siempre antes de hacer algo uno debe asesorarse con una persona idonea en el area es por ello que existen distintas carreras (ing. comp., ing. electrica/electronica, etc.) y uno no las sabe TODAS.

    Es un problema o situacion problematica "gratuitamente" atachada, pero por mas que pasan los años, algunos, no aprenden.

    se debe aprender de los errores...

    Saludos.

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  4. Sergio, toda la razón, tengo que morderme la lengua antes de ofrecer "un favorcito que no cuesta nada", es la estupidez más grande y me gané gratuítamente más de un mal rato ¡lo peor es que tal como dices nadie me lo pidió!, ni siquiera puedo alegar que me obligaron.

    Robert, no sé si me ayudó pero a el le tiré el pase, aprovechando que estaba el papá presente. Fue una canallada pero supongo que el sabe como hacerlo, además tiene la opción de deir que no tiene tiempo o está ocupado... y volverá la pelota donde el estúpido tomasito.

    Por mi culpa, por mi culpa, por mi grandísima culpa.

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  5. Creo en la opcion del sahumerio a esa oficina pues hay tanta mala vibra ahi, cada vez que voy a buscar antecedentes comerciales la siento presente, y debe ser oye Tomas pues piensalo, Sierra, Abusleme y Baltolu, son todos casi casi, algo raro pasa ahi, creo que debe quedar algo del antiguo cementerio que estaba ahi, saludos.

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  6. Puede que los que van a pedir el DICOM dejen el lugar cargado con maldiciones y mala onda!

    Y ojo, que Gabriel Abusleme es amigo mio de hace muchísimos años, más de 20 años.

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  7. Ja! Me pasó lo mismo la última vez que me pringaron... Como cuatro horas hueveando con el puto router hasta que me emputecí y le apliqué la regla de: o te arreglo o te destruyo. Le instalé encima un firmware viejo que encontré en Internerd... Quedó de lujo, lleva mas de un año funcionando 24x7 sin reboots ni nada de nada.

    Es terrible ser pringao y es peor cuando no te alcanzas a esconder antes que te pringuen. A mí antes siempre me calzaban por mi señora... ahora ya la tengo amaestrada, cuando alguien diga "Oye, ¿tu marido no es ing. en computación?" ella siempre responde: "Si, pero desde que se dedica a la economía que no se actualiza así que no tiene idea como funcionan los aparatos modernos"... Santo remedio, que llamen a Dell! :)

    Saludos,
    AHG.

    Ps: González y el pozo que está cavando... lo contrataste o lo pringaste?

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  8. Tu tenís la bendición del posgrado, me imagino que a nadie en su sano juicio se le ocurriría pedirle un favor a un economista ¡con las cagadas que dejan jajaja!

    Hablando en serio todo el asunto me dejó con un dilema moral que todavía me molesta, trato de hacer borrón y cuenta nueva pero todavía tengo cierto estúpido sentimiento de culpa

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  9. Gonzalez ¡¡¡¡chuuuuu!!! se me olvidó bajarle el balde con agua y el sabguche de mortadela, lleva 3 días sin comer el pobre!!!

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  10. Creo que la lógica debe hacerse un poco extensiva, desterrando todos aquellos ofrecimientos cínicos que no se quieren o no se pueden cumplir, fundados en la certeza de que el destinatario los rechazará.

    En ese sentido soy consecuente: Rara vez ofrezco cualquier tipo de ayuda que no pueda o no quiera prestar. y siempre acepto la que me ofertan, asumiendo que, quienes saben como soy, no van a ser tan weones de ofrecerme ayuda "por cumplir".

    Ahora, en materia de instalaciones. He visto a especialistas absolutamente superados, indignados y sorprendidos por la imposibilidad de concretar trabajos básicos.

    La lógica del heladito de intermedio a veces resulta en todo caso.

    Rabinminente

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  11. Roberto, justo ahí es donde está mi -digamos- "dilema moral" porque justo ofrecí algo que en su momento me pareció fácil pero en la hora de los quibos me dí cuenta que no lo podía hacer.

    Es uno de esos casos donde no hubo mala intención por ninguna parte, al contrario, yo encantado de hacerles un favor. Ellos ni habían pensado en poner wifi pero como yo se los ofrecí, ahora cuando la cuestión se empezó a hacer empezaron a aparecer problemas hasta llegar a un punto que -aunque quisiera- ya no podía seguir haciendo nada: no sabía como se hace.

    Mi obligación, segun yo entiendo era hacer todo lo que pudiera. A mi me encanta hacer pequeños favores a todo el mundo, ni pienso en que me lo agradezcan ni nada pero unas pocas veces la cosa no resulta como lo había presupuestado y todo se transforma en un pequeño infierno.

    Para la pròxima vez ya sé: JAMAS ofrecer ayuda para configuran algún equipo de computación, no quiero ser pringao!!!

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  12. Tomás...

    una pregunta:

    ¿"gonzalez" es a Tombrad como "El Roto Quezada" es a Pepo?

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  13. El ROTO GONZALEZ! muy buena comparación, en todo caso más que Pepo yo vendría siendo Condorito!

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  14. Pff.. era tan sencillo como en vez de utilizar la opcion de IP dinamica por la PPoE, ingresar el usuario y contraseña del DSL y listo, lo demas es igual.

    Saludos !
    JuanCarlitro

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  15. Igual lo probé al final del día, pero el usuario y contraseña que me dieron parece que no eran!

    Además la conexión de ADSL entraba a un switch y de ahí saqué la conexión para el router, ahora que lo pienso debí haber probado conectando el ADSL al router y de una de las puertas del router al switch. En fin SOLO SE QUE NADA SE

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"Send me a postcard, drop me a line
Stating point of view
Indicate precisely what you mean to say
Yours sincerely, wasting away
Give me your answer, fill in a form
Mine for evermore
Will you still need me, will you still feed me
When I'm sixty-four"