Voto por Pepe Antártico

Ahora me cae simpático Marco Enriquez Ominami, el candidato a presidente que crece como espuma en las encuestas para la elección que tendremos en diciembre. En realidad siempre lo ví como un pobre diablo que estaba en la política por ser hijo de un político poderoso. Medio tonto, limitado para hablar, el típico hijito de papá. Ahora por eso mismo lo encuentro simpático, es el efecto reality.

Alguna vez escribí sobre esto, es una tendencia que viene desde hace tiempo y los reality show son la culminación de algo que se venía incubando desde los sesentas: el pobre diablo convertido en héroe popular por un golpe de suerte, a todos nos cae simpatico alguien así, nos identificamos con él ¡podríamos ser nosotros mismos!. Con su peinado de Pepe Antártico y su look de el Puma José Luis Rodriguez, Marco Enriquez es de los nuestros.

Ese es el secreto de lo que en Chile llamamos farándula, los opinologos, los perdedores al poder. En los reality show es más o menos lo mismo: gente sin ninguna gracia, feos, tontos, ignorantes, en fin, gente como uno. Eso explica también la simpatía instintiva que sentimos por los Simpson, especialmente por Homero que es el pobre diablo pero con suerte, siempre termina cada capítulo con una pequeña victoria, tal como nos gustaría que pasara con nosotros.

Hasta los años cincuentas vivimos deslumbrados por los ídolos: Humprey Bogart, Clark Gable, tal vez el último de esos fue James Bond. Pero en los sesenta empezaron a aparecer los feos, chicos, cobardes, como el Super Agente 86, o después el Chapulín Colorado, esto de los antihéroes no es casualidad, es un proceso que ha ido tomando fuerza con el tiempo. Al principio eran novedad y rompían esquemas, ahora son la norma.

Estamos en la época de los antihéroes, nuestra presidenta, que jamás ha dado la menor muestra de inteligencia o carácter, inexpresiva como Bunster Keaton tiene altísimos niveles de aprobación. Históricos, porque a la gente le encanta que "alguien como uno" esté a cargo. A futuro creo que mientras más tonto alguien será más popular, ¡tal vez por eso en este Templo del Ocio están subiendo las visitas!. Si agregamos que la gente vota más que nada por resentimiento, en contra de algo, la política se convierte en el concurso de simpatía, superficial y con los resultados que tenemos hasta hoy.

Yo votaría por Marco Enriquez Ominami solo para que no salga un autista como Frei o un presumido como Piñera, en el canal de cable Via X, Marco Enriquez se mandó a hacer un reality show que sigue su candidatura y lo muestra preparándose el desayuno y cosas así, una movida muy adecuada, es el candidato del reality, el Ballero o el Edmundo Varas de la política chilena. Por eso pues, por eso estamos como estamos.