05 septiembre 2021

Los vascos


Estuve años tratando de conseguir el libro Memoria Histórica sobre la familia Álvarez de Toledo en Chile, el libro aparecía en todas partes pero en ningún lado era gratis. Me pareció insólito que todavía se esté vendiendo y existan sinvergüenzas cobrando derechos de autor por un libro que se publicó en 1903, pero al parecer es la Universidad de Chile, de la que Thayer fue funcionario, la que nos sigue sacando la sangre y cobrando por un texto que debería ser de dominio público hace muchos años. Finalmente después de mucho buscar lo encontré donde debí haber empezado a buscar, en archive.org, que es uno de los sitios más alucinantes de Internet, tiene millones de volúmenes, debe ser el sitio más completo del mundo para buscar información histórica.

Tenía la intuición que era un libro importante para mi chifladura por la genealogía y no me equivocaba, porque me ayudo a aclarar dos misterios que hasta ahora me parecían inexplicables. Viendo la firma de Thayer me di cuenta que la letra "T"  de Tomás es casi idéntica a la que uso yo en mi firma

Esa letra se la robé a la firma de mi padre y siempre me intrigó de donde la había sacado, pensé que era del alemán antiguo, ya que él estudió en Alemania y la letra tenía un adorno encima como la de Thayer Ojeda, pero ahora me doy cuenta que es españolísima, y lo que yo veía como adorno es la barra superior, es posible que cuando yo me muera el Tomás Jr. me robe la firma tal como yo se la robé a mi padre, al menos ahora se de donde vino la famosa letra.

Siempre he admirado a Thayer Ojeda por su curiosa historia: desciende de una familia inmigrante desde Boston y se destacó desde chico en los estudios, en 1902, a los 25 años, Thayer entró a trabajar como funcionario público a la Biblioteca Nacional donde se fascinó con la cantidad de documentos que existían distribuidos en parroquias, intendencias, oficinas del estado y archivos particulares, conteniendo información desde los años de la conquista de Chile, eso lo deslumbró y encontró lo que sería su vocación por el resto de su vida: ser archivero, paleógrafo y ratón de biblioteca.

Lo de paleógrafo es interesante. Resulta que durante siglos todos los documentos se guardaron en foma manuscrita, las máquinas de escribir fueron un invento de fines del Siglo XIX, y cuando vemos estos manuscritos, aunque estén en perfecto castellano, resultan ininteligibles. Mientras más atrás nos vamos es más difícil de entender,. cómo pude comprobar yo mismo cuando revisaba en el Archivo Nacional los documentos de mi abuelo Tomo. Nos cuenta Guillermo Feliú Cruz sobre Thayer: 

"Tentábanle las dificultades, como a los grandes descubridores y tenía frente a él 12.500 volúmenes de manuscritos, de páginas ilegibles, sin índices, muchas veces corroídos por la humedad de los sótanos en que durmieron casi durante una centuria. Para descifrar estas viejas páginas, el señor Thayer Ojeda, sin maestros, se hizo paleógrafo; estudió las letras góticas del siglo xvi, la casi indescifrable de cadeneta del siglo XVH, cuando establecido el impuesto de papel sellado y reglamentado el número de renglones de los folios, los escribanos alargaban los rasgos para aumentar los derechos; descrifró signos y abreviaciones. En posesión de estos conocimientos, emprendió entonces la revisión del Archivo de Escribanos de Santiago de cerca de 1.000 volúmenes en folio, desde el protocolo de Pedro de Salcedo con fragmentos del año 1559, hasta los primeros del siglo XVIII, extractando testamentos, cartas dótales, particiones de bienes, contratos de compra venta de inmuebles y demás documentos que habrían de servirle para conocer, en sus cimientos mismos, la constitución de la familia y de la propiedad raíz de nuestra Patria. Paralelamente a esta labor, ya para él ímproba sólo por la latitud, emprendió también, pieza por pieza, página por página, la revisión del Archivo de la Real Audiencia, de más de 3.000 volúmenes, para continuar la catalogación iniciada, muy poco antes por el Jefe de la Sección de Manuscritos, don Hipólito Henrión".

En fin, un gran tipo, me lo imagino y puedo entender perfectamente la pasión con que se dedicó a seguir la hebra  de la historia social de Chile a partir de leer y clasificar decenas de miles de archivos ¡y lo más notable es que lo hizo cuando Internet no existía! Me saco el sombrero. 

La Memoria Histórica sobre la familia Álvarez de Toledo en Chile fue su primer libro que escribió, por la familia Ojeda él descendía de los Álvarez de Toledo, y como el conquistador Francisco Álvarez de Toledo Fernández es mi tatarabuelo 7º , pensé que si algo me podría ayudar con el misterio de si mi tatarabuelo 4º Agustín del Pozo y Olivera era o n hijo natural de Juan del Pozo Silva y Toledo.

Creo que ya lo he dicho antes, la familia Pozo es más divertida que los Pérez Guzmán, y para que decir los Bradanovic Ilic, que seguramente fueron por muchas generaciones  campesinos o merineros que se casaban entre primos. Los Pozo en cambio están llenos de misterios y uno de estos es mi tatarabuela 5ª doña Clara de Olivera, que nadie sabe con quien tuvo a sus dos hijos naturales.

El libro de Thayer Ojeda no lo dice, pero da una fecha muy interesante, y la noticia que la casquivana doña clara ¡era casada con otro señor! Leo en su memoria:

"Toledo Córdoba (Antonio), orijinario de Lima, hijo natural del marques de Mancera i de doña María de Córdoba casó, en el Sagrario, el 27 de mayo de 1668, con doña Clara de Olivera, hija lejítíma del alférez Miguel de Olivera i de doña Beatriz Maturana, hijo único: frai Antonio de Toledo, franciscano. Doña Clara testó, ante Morales Narváez, el 24 de abril de 1725".

Entonces don Antonio Toledo Córdoba, hijo natural del marqués de Mancera, entonces virrey del Perú, era el esposo de doña Clara, quien vivía en Santiago mientras don Antonio vivía en Lima, a los 5 años de casados nace mi tatarabuelo 4º don Agustín, hijo natural de don Juan del Pozo ¡que era primo de don Antonio! No contento con ponerle esta cornamenta, la casquivana doña Clarita tuvo a Carlos, un segundo hijo con don Juan, probablemente unos pocos años después. 

Con don Antonio tuvo un solo hijo -Antonio- que es el único que menciona en su testamento, quien se hizo cura. Sin embargo los otros dos hijos con apellido del Pozo y Olivera, fueron ampliamente conocidos y están bien documentados en la sociedad de Santiago y Talca, porque se siguieron casando entre primos, para desesperación de los que tratamos de seguir esta enredada trama. Pero con las fechas y el detallado registro de Thayer Ojeda ya no me quedan dudas que el capitán Juan del Pozo era mi tatarabuelo 5º, todo cuadra perfectamente pues la familia Pozo solo tiene uno más con ese mismo nombre: Juan del Pozo Silva y Alemán, pero es de una generación posterior. 

Esto si que es un folletín, díganme si no es una familia entretenida. La cosa es que el trabajo de Thayer es completísimo, excepto claro con los hijos naturales de relaciones medio escandalosas. Este libro me permitió ir hacia atrás y encontrar una gran cantidad de abuelos de las provincias vascongadas. Es muy entretenida la historia de los vascos y llegué a mi bisabuelo 26º Andeca Lopes des Basques, duque de Cantabria y I señor de Vizcaya, en el año 670 aprox. Había agregado a toda esta rama y estaba lito para subirla a mi blog de genealogía, cuando me di cuenta que usé un archivo Gedcom equivocado. Todo de nuevo, lo haré mañana, eso si.

7 comentarios:

  1. De los vascos siempre se han expuesto teorías raras: que son los europeos más viejos, que no son indoeuropeos, que su lengua es un relicto previo a las lenguas indueuropeas, que tienen más Rh negativo que nadie, en fin, y desde luego que son testarudos. Uls

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  2. Yo pensaba escribir sobre los vascos que tienen una historia muy pintoresca, pero me interesó más la historieta de mi abuela y me fui por esa parte. Los vascos se precian de nunca haber obedecido a un rey, a lo más lo han tolerado cuando no les quedaba otra, pero en la edad media solo admitían señores, condes o cualquier aristócrata que fuera primero entre pares, nunca se tragaron el cuento del derecho divino de los reyes. Por ahí puede estar la explicación de que son eternamente rebeldes y revoltosos, ETA y todo lo demás

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  3. Hay un cuento de ciencia ficcion, no recuerdo nombre, ni autor. Resumo lo que recuerdo: una familia vasca se hace inmensamnete rica y construye una maquina para retroceder en el tiempo y la usan para descubrir el origen de los vascos, viajan cada vez mas atras y siempre hay vascos ya instalados. Finalmente deciden dar un gran salto atras en el tiempo, aun sabiendo que esta vez ya no podran volver, lo hacen y no encuentran a nadie...

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  4. Wilson, la autora es Magdalena Mouján Otaño, argentina de nacimiento pero vasca de tradiciones, matemàtica. Con un grupo del que formó parte introdujo la investigación operativa en el país, pasó a la Comisión de Energía Atómica y con la primera computadora en el país, "Clementina", se hicieron los cálculos para el primer reactor experimental local, el RA1, ella formó parte de todo eso.
    Encima escribía ciencia ficción e imaginó ese lazo temporal para explicar la aparición de los vascos, que al final resulta que se originarían a sí mismos, yo también leí el cuento hace mucho y me pareció bien original. Uls

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  5. ¡Que buena! No tenía idea del cuento ni la autora, voy a averiguar. Datazo de Ulschmidt!

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  6. Gracias Uls, acabo de leerla de nuevo, y me volvio a gustar.

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  7. .. en realidad, dado el final del cuento, los vascos serían el origen de toda la Humanidad ! no le faltaba humor a la autora. Dicen que el franquismo lo prohibió al cuento, con lo cual, obviamente, lo hicieron mucho más célebre. Uls

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"Send me a postcard, drop me a line
Stating point of view
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Give me your answer, fill in a form
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Will you still need me, will you still feed me
When I'm sixty-four"