Prat se onvirtió en héroe casi por accidente, nunca había sido un tipo de grandes gestos, tampoco era patriotero aunque si muy patriota, solo que llegado el momento hizo lo que tenía que hacer sin escabullirse ni optar por el camino más cómodo de la rendición. Peleó hasta el final y creo que los muchos hechos de valor que ocurrieron en ese combate fueron inspirados en el ejemplo de Prat, que no tenía vocación de héroe y de no haber sido por ese combate, tal vez habría sido un capitán más de los que pelearon en esa guerra.
Para ser héroe no hace falta ser histrionico, ni dar grandes discursos, solo hay que actuar como corresponde llegado el momento. Pienso por ejemplo en el liderazgo de Zelenski, por el que nadie daba un peso y todos consideraban pro ruso, pero cuando llegó la ocasión no salió arrancando como Yanukovich, que apenas olió el peligro se fue a esconder bajo las faldas del Keremlin. Un buen líder inspita y puede convertir un país común y corriente en un lugar de héroes, como los del Batallón Azov, que acorralados por hambre y sed tuvieron que rendirse no sin antes causar pérdidas enormes al enemigo. Hay distintas formas de heroismo pero todas inspiran. En fin, vamos al refrito.
A bordo de la "Esmeralda" había un joven ingeniero chileno llamado Juan Agustín Cabrera Gacitúa que, según su relato, "cumplía una misión secreta e importante del gobierno". Gracias a su privilegiada posición, pudo aportar algunos datos desconocidos sobre el combate.
Muchos de los marinos de la "Esmeralda" no sabían nadar ya que en realidad eran simples campesinos u obreros enrolados debido a que en ese momento cumplían con su servicio militar.
Después de que el "Huáscar" hundió a la "Esmeralda", un oficial peruano le preguntó al ayudante del cirujano de la "Esmeralda", Germán Segura González, qué andar tenía la "Covadonga". Para que el "Huáscar" no lo alcanzara, éste exageró diciendo que alcanzaba unos 10 a 11 nudos. Debido a esto, el comandante Grau desistió de perseguir al barco chileno.
La madre de Luis Uribe, doña Rosario Orrego, falleció el mismo día del combate.
En la última carta de Arturo Prat a su esposa, decía: "no dejes de pagar el canon de arriendo de mi mamá".
Por el lado peruano a bordo del "Huáscar" sólo murió el joven teniente segundo AP Jorge Velarde, que cayó en el segundo abordaje chileno al monitor peruano, encabezado por el teniente Ignacio Serrano.
Luego del combate, el capitán de navío Miguel Grau escribió una carta de pésame a la viuda, señora Carmela Carvajal de Prat, adjunto a dicha carta, Grau envió los efectos personales de Prat encontrados con él, incluso su sable. En uno de sus párrafos le expresa: “Fue víctima de su temerario arrojo en defensa y gloria de la bandera de su patria”
El Sargento chileno Juan de Dios Aldea Fonseca, quien saltó al abordaje junto al Capitán Prat, resultó gravemente herido y fue atendido en la enfermería del "Huáscar" por orden del Almirante Grau. Lo mismo ocurrió con el teniente Ignacio Serrano Montaner. Este, al verse solo en la habitación, y a pesar de estar gravemente herido, intentó prenderle fuego a las cortinas con una de las lámparas existentes. No logró su cometido y falleció minutos después.
El Capitán de Navío peruano Juan Guillermo More, Comandante de la fragata blindada Independencia, pierde su nave al hacerla encallar durante la persecución a la "Covadonga". Es sometido a una Corte Marcial pero debido a la guerra, este proceso nunca terminó, pero fue puesto bajo arresto en Arica. Voluntariamente se une a las tropas peruanas apostadas en el Morro de Arica, donde era comandante de las baterías del Morro, al mando del cual es muerto durante el combate.(7 de Junio 1880).
Carlos Condell sería tiempo después el tercer Comandante del Huáscar durante el conflicto, después del Almirante Grau (Perú) y el Capitán Thompson (Chile)
El General peruano Juan Buendía que estaba al mando del Ejército del Sur, dispuso fuego a discreción desde tierra hacia la Esmeralda. Impresionado por la valentía de sus tripulantes, tuvo especial atención con los ellos, una vez prisioneros en los almacenes de la Aduana, después, Buendía caería en desgracia en la batalla de Tarapacá el 27 de noviembre de 1879.
Actualmente, en el Huáscar-museo se recuerda con todos los honores a los tres comandantes, y héroes, fallecidos en su cubierta: Prat (Iquique), Grau (Angamos) y Thompson (Arica).
P.D. y no dejen de ver este powerpoint con toda la tripulación de la Esmeralda dibujada por Alan Ortega Becerra
Curiosidades del Combate Naval de Iquique (publicado el 20 de mayo de 2011)
Gracias al aporte de don Rooney Valcarce, como siempre. Aquí van:
Gracias al aporte de don Rooney Valcarce, como siempre. Aquí van:
Muchos de los marinos de la "Esmeralda" no sabían nadar ya que en realidad eran simples campesinos u obreros enrolados debido a que en ese momento cumplían con su servicio militar.
Después de que el "Huáscar" hundió a la "Esmeralda", un oficial peruano le preguntó al ayudante del cirujano de la "Esmeralda", Germán Segura González, qué andar tenía la "Covadonga". Para que el "Huáscar" no lo alcanzara, éste exageró diciendo que alcanzaba unos 10 a 11 nudos. Debido a esto, el comandante Grau desistió de perseguir al barco chileno.
La madre de Luis Uribe, doña Rosario Orrego, falleció el mismo día del combate.
En la última carta de Arturo Prat a su esposa, decía: "no dejes de pagar el canon de arriendo de mi mamá".
Por el lado peruano a bordo del "Huáscar" sólo murió el joven teniente segundo AP Jorge Velarde, que cayó en el segundo abordaje chileno al monitor peruano, encabezado por el teniente Ignacio Serrano.
Luego del combate, el capitán de navío Miguel Grau escribió una carta de pésame a la viuda, señora Carmela Carvajal de Prat, adjunto a dicha carta, Grau envió los efectos personales de Prat encontrados con él, incluso su sable. En uno de sus párrafos le expresa: “Fue víctima de su temerario arrojo en defensa y gloria de la bandera de su patria”
El Sargento chileno Juan de Dios Aldea Fonseca, quien saltó al abordaje junto al Capitán Prat, resultó gravemente herido y fue atendido en la enfermería del "Huáscar" por orden del Almirante Grau. Lo mismo ocurrió con el teniente Ignacio Serrano Montaner. Este, al verse solo en la habitación, y a pesar de estar gravemente herido, intentó prenderle fuego a las cortinas con una de las lámparas existentes. No logró su cometido y falleció minutos después.
El Capitán de Navío peruano Juan Guillermo More, Comandante de la fragata blindada Independencia, pierde su nave al hacerla encallar durante la persecución a la "Covadonga". Es sometido a una Corte Marcial pero debido a la guerra, este proceso nunca terminó, pero fue puesto bajo arresto en Arica. Voluntariamente se une a las tropas peruanas apostadas en el Morro de Arica, donde era comandante de las baterías del Morro, al mando del cual es muerto durante el combate.(7 de Junio 1880).
Carlos Condell sería tiempo después el tercer Comandante del Huáscar durante el conflicto, después del Almirante Grau (Perú) y el Capitán Thompson (Chile)
El General peruano Juan Buendía que estaba al mando del Ejército del Sur, dispuso fuego a discreción desde tierra hacia la Esmeralda. Impresionado por la valentía de sus tripulantes, tuvo especial atención con los ellos, una vez prisioneros en los almacenes de la Aduana, después, Buendía caería en desgracia en la batalla de Tarapacá el 27 de noviembre de 1879.
Actualmente, en el Huáscar-museo se recuerda con todos los honores a los tres comandantes, y héroes, fallecidos en su cubierta: Prat (Iquique), Grau (Angamos) y Thompson (Arica).
Sera muy interesante ver a Merluzo mañana en la conmemoracion del 21 de mayo en Valpo...Y ver como lo reciben los encargados de mi mantra, que siempre han sido dignos caballeros, pero tambien hay sutilezas...
ResponderBorrarCapaz que hasta vea teve...
Ésta, seguro es mentira, pero es sabrosa.
ResponderBorrarDicen que un panadero chileno de Iquique le vendía el pan a los buques chilenos. Ese día le tocaba llevar el pan y llegó en bote a entregarlo. Justo en esos momentos se oyó el famoso grito de “humos al norte” y ya no pudo bajar. Después del combate fue hecho prisionero y al ser interrogado que labor cumplía, dijo : “yo estaba ahí de puro cantor”. Fue consignado como músico.
Si no es cierto, debería serlo.
W, seguro que Boric no debe ser para nada bienvenido, especialmente después de la chambonada que se mandó removiendo al jefe militar. Una estupidez tras otra, pero cada una aporta un poquito a aumentar la repulsión que generan, todo suma.
ResponderBorrarMarcelo, que buena historia jaja, seguro que es mentira, porque .la Esmeralda no solo tenía cocina con panadería, contaba hasta con mayordomos y ayudas de cámara, igual la historia es excelente.
Y ya que estamos en mentiras -o medias mentiras interesantes- encontré el libro Episodios Marítimos" de don Benjamin Vicuña Mackena, aunque es un panfleto resulta muy entretenido de leer y lo recoiendo
https://www.museovicunamackenna.gob.cl/sites/www.museovicunamackenna.gob.cl/files/images/articles-25757_archivo_01.pdf
Vi el power point. Me sorprendió la cantidad de gente que tripulaba el buque. Pensé que a lo sumo eran 50 personas.
ResponderBorrarY un niño de 10 años!!! Otros tiempos.
Mira que interesante. Fui al sitio
ResponderBorrarLitoralpress.cl y bajo el título de “Prat y el combate naval de Iquique, la historia detrás de la historia” sale la anécdota de “yo estaba de puro cantor”.
Claro que referida a Juan Agustin Cabrera Gacitua. No a un panadero. Parece que algo de cierto hay en eso.
Ahi si es más creíble la cosa, Juan Agustín Cabrera, ingeniero chileno era el único civil embarcado en la Esmeralda, era espía del Gobierno Chileno y se ha especulado un montón sobre lo que hacía allí, Jorge Inostroza en "Adiós al 7º de Línea" inventó toda una historia de espionaje con una chilena supuestmente amante del general peruano Buendía, en una de esas no era tan fantasiosa la cosa. Y ciertamente si era espía lo lógico era que dijera que estaba "de puro cantor" en el buque
ResponderBorrarSegún la información oficial, la Esmeralda tenía una tripulación de 200 hombres. Considerando que de eslora tenía 64 metros y casi 10 de ancho o manga es una superficie considerable (600 metros cuadrados); es más de media cuadra de cubierta.
ResponderBorrarSí; esto de las anécdotas es una especie de revisionismo, una forma de humanizar, pero también de los investigadores de destacarse mostrando cuestiones que no tienen mucha importancia... sorry por echarles el avión abajo. Es como decir que, antes de saltar al abordaje, Arturo Prat fue al baño a echar la corta y después se mandó un pencazo al seco. Hoy en día sería "puso un pan con queso en el microondas" y escribió a la señora por Whatsapp "no te olvides de pagar Netflix y comprar alimento para el perro". Es completamente irrelevante para la gesta y una forma de rizar el rizo con la historia. Además es síntoma de deconstrucción.
Claro que no siempre es así. La forma en que la historia es contada muchas veces omite para mal los detalles cotidianos o que se desprenden de la simple lógica. Por ejemplo que en ciertos periodos de la historia 100 kms era mucha distancia, que normalmente la gente no salía del pueblo donde habían nacido o que las tribus indígenas no viajaban, salvo cuando tenían que migrar o que la alimentación y el clima eran determinantes, etc.; esos sí son detalles importantes para entender la historia.
En fin. Para los interesados hay una excelente animación y relato del combate naval de Iquique
En el FB de Lukas Bravo Nicolás, que hace ilustraciones históricas sale la versión que encuentro más razonable de ese episodio. Cabrera hizo el mejor relato del combate que conozco, se puede leer un extracto aqui
ResponderBorrarhttps://www.facebook.com/IlustracionesdehistoriadeChile/posts/2112231592349256/
"Cuando los oficiales de inteligencia entrevistaron al ingeniero Cabrera, éste dio su nombre y agrego que él estaba en la Esmeralda de "puro cantor". Los oficiales tomaron nota. Cuando días después las autoridades peruanas entregaron la lista con los nombres y especialidad de cada prisionero a los organismos internacionales, se leía: "Agustín Cabrera Gacitúa, músico".
ResponderBorrarAgustín Cabrera Gacitúa escribió un libro y por sus propias palabras en este relato ("¿Hubo un segundo tripulante que acompañó a arturo prat?" en PDF), parece que fue un despelote imprecisable.
ResponderBorrarEl relato de Cabrera es el mejor que he leído, como era el úico que no combatía tuvo tiempo para ver muchos detalles, por algún lado lo tengo completo, lo publicaré el próximo 21 de mayo, acá hay une buen extracto https://gdp1879.blogspot.com/2015/05/relato-de-cabrera.html
ResponderBorrarHace poco conocí la réplica de la Esmeralda en Iquique, extraordinaria donación de Collahuasi a la ciudad.
ResponderBorrarAsí es; no habría forma de reconstruir un relato más fidedigno que el de alguien letrado que no participó directamente en combate, estando en él. A menos que tuviese una cámara de video; y ni eso es tanta garantía. Con todo, la narración de la "historia oficial" no quita ni pone méritos a ambos bandos.
ResponderBorrarEspero que lleguemos al próximo 21 de mayo. O por lo menos, a 10 de julio, para recordar la otra gesta legendaria.
Quizás les interese este canal del Museo Fundación Guerra del Pacífico Domingo De Toro Herrera
ResponderBorrarAgrego dos curiosidades más. La primera es que en la lista de tripulantes de la Esmeralda presentes en el combate, que se muestra en el barco museo de Iquique, ¡aparece un boliviano!. Y la segunda es que el comandante Thomson murió de manera similar a Grau, al recibir un cañonazo del Manco Capac en el puesto de mando del Huascar, en el combate naval frente a Arica previo a la Toma del Morro.
ResponderBorrarDON TOMAS,
ResponderBorrarRecuerdo que un compañero de curso en octavo básico o primero medio, no recuerdo bien, se enroló en la Escuela Naval y en cuarto medio nos visitó y nos dio una conferencia sobre la táctica diseñada por Arturo Prat y sus oficiales para lograr detener la escuadra peruana porque si pasaban al sur habría sido la destrucción de los navíos que se alistaban para transportar las tropas para el desembarque de Pisagua… (El primer desembarque de la historia moderna) Un plan asombrosamente bien concebido y logrado porque en él la Covadonga debía enfrentar a la independencia en los bajos de Punta Gruesa.
El combate de Iquique ciertamente fue una grandísima victoria Chilena puesto que el mayor y moderno buque peruano fue hundido evitando que con su poderío siguiera con el Huascar al Sur.
La Esmeralda a pesar de ser infinitamente más débil que el Huascar se puso entre este navío y la ribera de Iquique donde estaba la guarnición peruana, lo que evitaba que el Huascar disparara porque las balas de largo calibre pasaban entre las maderas de la esmeralda y explotaban en donde estaban los peruanos . Increíble táctica, con lo cual el Huascar se vio obligado a atacar con espolonazos dando la posibilidad de dos abordajes los cuales no fueron un éxito ya que la tripulación estaba casi diezmada. Una grandísima proeza todo esto, de inventiva y arrojo. Sin esto Chile posiblemente le habría sido más difícil vencer la guerra del Pacifico. Recuerdo que nuestro ex compañero, en uniforme de cadete nos explicaba con dibujos esquemáticos en el pizarrón y todos quedamos asombrados del hecho.
Pueden ver las trayectorias de los buques Chilenos y peruanos y se darán cuenta de la genialidad del plan de Prat y sus oficiales.
https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/thumb/3/38/COMBAT_NAVAL_DE_IQUIQUE_-_1879%281%29.svg/300px-COMBAT_NAVAL_DE_IQUIQUE_-_1879%281%29.svg.png
Hola Centurio, Si, especialmente la idea de separar a los dos atacantes fue muy buena. Claro que nunca hay que despreciar el peso de la suerte, Condell tuvo una suerte endiablada porque cualquiera de los dos buques pudo haber encallado, le tocó a Moore. Eso no quita una pizca del heroismo y el tremendo efecto estratégico que tuvo el combate, pero en la guerra la suerte y la moral son casi siempre determinantes.
ResponderBorrarAnónimo, he leído que Thompson murio por atolondrado, arriesgándose de manera innecesaria frente a Arica, fue un gran capitán, pero ese gesto le salió muy caro
ResponderBorrar"Condell tuvo una suerte endiablada porque cualquiera de los dos buques pudo haber encallado, le tocó a Moore."
ResponderBorrarCondell era muy conocedor Chiloé y el sur de Chile , y ahí saben muy bien como las pequeñas olas de la superficie del agua hablan, especialmente de los bajíos rocosos. Ahí está la pillería. Con esta experiencia el sabía perfectamente el calado de su barco y lo que le decía las olas que reventaban frente a él y paso en un lugar que la Independencia de mayor calado no podía hacerlo. No fue suerte, ciertamente.
Esta es una clásica señal de bajío donde la pequeña ola se rompe formando espuma en la superficie del mar.
ResponderBorrarhttps://2.bp.blogspot.com/-1JG7YKVpOLY/U_XPrdcPnrI/AAAAAAAADoE/wCifaDNy1B8/s1600/travesia%2B17%2C18%2C19%2Bagosto%2B2014%2B070.jpg
Soy Centurio.
ResponderBorrarCoincido con que Condell tuvo suerte, pero no creo que haya sido sólo eso. Tampoco me creo eso de que "conocía la costa": imagino que cualquier marino con algo de experiencia es capaz de reconocer un sector de bajos, que fue lo que hizo y supo aprovechar.
ResponderBorrar¿Cuál fue su mérito? Sin duda, haber aprovechado los bajos del sector, pero también haber sido capaz de maniobrar eficazmente para evitar ser alcanzado y dañado por un buque no sólo muy superior, sino también bastante más rápido. Asimismo, la decisión de haberse alejado de Iquique (por ahí he leído que Prat le había ordenado "seguir sus aguas", es decir, mantenerse cerca; de ser cierto, evidente y afortunadamente no lo cumplió).
¿En qué tuvo suerte? En encontrar un sector adecuado para hacer encallar a la Independencia; en que los marinos de ésta fueran poco experimentados y tuviesen mala puntería y poca pericia; en que se lograse engañar a Grau respecto del andar de la Covadonga y, sobre todo, en que Moore haya pecado de soberbio y ansioso, lanzándose a espolonear a la Covadonga sin detenerse a evaluar el entorno.
Supongo que Moore, a esas alturas, estaba bastante desesperado por no haber podido acabar con un enemigo tan inferior (llevaban 5 horas de combate) y eso le terminó por pasar la cuenta. Imagino la situación personal en la que quedó después de eso: la vergüenza por su tremendo error y las catastróficas consecuencias del mismo, lo que buscó compensar (muy probablemente) mostrando arrojo y falleciendo en la toma del morro de Arica.
Como anécdota, en la Independencia iban dos primos hermanos de Condell: el teniente 2º Alfredo de la Haza, y su hermano Arturo, que era aspirante. Es uno de los hechos que hace improbable la acusación de que Condell mandó a disparar contra los náufragos.
Por último, te dejo una serie de videos en YouTube sobre la guerra del Pacífico, que están muy bien hechos y que están narrados de manera muy objetiva por un peruano, lo que lo hace aun más interesante para nosotros los chilenos: https://youtu.be/bSuuC8VRkX8
Saludos,
El triministro.
Triministro, las explicaciones y análisis ex post siempre las he visto con un poquito de sal. Pongámoslo de esta manera: si Condell hubiese tenido mala suerte ni siquiera siendo claravidente hubiese podido evitar encallar, afortunadamente para él, la mala suerte le tocó a Moore. Yo soy muy reacio a tragarme los relatos heroicos que muestran a los héroes como superdotados, confío más en como veía las cosas Encina o Bulnes, antes que las payasadas de Vicuña Mackena, que fue el gran panfletero de la guerra y difundió un momtón de cuentos sobre el asunto.
ResponderBorrarEso no quita un gramo al mérito, heroismo y eficacia de los que pelearon ... y además fueron acompañados por la suerte :D. Un ejempo de mala suerte en el lado chileno (de los muy pocos) fue el combate de Tarapacá, donde las tropas chilenas fueron sorprendidas y batidas por culpa de un par de casualidades. Eso golpeó duramente la reputación del coronel Vergara, uno de los mejores comandantes que tuvo Chile en la guerra, quien el panfletero de Vicuña Mackena le dio duro pra ganarse la simpatía del populacho
De acuerdo, y por eso buscaba separar lo que, en mi irrelevante opinión, fue suerte de lo que fue mérito.
ResponderBorrar¿Viste el documental?
Saludos,
El triministro.