La navidad apesta

Ah menos mal que ya pasó el trago amargo, que día más desagradable con toda esa charada de los regalos y los irritantes compromisos familiares, sociales y religiosos, todo esto me pone de un humor de perros. Cuando sea presidente del mundo mi primer decreto consistirá en la abolición de las celebraciones navideñas. La navidad es un festival de la estupidez, detestable. Para los que no somos religiosos ni soportamos los convencionalismos sociales este es el peor día del año.

En fin, se acerca el año nuevo que es una fecha mucho más decente y para que hablar de mi cumpleaños, también el 31 de diciembre está de cumpleaños el mouse pero seguramente lo celebraremos el 6 como solemos hacer con sendas botellas de buen trago en la playa, igual que en los buenos viejos tiempos, no se cumplen 55 todos los días.

Leo que el senado de USA finalmente aprobó la reforma del sistema de salud pública ampliando la cobertura con plata de los impuestos, una idea asistencialista muy al estilo Bachelet. Creo que no es muy difícil imaginar que es lo que pasará: los médicos y abogados multiplicarán su riqueza, las prestaciones de salud seguirán deficitarias como siempre -excepto para unos cuantos suertudos- y USA, en medio de una costosa guerra, se verá en problemas mucho mayores a mediano plazo. Ni hablar que pasará si se desploma la economía china, cosa que yo veo bien probable.

Cuando se hacen todas estas reformas más o menos populistas, durante un par de años dan la ilusión que fueron un gran avance, luego se empiezan a ver los resultados desastrosos, pero los que las impulsaron ya están muertos o en un confortable retiro, como ocurre con Bill Clinton, el impulsor de Freddie Mac y Fanny Mae, que ya pasaron a tener subsidio directo del gobierno por todas sus pérdidas ¿Quien responde? en USA también existe un Mr. Moya que paga por los mega errores de los políticos.

En Chile hemos visto eso durante muchos años. Cuando Aylwin impulsó y Frei RT implementó la Reforma Procesal Penal decían que eso iba a solucionar los problemas de la administración de justicia en el país y todos los tontos creyeron, incluso la estuvieron apoyando los primeros años, mientras no se hacía aparente el desastre que habían causado. Cuando Eduardo Frei RT pidió un punto del IVA para financiar la jornada escolar completa ofreciendo que con eso se terminarían los problemas de la educación pública, o cuando Lagos hizo sus revolucionarias reformas en el transporte: Ferrocarriles del Estado y el Transantiago pasó lo mismo ¿quien responde ahora?

Lo notable es que todas esas reformas en Chile se aprobaron por unanimidad o con gran mayoría de los votos. Los mismos políticos de derecha que votaron con entusiasmo por la reforma penal, por la jornada escolar completa, por FFCC o el transantiago, son los mismos que ahora reclaman indignados contra los resultados de estas reformas. Si mal no recuerdo el propio Sebastian Piñera votó y apoyó muchos de esos carísimos fracasos ¿quien responde ahora? Nadie, ni siquiera el señor Ajenjo, ¡que va aresponder, si para eso tenemos al señor Moya que paga todo!.

Acuérdense de mi cuando empiecen los problemas, lo malo no es la falta de líderes, eso es solo consecuencia de un electorado embrutecido y con cero capacidad de pensamiento crítico, lo mismo aquí en Chile que en USA y en todo el mundo, cuando los que votan son tontos los elegidos son sus representantes. Y nadie se hace cargo de sus errores, si le preguntan a un tonto que votó por Obama convencido que iba a retirar todas las tropas del Medio Oriente, ese gil le echará la culpa a todo el mundo, menos a su propia miopía, ni se le ocurrirá recordar que el mismo votó por el cambio. Hay un dicho gringo muy certero que ilustra esta situación fool me once, shame on you. Fool me twice, shame on me.

En Chile pasa más o menos igual, los mismos brutos que en pocos días más votarán por Frei para que no salga la derecha, después se estarán quejando -si sale Frei- de que los engañaron. Nada de eso, nadie los ha engañado, son simplemente unos estúpidos y todo lo malo que pasa es consecuencia de su falta de capacidad para usar el cerebro.

Una opinión pública de giles es el verdadero problema, creo que Hernando lo describió el otro día: "con Lagos le perdimos el miedo a un presidente socialista, con Bachelet perdimos el miedo a una presidenta mujer, si sale Piñera habremos perdido el miedo a un presidente de derecha" ¿que viene después? ¿le perderemos el miedo a que cualquier simio o aparecido como Farkas o Enriquez Ominami llegue a presidente? Capaz.