Y ahora soy animador (a la fuerza)

Segundo día en Iquique, la ciudad donde si andas a pié y no tienes nada que hacer solo existen dos altenativas: ir a dar vueltas a la Zofri o entrar a un cybercafé a escribir tonteras, como pueden ver yo opté por lo segundo.

Nos vinimos con un grupo grande de alumnos de los últimos años de ingeniería comercial, varios estudiantes de intercambio de Santa Cruz (Bolivia), Arequipa (Perú) y hasta una mexicana de Baja California que preparó un guacamole exquisito en el asado que hicimos anoche. Les había ofrecido un asado si terminábamos todo en un día y a pesar de los cientos de problemas en la noche teníamos prácticamente todas las encuestas listas: los incentivos funcionan, además iba con dos supervisoras que son egresadas y ya habían hecho este trabajo así es que todo salió perfecto a pesar de mis preocupaciones.

Puros problemas, el psicólogo que iba a animar el focus goup se echó para atrás a última hora, tuve que conducirlo yo mismo con el camarógrafo y las supervisoras atrás tomando notas. Salió excelente, los muchachos muy pesados al principio, desconfiados del uso que le íbamos a dar a la entrevista y para variar se veían apáticos. Pero en un par de minutos entraron en confianza, la cosa se animó y sin darnos cuenta nos extendimos por casi 2 horas ¡no querían callarse!, al final me pidieron que les mandara una copia del DVD pero que por ningún motivo se lo mostráramos a los profesores, fué muy divertido. Si no fuese por el acuerdo de confidencialidad que hicimos, creo que se habrían entretenido mucho viéndolo.

En fin, ya falta poco creo, solo unir todas las piezas, hacer el informe y una presentación lo más clara posible, espero que todo salga bien porque me ha dado bastante guerra, ya veremos en que termina. En todo caso ya tendría otra forma de ganarme la vida en caso de apuro: de animador de focus group.

Ahora me vuelvo a las cabañas para descansar un poco antes del largo viaje de vuelta. Hasta mañana.