24 septiembre 2018

Chile país de oportunidades


"Si eres un niño pobre y buscas un mejor futuro, ándate a Dinamarca o a Chile"
No recuerdo exactamente el texto, pero algo así decía el tweet de un alemán que apareció hoy, abajo colocaba el gráfico de la OCDE donde aparecía Chile liderando a los países de la OCDE en movilidad social. Es obvio que una sola cifra no da un panorama completo, pero en el caso de Chile es una cifra extraordinaria si la miramos en conjunto con otras, producto de las políticas que nos enriquecieron hace 20 años atrás. Veamos:
 
Chile ¿país de oportunidades?
Es algo que se sabía desde hace tiempo. No hay que ser un genio para darse cuenta que después de 10 años de crecimiento sostenido en tasas alrededor del 7%, entre 1986 y 1996, a 20 años después, se podría ver un gran aumento de la movilidad social. La "política del chorreo" que es anatema para todo izquierdista que se respete, simplemente mostró como se cumple, una vez más a pesar de las toneladas de discursos destinados a demonizar tan macabra idea. El chorreo si funciona, en Chile y en todas partes, mal que les pese a los igualitaristas.

Y no es la única prueba objetiva, numérica, a favor del chorreo, existen otras dos que son igual de obvias y contundentes: la disminución de la pobreza y la reducción de la desigualdad, que es el Santo Grial de la izquierda. Esto resulta todavía más notable que la movilidad social, porque la receta para reducir la desigualdad de la izquierda, la única que les ha funcionado, consiste en hacerlos a todos más pobres. India, país de larga tradición socialista se encuentra entre los más igualitarios y  más pobres del mundo, cosa parecida se podría decir de Egipto, Irak, Pakistan y otros países pobres e igualitarios. O sea, donde todos son igualmente muertos de hambre.

Un paréntesis sobre la desigualdad
Claro que hay países de altos ingresos con poca desigualdad, como los europeos y escandinavos, pero los sistemas de bienestar que produjeron esa igualdad están haciendo agua en todas partes, especialmente en Europa y solo se sostienen -precaria y temporalmente- por inercia. No existe peor receta para el desarrollo que poner políticas de bienestar antes de enriquecerse, es cosa de mirar los números y la situación en que los dos gobiernos de Bachelet dejaron a Chile.

Para un país emergente la desigualdad es componente fundamenal del crecimiento. Wilfredo Pareto  y cualquier revisión de números que se haga en la historia nos dice que la distribución de ingresos estable gira alrededor del 80-20, un 20% de ricos y el 80% de comparativamente pobres. esa es la distribución natural, en régimen, que se cumple siempre, no solo para la distribución del ingreso sino para muchos otros fenómenos donde el azar se combina con la acción humana, es una "ley empírica" asombrósamente exacta y regular. Considerar que la desigualdad es "mala" es tan estúpido como decir que la belleza o la fealdad de las personas es mala, todos somos desiguales por naturaleza, la igualdad sería algo monstruoso y nada deseable, excepto para los muy mediocres.

Los efectos de las buenas y malas políticas
En los países existe otra ley empírica que dice que los efectos de un cambio de política se comienzan a ver, más o menos, pasados cinco años. Por ejemplo cuando hay crecimiento económico solo unos pocos se dan cuenta a los cinco años, la gente común piensa que los beneficios "no le han llegado", porque obviamente, a nivel personal, nadie cambia su situación económica de un día para otro, a menos que se gane el premio gordo de la lotería. Recién pasados unos diez años estos efectos pueden empezar a medirse, porque en un país con 18 millones de personas eso toma su tiempo y 20 años después ya es un consenso, al menos entre los técnicos que entienden de economía. Eso es lo que pasa hoy en Chile.

Pero toda moneda tiene dos caras, porque pasa exactamente lo mismo con las malas políticas económicas. En el año 2010 se promugó la Ley del Royalty Minero, impulsada por un parlamentario que después se fue preso por pedofilia, de cuyo nombre no quiero acordarme. El daño que hizo esa ley al país lo estamos viendo recién ahora ¿cuantos proyectos mineros nuevos se han hecho desde entonces? ¿cuanta inversión extranjer directa ha llegado para proyectos nuevos? La verdad es que la inversión minera nueva, que empujó la década de alto crecimiento, se congeló en ese mismo año.

Al principio muy pocos lo notaron, ahora que han pasado 10 años en el norte de Chile la gente está empezando a notar como se desinfló el boom minero, la frase "estamos forrados" de los hermanos Parisi se fue al diablo hace rato. Y en esto no tiene NADA que ver el precio del cobre, porque con un precio altísimo a Chile no llegó inversión nueva, eso es grave, muy grave. ¿Y saben por que pasó? Porque un congreso llenos de estúpidos y un presidente idem (Ricardo Lagos) no fueron capaces de darse cuenta de las consecuencias que tendría cambiar leyes y desconocer compromisos de largo plazo que el estado había firmado. Desde ese momento dejamos de ser confiables para los grandes inversores.

En diez años más estaremos en una crisis, con el político que sea y las cifras de pobreza, movilidad social ¡hasta la preciada igualdad de ingresos de los estúpidos socialistas! se van a ir todas al diablo. A mi que no me interesa la plata, esto no me preocupa y me siento en mi ventana virtual a mirar como la gente corre hacia el barranco, de la mano de la seudo izquierda o la seudo derecha del piñerismo, da exactamente igual, ambos son igualmente incapaces de evitar lo que va a pasar el año 2028, acuérdense de mi nomás, la misma gente solo puede producir los mismos resultados.

Hasta que llegue alguien con pantalones a nuestra política y le hable claro a la gente, y les explique francamente que el chorreo si funciona, y no solo eso, sino que es lo único que funciona. En la historia no se conoce otra receta que haya funcionado, pero mientras la gente ignorante y resentida sea acarreada por los palurdos que tenemos hoy en nuestra política, el destino será tan predecible e inevitable como que mañana en la mañana va a salir el sol. Acuérdense.

5 comentarios:

  1. ¿EL año 28 diez, años mas ? Eso es mucho tiempo, en mi opinion entre drogas, delincuencia, y guerrilla en la Araucania, tres asuntos donde la solucionatica es politicamente muy cara, mas el crecimiento del gasto del estado tratando de acallar el boche callejero y leyes ad hoc que disminuyen la seguridad juridica y el valor de los contratos, sumado al populismo galopante, chilito tiene su destino prefijado y estallara antes.
    Que dios (Dios) nos pille confesados y se acuerde de mi mantra...

    ResponderBorrar
  2. Yo creo que lo que mencionas (brotes de terrorismo, delincuencia, etc.) son el perejil del pavo en términos de crecimiento y disminución de la pobreza. Claro que son un desastre para la calidad de vida, pero la mejora macroeconómica de Chile, su enriquecimiento o empobrecimiento dependen principalmente de la inversión extranjera, y de esta la componente más importante es la inversión minera. Con cuatro o cinco grandes proyectos mineros nuevos volveríamos a enriquecernos por bastantes años, no solo por la inyección de inversión fresca, sino también por el efecto multplicador.

    Creo que esa es la única oportunidad que tenemos de repetir el milagroso enriquecimiento que tuvimos entre 1986 y 1996, no veo otra manera

    ResponderBorrar
  3. El Estado de bienestar europeo se financió con impuestos comunes a las empresas y las personas. El estado de bienestar de los socialistos del siglo 21 se financiaría con la idea mágica de Trapalanda: estamos sentados sobre enormes recursos naturales, le cobraremos un buen peaje a los codiciosos que los quieren sacar y con eso financiamos la política. Parecía funcionar durante el boom de precios y después no funcionó nada. Uls

    ResponderBorrar
  4. Claro Ulschmidt, los estados europeos financiaron su bienestar al princiipio con impuestos y después con distintos artilugios (deuda especialmente) porque en ningún lugar del mundo un sistemma de bienestar es viable, ni siquiera en Estados Unidos que es la economía más rica del mundo pueden sostener sus sistemas de bienestar, que son bastante menores que los europeos. Todos tienen un forado enorme que nadie quiere reconocer, hay un descuadre aritmético enorme entre los ingresos por impuestos y los egresos por "prestaciones sociales", primero cayeron los griegos, pero están en la lista Italia, España, Irlanda, Portugal, Francia, Gran Bretaña y la propia Alemania, que parecía blindada contra todo mal. El modelo de impuestos altos con prestaciones de bienestar altas es completamente insustentable porque las "necesidades" son infinitamente mayores que cualquier ingreso. Es como levantarse del suelo tirándose los cordones de los zapatos: no se puede.

    Para que hablar del "Socialismo SIglo XXI" e incluso países más moderados como el propio Chile, hemos caído en un deterioro acelerado por lo mismo. La economía chilena tuvo su peor deterioro en los tres últimos gobiernos, aunque el primer gobierno de Piñera mejoró algo los números, su base de comparación era muy baja y no hizo nada por arreglar los problemas estructurales, esta vez tampoco lo hará porque no tiene los votos en el parlamente y tampoco tiene la convicción ni el coraje político necesario para intentarlo.

    ResponderBorrar
  5. Ayer en el twitter de José Piñera pusieron que Chile tiene fondos equivalentes al 80% del PIB en las AFP, pero que USA tiene un déficit... ¡del 150% de su PIB! Eso me impresionó, no pensé que estaban en una situación tan difícil.

    Con respecto del royalty, durante Piñera I se hizo una modificación, muy discreta, con lenguaje mediático ("¡más royalty!") pero que fue bastante beneficioso para los inversionistas. Era un nuevo régimen voluntario, o sea, no fue un cambio de reglas. El 100% se cambió al nuevo régimen, por lo que un rayo de esperanza hay.

    ResponderBorrar

"Send me a postcard, drop me a line
Stating point of view
Indicate precisely what you mean to say
Yours sincerely, wasting away
Give me your answer, fill in a form
Mine for evermore
Will you still need me, will you still feed me
When I'm sixty-four"