Flor de caña

Anoche como a las 22 hrs me encontraba en la casa rodante un poco deprimido al enfrentar otra aburrida noche de sábado sin un amigo con quien tomarme un copete. Como si me hubiesen leído el pensamiento me llega un llamado del Oscar Ahumada avisándome que estaba en Arica y me esperaba en la casa de su hermana.

La cosa es que nos juntamos y tenía un "Flor de Caña" estaba preparando una pichanga (carne, papas fritas y todo eso) y había un CD de Silvio Rodriguez sonando a todo volumen. Resumiendo, nos pusimos a conversar, y a conversar y a conversar. Tal como dice la canción y nos dieron las tres y las cuatro y las cinco. Amaneció y seguíamos bla bla bla. Pasadas las nueve de la mañana llegué a la casa sin rastros de borrachera (quien sabe con que cochinas andaban!!) y ahora estoy durmiendo de manera intermitente para recuperar el sueño.

Ahora estoy escribiendo en el intermedio que hice para almorzar (16:44) solo para contarles que ha sido de mi vida. En fin, mejor los dejo con una de Silvio Rodrigue que es muy buena:

Me quieren...(Silvio Rodríguez)
I
Me quieren enterrar los asesinos,
las comidas con sal y los espejos.
Ya me han querido sepultar los viejos
y algún que otro brioso nuevo pino.
Me quieren enterrar donde adivino
-siempre quisieron ocultarme lejos-.
Objeto de los fúnebres cortejos,
ayer u hoy, parece mi destino.

Ahórrense cumplidos y sudores,
pronósticos de ingenio o decadencia;
llevo mil años con enterradores
y sé de sus señuelos y ocurrencias.
Quien necesite hundirme entre las flores
sólo precisa un poco de paciencia.

II
Me quieren enterrar los homenajes
y ciertas melindrosas señoritas.
¿Por qué será que alguien necesita
ponerme velas, mandarme de viaje?
¿No se dan cuenta de que tal pasaje
le va mejor a la esperanza rota,
al sonido pulsado que se agota,
al arlequín consumidor del herraje?

Tiñosas, lagartijas, esperpentos,
aburridos batracios y loqueros.
aún corre la sangre en mi instrumento,
solavaya, aves de malagüero.
Mundo feroz, lo digo en juramento:
enterrarme le va a roncar el cuero.

Ya me voy a dormir de nuevo, mañana será otro día