Home office y la importancia del dinero

Ya les he contado que la artista visual Fran Salomon es mi cuentera favorita, regularmente recibo sus mail con videos y podcast que leo con mucho interés, especialmente el último, que recibí hoy, donde habla de trabajar desde la casa y entrevista a una amiga que trabaja desde un café, un restaurant o  una biblioteca municipal para no sentirse tan encerrada en la rutina trabajando siempre en la casa.

El podcast lo pueden escuchar -o leer- en este link y está bien interesante para los que consideran la opción del home office y cosas por el estilo. Bueno, la cosa es que ella hace algo parecido a lo que trato de hacer yo, con la diferencia que lo hace mejor y gana plata, por eso mismo a mi me interesa leer y escuchar lo que dice ya que muchas cosas las puedo aplicar en este humirde Templo del Ocio, que es mi fuente de entretención y relajo.

Aunque tenemos muchas ideas comunes hay otras que yo no comparto para nada, y eso muestra -por ejemplo- las diferentes maneras de ser y sobre todo la diferencia de edades. La amiga que entrevista es una psicóloga, muy simpática y que también hace clases de coachig, presentaciones y cosas por el estilo  y en un video cortito que aparece termina con esta frase que me llamó la atención "porque el que diga que el dinero no importa, está muy equivocado queridos amigos".

Yo se que es un afirmación que parece  obvia y casi todos estarán de acuerdo con eso, lo que es una buena razón para desconfiar de su validez. En verdad yo estoy convencido que ese es un tremendo error, que cometen casi todas las personas jóvenes que se están abriendo camino y jamás han puesto en duda que "el dinero importa, mucho". Se equivocan, el dinero no tiene más importancia que el metro, el kilo o los centímetros, no es más que una unidad de medida. Yo no tengo duda que es un enorme error darle importancia al dinero y creer que ganar dinero es algo importante.

Más aún, creo que cuando alguien piensa que el dinero es importante pueden pasar dos cosas (i) que esté dispuesto a hacer grandes sacrificios para ganarlo, y que llegue al último día de su vida forrado en plata que no se puede llevar a la tumba, después de una vida seca y sacrificada, o (ii) que también se sacrifique toda su vida buscando ganar dinero y que jamás llegue a tenerlo en cantidades apreciables. Esta segunda situación es la más común y debe ser lo que le pasa al 99% de las personas que piensan que "el dinero si importa"

Yo he contado antes que que tenido la suerte de conocer a varios millonarios, digamos desde un par de millones de dólares hacia arriba en patrimonio yo los calificaría así. Tengo un amigo que debe tener unos 2, mi antiguo jefe tenía entre 10 y 20, otros como un señor Cousiño, Abe Salstein o el señor Wilcheck que conocí hace años tenían con seguridad más de 100, bueno, ninguno de ellos pensaba que el dinero es importante y justamente por eso se hicieron millonarios, jamás les preocupó arriesgarlo o perderlo.

En corto, yo diría que los que piensan que el dinero es importante, muy rara vez llegan a tenerlo y a lo más que pueden aspirar es a que, después de muchos años de sacrificio, tengan lo que se llama cierta "estabilidad económica". Y dudo que eso importe mucho. Claro que cuando uno es joven y mira el futuro con ambición no se da cuenta de eso, normalmente es una ampolleta que se enciende recién a partir de los 50, más o menos.

El dinero amigos, no importa nada y si alguien es joven y ambicioso más le vale darse cuenta bien tempranito de eso, acostumbrarse a apostar y estar dispuesto a quedarse en la calle diez veces diez, porque es la única manera de hacer plata si no eres heredero. Maquiavelo lo dijo mucho mejor que yo, un poco machista para estos tiempos políticamente correctos, pero concuerdo con él, palabra por palabra:

"Es mejor ser impetuoso que circunspecto, porque la fortuna es mujer y, si se quiere dominarla, hay que maltratarla y tenerla a freno. La experiencia enseña que se deja vencer por quienes proceden fríamente; pero, como mujer que es, gusta de los jóvenes, que tienen menos miramientos, son más brutales y la someten con más audacia" (El Príncipe c. XXV p. 118).

P.D. A propósito del machismo y no respetar a las mujeres, recordé que Goethe tenía una idea parecida así es que busqué en "Fausto" el párrafo hasta que lo encontré, es muy bueno, lean:

MEFISTÓFELES.- Con tal de que brilles exteriormente, todo irá de maravilla; el joven que no tenga sus dosis de vanidad, vale más que se ahogue. Es así, es mi opinión, que debe uno presentarse a la gente; con atuendo lujoso, si quiere arrastrar todos los corazones; si río, todos reirán conmigo. Sigue mi ejemplo y pronto podrás convencerte de que es buena forma de comprobar la fortuna; porque las mujeres casi siempre perdonan que no se les respete, con tal que se usen algunas fórmulas. Fuera varitas encantadas y mandrágoras, ya que siempre ha sido el buen humor la mejor de las magias; y si estamos de acuerdo, no sé quién pueda tomarlo a mal.