El catastrofismo se vende muy bien porque el miedo permite manipular y movilizar a la gente. Siendo una emoción tan básica -todos somos miedosos- y como el miedo ayuda a la supervivencia, con el paso de los años se ha producido una especie de selección natural en que cada generación es más cobarde y timorata que la anterior.
Hace años escribía acá mismo como las empresas aseguradoras -que son las industrias del miedo por excelencia- estaban entre los negocios más florecientes que existen y es obvio que a ellos no les conviene que las personas sean despreocupadas, audaces y dispuestas a correr riesgos, todo lo contrario, viven de la gente que apuestan contra si mismos, comprando cobertura por eventos muy improbables, algo de eso escribí en El negocio del miedo.
Pero esa clase de miedo que nos lleva a ponernos el parche antes de la herida y pagar primas de seguro por desgracias improbables es también una poderosa herramienta de control de masas. También escribí sobre eso en Otro negocio del miedo. En realidad he escrito varias entradas sobre eso de mantener asustada a la gente con las horrorosas catástrofes ecológicas, climáticas, hambrunas por sobrepoblación, agotamiento de los recursos naturales y cosas tan extremadamente absurdas como el miedo a que se va a agotar el agua dulce, tal vez han escuchado estupideces como eso de "la futura guerras mundiales serán por el agua".
Desde hace muchos años existe esto de mantener a la gente aterrorizada. En los años noventa del siglo pasado ya escribía sobre esa curiosa tendencia a alargar los noticieros que antes solían durar entre 15 y 20 minutos. Primero se alargaron hasta una hora y luego apareció CNN, un canal dedicado las 24 horas del día a emitir "noticias".
Lo que pocos notan es que las noticias son muy pocas, pero se les da cobertura durante mucho más tiempo a cada una, en la tele por ejemplo se les agrega música de fondo y una misma toma -cuidadosamente manicurada para causar la emoción deseada- se puede repetir más de diez veces, una tras otra para provocar la emoción deseada en el consumidor.
Curiosamente casi todos reconocen lo burdo que son estos trucos y la mayoría afirma que no cree ni consume las noticias, pero si vemos Twitter por ejemplo -que es donde el populacho expresa sus opiniones- podemos comprobar que tienen el impacto deseado, ya que el propio Twitter manipula el contenido que entrega de manera de potenciar el espectáculo.
El colmo de la manipulación grosera de los contenidos noticiosos ocurrió con la llamada "pandemia" de Covid 19, un "virus maldito" que iba a hacer colapsar los servicios de salud de todo el mundo, la gente iba a morir como moscas y los médicos se verían obligados a decidir quien viviría y quien no porque los recursos para atender a los enfermos eran escasos.
A estas alturas yo no tengo dudas que fue un monumental embuste, tan exitoso que logró convencer a la mayoría de la gente a nivel mundial. Creo que ha sido el experimento de manipulación masiva de masas más exitoso de la historia, porque incluso ahora que se ha visto que no pasó de ser una de tantas epidemias de influenza fuerte que hemos tenido a lo largo de la historia, todavía tenemos a la mayor parte de la gente creyendo firmemente que estuvimos a punto de una catástrofe mundial y que nos salvamos solo gracias a las milagrosas vacunas.
Yo, sin tener idea de biología, medicina ni nada de eso siempre pensé que era un embuste. Estando en el grupo etario definido como de alto riesgo, no acepté nunca vacunarme ni tomar ninguna de las precauciones recomendadas. Al contrario, no me vacuné y cuando la Pilar y el Tomás Jr. se infectaron -dos veces- no tomé ninguna precaución, solo usé mascarillas cuando era obligado e hice todo lo posible para infectarme, sabiendo que eso iba a fortalecer mis defensas,.
Y así ocurrió, seguramente me infecté varias veces sin desarrollar síntomas, como decían los datos que ocurría a más del 80% de las personas de mi edad. No había ningún motivo lógico para que me asustara, porque tengo muchas más posibilidades de desarrollar un cáncer, enfermedades cardiovasculares, diabetes y mil cosas más, cosas que tampoco me asustan, porque enfermarnos es lo natural y lo único que realmente me puede mantener sano es mi propio sistema.
Nadie habla de la gente que se ha vacunado cuatro o cinco veces que igual desarrolló la enfermedad y se murieron, o peor, muchos se murieron de otras enfermedades al poco tiempo de vacunarse, de eso ni una palabra porque va contra el relato psicosocial.
Las vacunas fueron un experimento masivo que, por pura suerte, no causaron más muertes por efectos indeseados. Aunque yo si valoro el desarrollo de la tecnología de ADN mensajero, que es algo maravilloso y podría curar muchos tipos de cáncer a futuro, pero no me interesó unirme a los cientos de millones que fueron conejillos de indias y enriquecieron a las empresas farmacéuticas, para vacunas que a estas alturas estoy convencido que fueron innecesarias. Basta saber mirar los números y aplicar un poco el razonamiento, no hace falta ser científico para darse cuenta.
En fin, de todas las campañas para manipular a la gente por medio del terror, creo que esta fue la peor y la más exitosa en términos psicosociales. Es algo que se verá con el paso del tiempo, cuando empiecen a aparecer estudios serios sobre los verdaderos peligros del Covid y el impacto de las vacunas. Hasta el día de hoy no ha aparecido ningún estudio decisivo y creo que eso no es casualidad. Hay muchas personas y organizaciones interesadas en mantener el engaño masivo.
Pero bueno, eso ya pasó pese a que mantuvieron la farsa durante tres años y todavía la sostienen con cierto éxito, la gente ya ha ido perdiendo el terror, así es que hay que encontrar algo nuevo.. Y ya estamos viendo algo de eso.
Con la invasión Rusa a Ucrania, que se está convirtiendo en la victoria del siglo de Occidente contra el totalitarismo, aparecieron desde el principio las campañas del terror. Primero que habría una catástrofe en Europa por el corte de suministro del gas ruso, supuestamente todos morirían congelados pero no está ocurriendo nada de eso, al contrario, los países europeos y en particular Alemania han mostrado que se puede vivir sin Rusia, que ahora debe vender su gas y petróleo a precio de huevo a China, India y países por el estilo.
Todos están ganando -menos Rusia- con el corte de los gaseoductos y el embargo europeo de su petróleo. La locura ambientalista por las ERNC se está yendo a pique y por fin Europa está empezando a pensar con la cabeza, dándose cuenta que la energía nuclear es por lejos la forma más limpia y eficiente de obtener energía. Cuando se empiece a invertir de nuevo en investigación para mejorar la tecnología de los reactores, todo el mundo se va a beneficiar, recuperando décadas de desperdicio con los cuentos de hadas ecologistas. Vendrá la electrificación nuclear masiva, con energía barata y abundante.
Mientras los grupos de interés siguen su guerra psicológica para mantenernos asustados, miedosos y pesimistas, los porfiados hechos muestran que todo va por el mejor de los caminos posibles. La guerra contra Rusia traerá enormes beneficios a Occidente. Con toda la tragedia de la pobre gente movilizada en Rusia, y para que hablar de los ucranianos que están peleando por todos nosotros, las guerras también producen un enorme desarrollo tecnológico y después que terminan eso trae su premio.
En los años que siguieron a la Segunda Guerra Mundial, el mundo entero tuvo el mayor ciclo de crecimiento económico y prosperidad que ha conocido el ser humano, nunca antes nos enriquecimos de manera tan acelerada en términos globales. Pocos recuerdan hoy lo pobres que eran los países europeos antes de esa guerra.
Así es que sigan emitiendo noticias catastróficas nomás, yo no me asusté con el Apocalipsis de San Juan y mucho menos me voy a asustar ahora, que anuncien el desastre que quieran, a mi me resbala. Creo que vienen tiempos muy buenos a mivel global.
El miedo ha provocado algo impensable en los jóvenes de nuestro país, fenómeno sicológico que ha sido estudiado ya en el comportamiento animal.
ResponderBorrarLa nuevas parejas no quieren tener hijos, posición que va en gran avance en estos tiempos. Muchos lo interpretan como egoísmo, pero es miedo.
Salió anónimo mi comentario anterior.
BorrarHola Angélica ¡que gusto verte por acá! Es verdad lo que dices, los jóvenes se han ido poniendo cada vez más miedosos, lo que los lleva a arrancar de toda clase de responsabilidades. Como la propaganda los tiene convencidos que este mundo es un infierno y que el apocalipsis está cerca, lo que menos quieren es iniciar una familia.
BorrarAdemás toda la sociedad presiona en ese sentido, por ejemplo ser madre soltera es vbisto como una irresponsabilidad y una culpa, antes era pecaminoso y ahora dicen que es "irresponsable" de cualquier manera siguen moralizando.
Yo mismo soy un ejemplo de ese miedo a tomar responsabilidades, me costó mucho llegar a formar una familia, una idea que para mi era abominable. Mi hermana en cambio, 10 años mayor, se casó con mi cuñado cuando ambos tenían ¡16 años! simplemente en 1960 se arrancaron de la casa y en 2022 -62 años después- siguen casados y tuvieron 4 hijos.
Hoy algo así sería rarísimo, sin embargo en los 60 era cosa común y corriente.
Tal como dices, hoy es miedo lo que motiva esos cambios
En tiempos antiguos la cultura del miedo giraba en torno a complacer a los dioses mediante sacrificios, el miedo al infierno, el hombre como eterno pecador, etc. Ahora el miedo a que por la sobrepoblación nos quedaremos sin alimentos, sin agua, sin energía, en definitiva sin recursos. Ya no somos pecadores, sino que culpables de todas las desgracias anteriores.
ResponderBorrarParece que existiera una necesidad humana de sentir siempre un temor catastrofista, junto con un sentimiento de culpa por las eventuales catástrofes.
Claudio.
Así es Claudio, el catastrofismo responde a una especie de necesidad psicológica de la gente: vivir con m,iedo al futuro se ha convertido en lo natural y "racional".
BorrarMucho más racional era cuando le tenían miedo a los dioses -es decir al azar- que nos acecha siempre por más que tratemos de prevenirnos.
Ahora que lo dices, creo que este cambio de visión responde también a la necesidad de racionalizarlo todo buscando un culpable para cada cosa que pasa ¡y qué mejor culpable que "los otros"!
Otra cosa importante a mencionar es que la gente se está hartando del progresismo y sus delirios finalmente empiezan a perder un apoyo que nunca debieron haber tenido en primer lugar.
ResponderBorrarY ya que andamos con predicciones, apuesto a que todo lo terrible pasará en esta década mientras que en la próxima vendrán las cosas realmente buenas.
Si Frx, todas estas cosas son olas, después de un tiempo la gente se empieza a apestar, se produce un efecto cascada y la opinión pública se va para el otro lado, siempre pasa así
BorrarHola Tomás, como siempre muy buen artículo. Me bloquearon el face, por eso comento por acá. Saludos desde un caluroso Iquique. Atte Guillermo
ResponderBorrarHombre! Te cayó encima el largo brazo de la censura, en que mundo vivimos por la flauta... Saluti!
BorrarMirando, es una especie de adiccion, Wild Proyect, entrevista a un geologo sobre el cambio climatico https://www.youtube.com/watch?v=d3HreYyM6Os
ResponderBorrarSi, a veces saca grandes entrevistados ese de wild project, algunos de sus videos son buenísimos!
BorrarPor mi parte Quinta dósis y contando.
ResponderBorrarTambién mi mujer y mi hija.
Seremos muy asustadizos?
Jajaja.
He descubierto que esto es como la política o religión . Nadie convence a nadie. Así que para que insistir.
Marcelo Jorquera. Salió anónimo por esos misterios insondables de la computación.
BorrarAh y solo para ser precisos, el "mensajero" es el ARN.
BorrarNo el ADN. Uno tiene cadena simple, el otro doble y cumplen diferentes funciones. Relacionadas eso si.
Marcelo, yo diría que eres muy niñita... pero igual estabas obligado a vacunarte por los dos lados, solo vagos y cesantes podemos ir contra el sistema.
BorrarYo no tengo nada contra los que se vacunan, pero me pucren los que pretenden obligar a vacunarse, o hablar mal de los que no nos vacunamos, esos me apestan.
Como de costumbre el alzeimer me jugó otra vez una mala pasada, ARN, no ADN. En todo caso teniendo casi ninguna idea de los mecanismos dentro de las células, supongo que si pueden modificar esas proteinas y reemplazar pedazos usando virus y cosas así, es un adelanto gigantesco, que puede tener efectos terapeuticos muy importantes.
Los hijos te dan respeto, fama, poder, mando, tropa... mientras puedes ponerlos a trabajar a los 8 años, casar a la más bonita con el señor de la comarca, que te mantengan de viejo, etc. .. etc..
ResponderBorrarDespués viene un sistema de bienestar donde son carísimos, no puedes explotarlos, no puedes venderlos como esclavos, te dejan tirado en un geriátrico estatal cuando eres viejo, no te piden consejos nunca, te ponen en la pieza del fondo y alquilan el resto de la casa, etc.. etc.. Entonces preventivamente la gente elige tener menos hijos.
Pero se supone que aparece papá Estado y te mantiene. No importa que tu hijo no te llame ni para Navidad: el cheque llega siempre y alcanza, aunque cuando te mueras tu cadáver se seque meses frente al televisor antes que te descubran.
Pero eso ocurre en Escandinavia, no acá. Acá tampoco llega el cheque, o llega tarde o es muy poco. Uls
Si Uslchmidt, eso es parte de la destrucción de la familia que ha sido patrocinada por algunas ideologías. Han convertido el hecho de formar familia en algo socialmente pecaminoso, si la gente tiene apoyo y lazos familiares no necesitan de la burocracia estatal. Por eso han llenado de dificultades y regulaciones absurdas todas las estructuras familiares y eso se ve muy claro en algunos países escandinavos progresistas.
BorrarEn eso les llevamos muchísima ventaja, no hay nada que corrompa más a la gente que el estado de "bienestar" que es en realidad un estado de beneficencia pública. Bienestar es una mala traducción de "welfare"
En lo personal detesté todo el tema de las vacunas pero al final me terminé poniendo las que exigían,destaco todo el zeitgeist psicótico y facista que tuve que vivir entre abril del 2020 y mediados del 2021,no deje de trabajar en mi local(menos mal estaba considerado de primera necesidad mi giro),tener que andar mostrando el salvoconducto cada 2 cuadras a los militares o a los prepotentes pendejos fiscalizadores contratados por la seremía de salud(con cuea tenían 25 años) y en otras ocasiones aguantando sus fiscalizaciones sorpresa,donde te veían si tenías instalada todo el aparataje covid(los inútiles termómetros,el dispensador de alcohol gel y las señaleticas facistas de mascarilla distanciamiento y cacha de la espada jajajajajaj).Por esas cosas de la vida el año pasado tuve que ir en representación de un familiar a buscar un cheque de un finiquito a la inspectoría del trabajo y me topé con todos estos pendejos que fueron fiscalizadores(pseudo pacos a contrata de salud) y chitas que me dió risa verlos reclamar,lloroquear y chillar que los habían cancelado en masa con el levantamiento de las medidas sanitarias,los descartaron cual papel cagado a los que se creían intocables,por eso y muchas cosas más yo me quedo contento y tranquilo vendiendo mis clavos tornillos y cachureos,saludos tío
ResponderBorrarSam, a mi me pudrio toda esta manipulación grosera de masas y los métodos fascistas con que se aplicaron las "medidas sanitarias" que se implementaron para reforzarlas. Para que hablar todos esos piojos resucitados con credencial de "fiscalizadores", fue todo algo asqueroso, de principio a fin.
ResponderBorrarSe viene un período de grandes oportunidades para los clavos, tornillos y cachureos, en una de esas tendré dos amigos millonarios en un futuro no muy lejano: don negro y don Sam!