14 noviembre 2014

Una foto de mi mamá

Me la mandó mi primo Camilo desde España, a mi mamá la recuerdo cada vez menos, a veces pasa un par de años que ni me acuerdo y supongo que cuando yo me muera va a desaparecer de la historia, en fin, así tiene que ser.

Voy a repostear algo que coloqué hace años sobre esta misma foto, en fin, aquí voy:

Se Murió por los años 80 y , para ser francos ya me había olvidado de todo, hasta hoy que recibí esta foto. Aquí va un pequeño retrato de mi personaje inolvidable.

Lo primero que recuerdo es sus aptitudes de bromista y que disfrutaba mucho -igual que yo- del humor negro. Por eso no creo en las almas en pena. No tengo dudas que de haber podido, me habría aterrorizado por la noche reprochando mi mal comportamiento en los últimos años, "tenías que salir con tus tonteras, pero espérate nomás... porque te voy a dar una..."

Es inconcebible que desperdiciara la ocasión de hacerme una broma pesada.

Según el doctor Jaime Barros fue, en su tiempo, la chica más linda de Viña. Seguramente es de esos piropos exagerados que se tiran los viejos, pero lo cierto es que tenía mucho sentido histriónico y un carisma asombroso; cuando iba a comprar el diario el suplementero se lo prestaba y le decía "para que va a gastar plata señora", en los almacenes le daban mercadería demás y tenía crédito automático adonde fuera.

Tenía un orgullo del porte de un edificio, también yo heredé ese defecto, de esos orgullos que matan. Me enseñó a jugar póquer a los 11 años y gracias a eso almorzamos varias veces en época de vacas flacas. Pasamos juntos una vida llena de peripecias y con un triste final, tal como en las telenovelas.

 Pidió que la quemaran después de muerta. Pasados los años Tomás Jr. llegó a la casa de mi hermana con una enorme curiosidad por ver las cenizas. El caso es que empezaron a buscarlas y no las encontraron nunca. Tal vez se fueron por allí en un cambio de casa o en una limpieza general, a Tomás Jr. le hizo mucha gracia la pérdida de las cenizas y estoy seguro que ella también habría disfrutado mucho del chiste de haber podido. Ese era el tipo de cosas que más nos divertían./


Las cuatro hermanas Pozo Pérez en Viña del Mar: María Florencia, María Rebeca (mi mamá), María Eugenia y María Berta, la foto debe ser alrededor de 1935  

Aclaración y disclaimer: lo de las cenizas es una broma mía, lo que realmente pasó es que esa vez parece que no las enontraron y de ahi yo inventé la historia de la aspiradora, aclaro esto para que no se enoje mi hermana ni mi cuñado.

28 comentarios:

  1. Los apegos se sienten muy diferente de una persona a otra, creo que mi experiencia con el recuerdo de mis padres cuando mueran será diferente. No creo que una foto sea lo que me haga recordar, creo que siempre estarán en mi corazón y su recuerdo irá conmigo siempre.
    Me dio un poco de pena la historia porque estoy segura que a su mamá le habría gustado que la recordara con más sentimiento, que no se le haya perdido sus cenizas por ejemplo, esa es una negligencia mayor por mucho que se haya cambiado mil veces de casa. No quiero que piense que estoy retándolo, me imagino que así suena mi post, es mi opinión algo viceral no más.

    Saludos

    ResponderBorrar
  2. Eso de que se aspiren las cenizas lo he oído antes tanto como un hecho como una talla, creo que hasta en Cien años de soledad ha pasado.

    ResponderBorrar
  3. jaja no, ni mi mamá ni yo fuimos nada sentimentales en esas cosas, nos encantaba hacer chistes sobre los muertos especialmente sobre los más queridos, siempre tuvimos mucho "humor de horca" como le llaman los alemanes, creo, a los chistes crueles.

    Siempre me amenazaba con que me iba a penar después de muerta y en la casa teníamos a la "Corina" que era una pariente muerta que supuestamente nos venía a penar. En fin, fueron años muy divertidos cuando teníamos de todo menos $$

    ResponderBorrar
  4. A todo esto a las cenizas y los cadáveres yo no les doy la más mínima importancia ni respeto: se murió y se acabó, el muerto al hoyo y el vivo al bollo como dicen los españoles. Igual tengo muy buenos recuerdos de esos buenos viejos tiempos.

    ResponderBorrar
  5. Me muero de terror que alguien me diga que me va a venir a penar, creo que los espíritus o fantasmas les tengo más miedo que a los ladrones.
    Apego a los muertos como muertos no tengo, ni a cenizas, ni a huesos, cementerios, nada de eso, pero perder las cenizas de la mamá es como penoso...creo yo! Por último tirarlas en alguna parte, al río, mar, montaña etc. Además, en mi caso, me mueto tener un ánfora en mi casa, nunca he visto una tampoco.

    ResponderBorrar
  6. Bueno, además uno recuerda a las personas de cuando estaban vivas, lo otro ya es una representación o un tributo.

    ResponderBorrar
  7. ahh los fantasmas, nosotros hacíamos bromas de eso desde chicos, en la casa había un cajón largo para guardar cachureos muy parecido a un ataud, le decíamos "el cajón de muerto" y con los años yo me mandé a hacer un par que tengo en mi casa, son muy prácticos y medio terroríficos.

    A mi cuando me muera que me tiren a los perros o a la fosa común, me da exactamente lo mismo y ojalá que todos se olviden de mi a los 3 meses de muerto, que me lloren un par de días para cubrir las apariencias y chao. Por alguna razón a mi nunca me ha entristecido una muerte, supongo que se apaga la luz como tiene que ser nomás, las enfermedades dolorosas si me descomponen un poco, pero en fin.

    He visto morirse al papá de un amigo y una tía muy querida, no tiene nada de dramático ni extraordinario, siempre tuve curiosidad por ver eso y cuando lo vi me di cuenta que era lo más común. Al final es lo que nos va a llegar a todos.

    ResponderBorrar
  8. Oh! Qué frialdad, el muerto no sufre pero sí los que se quedan, su familia por ejemplo.
    Desde los griegos o antes que la muerte tiene nucha importancia "en la vida", el ritual para unos y el hecho de que se entierre como a los griegos, lo peor que podía pasarles era que el cadáver fuera devorado por los animales ya que su alma no descansaría jamás. Los indios de India, no le temen porque según ellos se reencarnarán en una mejor vida para así ir mejorando en su espiritualidad. En fin, cada uno con sus gustos :)

    ResponderBorrar
  9. Hay un texto excelente sobre eso, lo busqué y acabo de bajar el libro "El Camino de Chuan Tzu" de Thomas Merton, el texto es este:

    El funeral de Chuang Tzu

    Cuando Chuang Tzu estaba al borde de la muerte, sus discípulos empezaron a planear un espléndido funeral.
    Pero él dijo: "Tendré como ataúd el Cielo y la Tierra; el Sol y la Luna serán los símbolos de jade que pendan junto a mí; los planetas y las constelaciones brillarán como joyas a mi alrededor, y todos los seres estarán presentes como comitiva fúnebre en mi velatorio. ¿Qué más me hace falta? ¡Todo está suficientemente dispuesto!"

    Pero ellos dijeron: "Tememos que los cuervos y milanos devoren a nuestro Maestro."

    "Bien", dijo Chuang Tzu, "sobre la tierra seré devorado por cuervos y milanos; debajo de ella, por hormigas y gusanos. En cualquier caso, seré devorado. ¿Por qué tanta parcialidad contra las aves?"

    jaja "¿por que tanta parcialidad contra las aves?" genial, por eso me gusta tanto el tao y no estoy ni ahi con los malditos griegos

    ResponderBorrar
  10. Por eso yo nunca he sufrido ni llorado por una muerte, no le veo nada trágico, al contrario

    ResponderBorrar
  11. Bonitas palabras de Chuang Tzu, y no deja de tener razón.

    ResponderBorrar
  12. Eres muy extraño Bradanovic, muy extraño.

    ResponderBorrar
  13. No tengo palabras para describir tu columna de hoy. es hermoso saber que hay personas que no tengan ese puto miedo a enfrentar la muerte de un ser querido.

    Los chinos, al igual que los Hindúes tienen una percepción muy bizarra pero maravillosa de la muerte y de como ellos pueden trascender mas alla de lo corpóreo.

    Saludos.

    ResponderBorrar
  14. SI, yo creo que es una tradición medio tonta eso de llorar a los muertos, me he dado cuenta que mucha gente siente una especie de obligación de sufrir cuando se les muere un ser querido y si no llorar y se tiran los pelos es porque no lo querían.

    Para mi es todo lo contrario, la ley es que todos tenemos que estirar la pata, es lo más normal que existe y a mi no me haría maldita gracia que me anden lloriqueando después de muerto, mejor que hagan bromas y me recuerden con simpatría tal como yo recuerdo a toda la familia y amigos finados 'que ya son hartos!

    ResponderBorrar
  15. Me sorprende su frialdad para tratar este tema. Sé que cada uno piensa como le da la gana, sin embargo el tema de "lloriquear a los muertos", es un tena de sensibilidad humana.

    ResponderBorrar
  16. Sensibilidad de la que carezco en absoluto jaja, a decir verdad me irrita un poco ver a la gente llorando a sus muertos

    ResponderBorrar
  17. Tiene Ud. mucho de su mamá ! - aunque ella es bonita, que raro.

    ResponderBorrar
  18. Si Ulschmidt influenció mucho en mi, era incluso mucho más anarquista que yo, mi altura es el exacto promedio de la altura de mis padres 1.725=1.85 y 1.60, mis ideas son 80% maternas y mi caracter 90% de mi papá, no salí bonito como mi mamá pero tampoco salí a mi papá que era extraordinariamente feo

    ResponderBorrar
  19. La verdad es que siempre es interesante conocer otra percepción sobre la muerte, por más chocante que pueda ser a buenas y primeras. He sabido que en algunas partes de la India hacen una celebración cuando muere alguien y el cortejo es más como un carnaval.

    ResponderBorrar
  20. En Tacna los funerales tradicionales llevan el cajón en el hombro y tiran petardos cuando lo entierran. En Arica son con banda de bronce y las primeras filas van todos tristes mientras más avanzas hacia atrás es una completa chacota, todos muertos de la risa.

    En los velorios de mis amigos muertos igual, algunos llegan a ser chocantes por la "falta de respeto" puro chiste y algunos riéndose a carcajadas al lado de otros llorando

    ResponderBorrar
  21. Bueno, para el funeral de mi abuelita pasó algo parecido, estaban quienes lloraban, quienes echaban tallas y los que pasaban de una a la otra.

    ResponderBorrar
  22. ,,bueno,pero eso es un clásico latino. Recuerdo una noche, en la vereda de una casa, yo acompañaba a mi padre y él estaba fumando con otros hombres, en las afueras de un velorio. Naturalmente se pusieron a contar cuentos, y a reir a carcajadas, cuando a sus espaldas llegó el viudo llorando y lo abrazó. Mi padre tuvo que reciclarse de inmediato y darle el pésame (el viudo tuvo el buen gusto de hacer como que no notaba que todos se reían a carcajadas un segundo antes) Se quedaron todos compungidos cuando el viudo se fue, por el papelón. Yo los miraba desde mi baja altura y diría que la complejidad del mundo adulto y sus convenciones recién las empezaba a entender.

    ResponderBorrar
  23. Acá en Arica la mayoría de los funerales todavía son muy a la antigua, va el station wagon con el cajón, luego una multitud (depende cuan popular fue el finado) a pie y finalmente unas micros. Si se trataba de una mini celebridad local puede ir una banda de bronces tocando, un par de estandartes y todo eso. A algunos los entierran con el orfeon municipal con su director Tito Watson a la cabeza que tiene cerca de 90 años.

    En el funeral de mi amiguísimo Nelson, la cosa se descontroló un poco porque estaban sacando el ataud de la iglesia y mientras sus hermanos lloraban desconsolados muchos no pudimos aguantar las carcajadas por las inevitables bromas de la situación, Nelson era muy bromista, similar a lo que pasó con el funeral del Pepe Drago. Creo que a los bromistas es de caballeros despedirlos con risas y chistes de mal gusto.

    ResponderBorrar
  24. Acá ya no hay bronces ! pero en lo demás es mas o menos como Ud. dice. Mucho tiempo atrás se usaban carrozas tiradas por caballos negros, como de película. Pero ahora el ataud o cajón va en un auto negro con carrocería modificada para que entre el muerto en la parte trasera.
    El "jonca" tiene unas tres manijas a cada lado y una en cada punta, que arremeten parientes y amigos a la hora de cargarlo, y un chiste clásico cuando un tipo es poco apreciado por la comunidad es que "va a tener que usar un cajón con las manijas para el lado de adentro", sugiriendo que tendrá que cargarse él mismo porque no habrá concurrencia en su velorio.
    Más aún: Hay gente que de anciana empieza a concurrir asiduamente a los velorios de todo el mundo, como para crear una deuda con el resto de los vecinos y, sospecho yo, asegurarse una audiencia futura en el velorio propio.

    ResponderBorrar
  25. que lindas esas imágenes antiguas. y al parecer su madre falleció muy joven.

    hace un par de años falleció un tio. muy grande el hombre, casi un gigante. cuando en la tumba familiar no entraba el ataud gigante que debieron fabricar especial la risa fue generalizada. nadie pensó en que eso podía ocurrir hasta estar en el cementerio.

    ResponderBorrar
  26. Ah noo, esa es una foto de juventud cuando estabe al los veites pero murió pasados los setenta y eso que fumaba como chimenea. Un ataque al corazón igual que casi todas mis otras tías, espero morirme igualito, ojalá durmiendo ¿que más se podría pedir?

    ResponderBorrar
  27. eso de la gente muy larga o muy ancha es un tremendo problema porque los nichos están fabricados para tamaño estandar, al menos dan un motivo de risa y comentario en el velorio

    ResponderBorrar

"Send me a postcard, drop me a line
Stating point of view
Indicate precisely what you mean to say
Yours sincerely, wasting away
Give me your answer, fill in a form
Mine for evermore
Will you still need me, will you still feed me
When I'm sixty-four"