Yo suelo recordarle a la Pilar lo afortunada que ha sido al encontrar un tipo como yo: amable, cariñoso, romántico, caballeroso, bondadoso y sobre todo generoso, entre muchas otras gracias que me caracterízan. ¡soy un paquete de virtudes! A veces se le olvida la suerte que ha tenido de encontrar a alguien tan perfecto, pero en mi condición de tal, yo me encargo de recordárselo de cuando en cuando.
Pero no solo soy El marido perfecto, además de eso soy el padre perfecto y el yerno perfecto. Sobre todo esto último ¡soy el yerno de oro! Hace unos veinte años atrás, cuando yo vivía solo, usaba una escalera de mano por donde todos tenían que subir para entrar a la casa, después que la Pilar me compró la casa seguimos usando la misma escalera. Me encantaba pensar que si venía alguno de mis enemigos le podía sacar la escala y arrojarles aceite hirviendo.
Entonces mi querida suegra enfermó de cáncer y yo -siempre considerado y previsor- pensé que si se moría, sacarla de allí sería un show de aquellos. Así fue como construí la actual escalera, que con el apuro quedó pésima y todavía no puedo hacer una nueva por el costo enorme. Pero bueno, esa fue la primera construcción que hice pensando en mi querida suegra.
Pasaron los años y cada vez que llovía mi suegra tenía que dormir con el paraguas abierto, porque el agua, aunque escasa, pasaba como si nada a través del techo lleno de escombros, que además era como de cartón. Cuando empezaron a dar el Ingreso Familiar de Emergencia, hicimos un joint venture con la Pilar y le pusimos techo a la veterana, a un costo astronómico. Y aunque no quedó perfecto al menos está bastante bien y cuando tenga más plata terminaré de arreglarlo.
Como a nadie le falta Dios, el año pasado también recibí plata de otros lados, aparté algo para ahorrar unos dólares y el resto lo dediqué a hacerle una cocina nueva a la venerable señora, porque la que teníamos era realmente una porquería. Con poco presupuesto le quedó una cocinita nueva y bastante decente.
Pero todavía tenía una espina clavada, porque para ir al baño tenía que bajar una peligrosa escalera, doblemente peligrosa en la noche. La cosa es que se cayó más de tres veces, fracturándose los huesos del pie y otra vez los de la muñeca, como conté en la entrada Qué mala pata del 2010. Con tanta rotura le han puesto fierros por todas partes así es que si alguna vez se nos pierde, la podremos encontrar fácilmente con un imán de neomidio.
A sus 87 años la señora es hiperkinética y además de prepararnos el almuerzo anda todo el día carpintereando, jardineando, planchando y haciendo mil cosas. Pense que era cuestión de tiempo que una noche de estas salga al baño, para el 1 o para el 2 y se caiga por la escalera otra vez. Si se llega a romper la cadera ahí si que estaríamos fritos.
Cuento corto: con muy poco presupuesto y aprovechando que el Alfredo anda desocupado, nos pusimos a construirle un baño en los mismos departamentos donde ella duerme, al lado de la antigua cocina. El lugar estaba abarrotado de cachureos, así es que lo primero fue vaciarlo, poniendo todas las cosas en el patio. La verdad es que cuando construí esos departamentos dejé uno para cocina y baño, aunque este último nunca llegué a hacerlo. Igual tenía el desague y la distribución de todo listo.
Pero había una fea estructura de ladrillo y cemento que tenía que botar, en la bodega tenía guardados hace años una taza antigua y fea, pero sin uso, que ya ni me acuerdo para que la compré y un vanitorio chino que alguna vez compró la Pilar en una de sus frecuentes fiebres de consumismo. En fin, con un puro martillo me puse a derribar el cemento. Menos mal que estoy en buen estado físico, el maldito asunto me tomó toda la mañana
Después vino la instalación de las cañerías de PVC, eso "lo hicimos" con el Alfredo el día de anteayer.
Todo muy bien hasta que de madrugada notamos unos ruidos raros, un tapón de PVC se había reventado y el lugar estaba convertido en una mini piscina olímpica. A cortar el agua hasta que llegara el Alfredo de nuevo.
Saludos, Don Tomas.
ResponderBorrarA uno lo deja de buen animo construir cosas por uno mismo.
Recuerdo no se donde que Vercingetorix, el rey electo de los galo se jactaba de haber construido su casa por sus propias manos (a diferencia de los demás nobles galos que rechazaban el trabajo manual).
Si sigue así, "cuando sea mayor" podrá jactarse usted también de haber construido su casa "con sus propias manos".
Le doy retroalimentación a estos artículos sobre la normalona vida provincial en Arica, que para mí son como unas crónicas del presente antes de las entradas de política que son las que más prenden pero solo porque son malas noticias para chilito.
Saludos Anónimo, algún día voy a decir que constrí la casa "con mis propias manos" ¡claro que será una mentira gigantesca jajaja!
ResponderBorrarLa temática del blog es variada porque escribo lo primero que se me ocurre. Claro que en los últimos dos o tres años he caído de manera más o menos reiterativa en la política, que es un tema que me interesa poco o nada, pero desde que entré al Partido Republicano le he estado dando mucho más con eso. En fin, trataré de poner menos de política y más de "la vida de un vago" jaja