Cinco días agitados

Siempre había querido tomarme una foto en la estación Cachiyuyo, bueno, paso a contarles un apretado resumen de mis aventuras de los últimos cinco días.

Partí el viernes 22 en un destartalado bus de Arica a Iquique, llegando como a las 8 PM, luego me fuí a juntar con una buena amiga y un mal amigo, me tomé un largo vaso de Chivas en el departamento y como la cosa no podía quedar allí salimos a tomarnos otros más que, en mi caso, fueron más que suficientes para dejarme maharishi. Luego, de vuelta en mi hotel Doña Genoveva.que es como mi segunda casa en Iquique ($ 12.500 hab single).

Al otro día mi viejo amigo y compañero Oscar Ahumada me llama para invitarme a un picante de pulpo, que estuvo de rechupete, como más tarde tenía un largo viaje por delante esta vez tomé solamente bebida. Y nos fuimos con el mal amigo a las 7 PM rumbo al sur, haciendo una primera parada en la aduana de El Loa, luego de un rápido chequeo seguimos manejando y manejando, paramos en un rutacentro de Antofagasta a comer un completo (nótese la cara de descomposición, y eso que recién estábamos empezando el viaje), después nos metimos por el desierto en medio de la más oscura de las noches.

Pasado Aguas Verdes, en medio de la nada paramos un rato a mirar el impresionante espectáculo de las estrellas en el desierto, lástima que en la foto se ve todo negro. Y así seguimos por una serie de bajadas interminables hasta llegar finalmente a Chañaral justo cuando empezaba a amanecer. Llevábamos unas 12 horas manejando.

Después de llenar con gasolina seguimos hasta Copiapó donde rellenamos nuevamente, ya estaba de día. Y seguimos y seguimos hasta ver el mar en Caleta Hornos donde me encontré con el pobre diablo de Gonzalez, vistiendo harapos y haciendo auto-stop para que alguien lo llevara. Me confesó que era mentira lo de su viaje alrededor del mundo y que andaba pirquineando por el norte chico. Me dió tanta pena que en un ataque de generosidad lo invité a almorzar, pobre hombre, se quería comer hasta los tenedores del Brisa Marina, yo sabía que iba a terminar mal: la maldición de Bradanovic jamás falla.

Luego de almorzar seguimos hasta La Serena y Coquimbo por donde pasamos sin detenernos, hasta Los Vilos. Allí nuevamente rellenamos el estanque y seguimos por el Valle Central hasta llegar finalmente a Santiasco.

Llegué a uno de los departamento de Dehesa House, (muy buenos, lo recomiendo) y llamé al chico Medalla que justamente estaba preparando un salmón para la cena de navidad, ¡invítame! le dije sin demora y después de muchas vueltas llegué a su casa donde comimos y me quedé sacando fotos de la repartija de regalos.

Eran como las 4 AM y tenía que atravesar todo Santiasco, desde el paradero 9 de Pajaritos a Apoquindo con El Bosque, así es que tomé una micro llena de raperos. A la altura de General Velasquez ocurrió un lanzazo pero como yo iba piola no me pasó nada. La micro me dejó en el Barrio Suecia y de allí al departamento era pan comido.

Al otro día dormí lo poco que pude y me fuí al aeropuerto. Pero perdí el vuelo. Menos mal que tuve la precaución de comprar un pasaje abierto así es que lo cambié para el día siguiente a las 7 AM, me fuí para el Hotel Libertadores (ya había devuelto el departamento (buen hotel $ 29.000 hab single), estuve un rato en un cyber donde recibí muy buenas noticias (Santa Claus se acordó de mi parece), me compré un sandwich en el Nuria y buenas noches los pastores. Al día siguiente me tuve que levantar a las 5 AM porque el transfer pasaba a recogerme a las 5:30. Bueno, después de largas y aburridas esperas terminé de vuelta en mi tierra prometida

El viaje en estadísticas: 300 Km Arica-Iquique en bus (4 horas y media), 1.600 km de Iquique a Antofagasta en auto (18 horas sin parar a dormir), 3 whiskeys largos en Iquique, media botella de vino y tres cubas libres donde Medalla, Fanta donde el Oscar Ahumada. 1.600 km (aprox) viaje de vuelta en avión (3 horas y media), Comida: mucha, sueño: muy poco. Atravesé buena prte de Santiago en micro a las 4 AM, no andaba en micro en Santiago desde mi niñez.

Saqué más de 100 fotos en dos grupos que se pueden ver aquí, con breves comentarios. Ahora tengo que recuperar el sueño de esos agitados 5 días en que no dormí ni una sola noche como la gente. O sea, me voy a dormir, buenas noches..