Malls en Arica y Tacna

Hace algo así como un año atrás -no recuerdo bien- cuando comenzó la construcción del nuevo casino en Arica, el Mall y el Strip Center, un amigo de Tacna contactado con los medios de comunicación y sociales de esa ciudad me comentaba que mucha gente andaba vuelta loca pensando que con eso se terminaría el turismo masivo de compras que recibe hoy Tacna desde Chile y que constituye un porcentaje importante del movimiento de la ciudad, que se estiman en unos 24 millones de dólares mensuales. Aunque este no es un cálculo muy sencillo ni exacto, solo en el verano Tacna recibió más de 640.000 visitantes chilenos.

La cosa es que los proyectos de inversión en Arica preocuparon mucho en Tacna, especialmente en la Cámara de Comercio que -según su manera de ver las cosas- pensaban que la gente en Arica preferiría ir al mall antes que viajar a Tacna. Es un diagnóstico equivocado y provinciano, que no solo se da en Tacna sino también en Arica, donde los ingenuos creen que la llegad de los malls "traerá el progreso" y vendrán miles de turistas a la ciudad a visitarlos.

No saben que de donde vienen los turistas existen malls mucho más grandes, cualquiera que venga de Santiago, donde está el Costanera Center, no le va a encontrar maldita gracia a nuestro mall, para que hablar quienes vengan de Buenos Aires, Estados Unidos o Europa. Tampoco entienden que los chilenos viajamos a Tacna por una razón muy simple: la gran asimetría de precios, pues allá casi todo suele ser mucho más barato y los servicios, así como las mercaderías han ampliado su oferta desde aceptable a muy buena, ningún mall -que se caracterizan por los precios altos- podrá competir con eso, el ariqueño compra principalmente en las ferias y difícilmente dejará esa costumbre para ir a comprar a los malls que son mucho más caros.

El resultado de esta mini histeria por los malls fue que un par de empresas chilenas pidió que les hicieran la excepción en Tacna a la ley que prohíbe a chilenos comprar propiedades a menos de 50 Km de la frontera, esto hizo saltar el chauvinismo tacneño, siempre presente, y la ciudad se dividió en dos bandos irreconciliables a favor y en contra de esta excepción. Chile también tuvo una prohibición legal parecida en Arica, que fue derogada en los años noventa con la Ley Arica 1, esto no trajo ningún aumento explosivo de inversiones ni menos la avalancha de bolivianos comprando propiedades como esperábamos, pese a que cualquier extranjero puede comprar una propiedad en Arica sin ningún problema.

Cuando Ollanta era presidente y declaró que le gustaría ser dueño de un pedacito del morro, yo salté de inmediato ofreciendo venderle mi casa, por 200 mil dólares estaría feliz de ayudarle a cumplir su sueño. Creo que la tremenda pelea que se ha armado en Tacna alrededor de esta autorización excepcional (que finalmente no se dio) es ridícula y no conducirá a nada, Tacna ganaría poco con un par de malls, a mi modo de ver, además solo sirve para que los chauvinistas se hagan campaña ractivando viejos rencores antichilenos, que a estas alturas no deberían sorprender a nadie.

Y ya que estamos en eso, yo pienso que las inversiones en el nuevo casino, el nuevo mall y el nuevo strip center son una locura. Partamos por el casino, el actual casino municipal lleva añoa medio morir saltando, pasa vacío excepto por las viejitas y los pocos ludópatas de siempre, es un pésimo negocio ¿quien va a ir a un casino de cinco pisos repleto de máquinas y salas de juego?. Sigamos con el mall: de los comerciantes que conozco que podrían arrendar locales, todos me han dicho que ni muertos lo harían, apenas venden en 21 de Mayo, donde los locales son propios y tendrían que estar locos para pagar altos arriendos por un local en un mall. Sobre el Strip Center lo mismo, en Arica el supermercado Unimarc y Construmart son verdaderos cementerios, no va nadie ¿más de los mismo?.

Comentábamos con mi amigo el arquituerto que acá a Chile las cosas llegan con 30 años de retraso, por lo menos. Los malls con dos tiendas-ancla, unidas por un largo pasillo de dos o tres pisos, más varios cines y patio de comidas ya no son el boom que eran cuando viajé a Miami en 1983 y todavía eran novedosos. Hoy casi todas las ciudades de Chile tienen uno ¡hasta Castro! Arica es una de las pocas excepciones y mi olfato me dice que serán un fracaso.

¿Por que entonces estas enormes inversiones? ¿Qué las justifica? Yo tengo dos teorías, la más probable es que se hayan hecho aprovechando los grandes subsidios de las Leyes Arica y también para presentar pérdidas operacionales de modo de pagar menos impuestos, especialmente en las empresas que pertenecen a cadenas grandes. Todos sabemos que -por ejemplo- hay hoteles que operan con muy baja ocupación y probablemente a pérdida, pero como pertenecen a cadenas con otros hoteles muy rentables, en cierto modo permiten equilibrar la carga tributaria, en fin, es una posibilidad.

La otra teoría es que los que hicieron estas inversiones estén dateados acerca de un boom de inversiones que podría venir en la región -obviamente minero- y que existe la posibilidad que nos llenemos de rotos con camioneta como en Iquique, es una idea medio fantasiosa, pero todo puede ser en la dimensión desconocida.