23 octubre 2017

Decir las cosas

Yo soy muy malo para hablar, cuando hablo las ideas se me atolondran y me irrita mucho tener que contestar algo cuando no tengo los datos a mano, sobre todo tener que responder de inmediato a cosas que deben ser bien pensadas y articuladas primero. Nunca he tenido ese don de la respuesta aguda, instantánea que es característica de los buenos polemistas. En cambio me comunico mucho mejor por escrito. Sin contar que mi tono nasal y mi mala modulación no me hacen maldita gracia. en fin, no soy el único ¿han escuchado hablar a Mario Vargas Llosa? Anda por ahí conmigo mi lejanísimo primo.

Claro que tengo mucha práctica escribiendo así es que no me cuesta mucho armar un texto coherente, entretenido y con los antecedentes de respaldo que corresponden. Cuando uno escribe no interesa tanto el efecto inmediato, que es lo decisivo en las polémicas: la frase brillante y todo eso, lo hablado apela a las emociones mientras que lo escrito va más dirigido a la reflexión. Pero supongo que es todo cuestión de práctica, yo he leído y escrito mucho así es que puedo redactar casi sin pensar, o a medida que voy pensando, lo que resulta muy cómodo.

Sin embargo a veces me arrepiento de no haber dicho lo que tenía que decir en su momento. No solo lo que no le dije a una chica muy linda que conocí a fines de los setenta -tal vez hasta habría agarrado si hubiese atinado a tiempo- sino otras cosas mucho más importantes. Especialmente me arrepiento de cosas tan obvias, como no decirle jamás a los míos como los quiero. Aunque tal vez se los digo a mi manera.

Pero lo que siempre me he arrepentido es que, haciendo clases, siempre me he topado con estudiantes que me sorprenden, que hacen algo muy bien o que en general me parecen personas fuera de lo común, a los que pienso debería irles bien en la vida, y no he tenido la habilidad para alentarlos o felicitarlos. Me he quedado callado, suponiendo que mi aprecio se sobreentiende. Pero no tiene por que ser así, por eso me da vueltas la carta que escribió Albert Camus a su profesor de escuela primaria, luego de enterarse que había ganado el Nobel de literatura:

Querido señor Germain:
He esperado a que se apagase un poco el ruido que me ha rodeado todos estos días antes de hablarle de todo corazón. He recibido un honor demasiado grande, que no he buscado ni pedido. Pero cuando supe la noticia, pensé primero en mi madre y después en usted. Sin usted, la mano afectuosa que tendió al pobre niñito que era yo, sin su enseñanza y ejemplo, no hubiese sucedido nada de esto. No es que dé demasiada importancia a un honor de este tipo. Pero ofrece por lo menos la oportunidad de decirle lo que usted ha sido y sigue siendo para mí, y le puedo asegurar que sus esfuerzos, su trabajo y el corazón generoso que usted puso continúan siempre vivos en uno de sus pequeños discípulos, que, a pesar de los años, no ha dejado de ser su alumno agradecido.
Le mando un abrazo de todo corazón.
Albert Camus

Pese a que la carta chorrea almíbar -algo que siempre he tratado de evitar- creo que dice una cosa que es muy cierta: un reconocimiento que no cuesta mucho, de parte de cualquiera que esté en una posición superior a la nuestra, sea el profesor, el jefe en el trabajo o cualquiera que apreciemos, puede tener un impacto fuerte y a veces cambiar nuestra vida. Yo tuve la suerte de recibir algunas felicitaciones en el momento preciso -cuando estudiaba y también cuando trabajaba- probablemente sin eso nunca habría puesto empeño en mejorar mi redacción por ejemplo, o aprender matemáticas y muchas cosas importantes (para mi) que he logrado.

Es increíble nuestra hambre de reconocimiento y lamento haber sido mezquino en las palabras, muchas veces con mis alumnos, y también con mucha otra gente que se lo merece, pero que diablos, no me sale. En todo caso lo dejo registrado acá mismo para que lo sepan, y a los que les caiga el poncho -que son varios- que se lo pongan.

P.D. estoy tratando de limitar el largo de mis entradas a menos de mil palabras para no ser tan aburrido, vamos a ver cuanto me dura.

P.D. 2 Ayer tuve un record con 1.047 páginas visitadas en el día, hoy también pasaré las 1.000 visitas. Lo normal son 400 diarias y para un sábado son como 200. Claro que unas 280 visitas eran de una sola parte, vayan mis gracias para el ávido lector, que al parecer no es un bot. ¡Chas gracias por leer!

11 comentarios:

  1. Aparentementa hablar y escribir requieren de diferentes areas del cerebro, o al menos de diferentes capacidades.
    No es raro tener una habilidad mas desarrollada.
    Me tinca que oir y leer tambien tienen necesidades deferentes, en mi caso que me hablen, casi resbala, en cambio leo muy rapido y capto mucho mas que oyendo a un hablantin

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  2. Así debe ser, seguro. Por ejemplo mi memoria audiovisual es pésima, yo veo una película y se me olvida el argumento enseguida, también se me olvida prácticamente todo lo que sueño, en cambio me acuerdo de cosas que leí cuando chico, cuando recién había arendido a leer, me acuerdo del silabario Ojo, jaja! y no es chiste.

    cosa muy rara la memoria

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  3. Ese era el silabario cuneiforme.

    Tomás, que rara esta entrada. ¿Estamos entrando en alguna crisis atrasada?

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  4. Yo escribo mejor de lo que hablo, incluso cuando tengo que hablar en inglés con mis paisas de otros lares, porque me enredo ene cuando hablo. pero cuando chateo mis dedos se mueven mas rapido que mi cerebro.

    Decir las cosas aunque duelan, cuesta mucho. pero no porque duelan no hay que dejar de hacerlo.

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  5. Leus, si va a ser una crisis, que no sea de abstinencia ¡Salud!.

    P.D. mira mi nueva pipa, MUY superior a las tuyas jaja
    https://scontent.fanf1-1.fna.fbcdn.net/v/t1.0-9/22688423_10155398883843451_2729791813957840251_n.jpg?oh=e741c4566aa5bbbe89428a4dc3cc0a99&oe=5A753107

    José, si, es bien curiosa esa asimetría de habilidades

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  6. Creo que es algo que tenemos en común, a mí también me pasa que no suelo expresar mucho mi estima con la gente, incluso si se tratan de personas que valoro mucho, tampoco se me da bien dar las gracias y pienso que quienes me conocen ya saben cuál es mi estilo y doy por sentado que saben que los valoro, lo cual en ocasiones puede ser un error. Si a eso le sumamos que ando cada día más tímido, algo que debería ser simple se me hace un tanto complejo.

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  7. Es una joda, no deberíamos hablar, mejor comunicarnos por tarjetas jaja

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  8. Yo soy de los que dan elogios, pero ya no.

    Mas de una vez se me chingaron mis creditos, durmiendose en los laureles.

    Ahora solo doy palabras al final, no en medio de un proceso.

    PD.


    hoy me pille a JAK afuera de la RBB en CCP. Asi que aproveche de sacarme una foto con mi candidato.

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  9. También hay que saber cuando decirla. Oye, ofrécele a KAst el Rayo de la Muerte, con unos ajustes lo convertís en Rayo derechizador!!
    https://pbs.twimg.com/media/DMyxmG7X0AE0NRt.jpg

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  10. Wajajaja

    yo lo veia mas chico, pero en la foto me saca como 15 cm... ahora que es flaco el perico

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"Send me a postcard, drop me a line
Stating point of view
Indicate precisely what you mean to say
Yours sincerely, wasting away
Give me your answer, fill in a form
Mine for evermore
Will you still need me, will you still feed me
When I'm sixty-four"