El tsunami en Arica

Arica estuvo de moda todo el día de ayer. Con el gran terremoto y tsunami de Japón por primera vez en la historia registrada tuvimos la posibilidad de recibir un tsunami distante. Por nuestra posición estábamos justo frente a frente para recibir los trenes de olas que atravesaron el Océano Pacífico a más de 700 km/h. La verdad es que nadie sabía lo que iba a pasar porque era una situación inédita, menos mal que habían más de 10 horas para prepararse.

A diferencia del terremoto de febrero del año pasado, esta vez el gobierno actuó sin vacilaciones y decretó evacuar las zonas de inundación a lo largo de toda la costa de Chile, la evacuación debería estar completa a las 21 hrs porque se calculaba la llegada de las olas para las 23:30 hrs, así de manera ordenada, alrededor de las 16 hrs la gente empezó a desocupar todas las zonas costeras bajas para ir a ubicarse en los cerros sobre los 20 metros de altura. Se movió más de medio millón de personas en todo el país.

Los canales de televisión estuvieron transmitiendo todo el día de manera continua con el mismo tema, comunicados con información para evacuar y sobre todo geografos y sismólogos dando información detallada y en tiempo real de como se iban desarrollando las cosas. Destacado el histronico geógrafo ariqueño Marcelo Lagos, uno de los pocos expertos en tsunamis e interacción con asentamientos humanos que tenemos en Chile.

La cosa es que a las 21 hrs el litoral de Arica estaba completamente desierto, se calcula que 80.000 personas se movieron a los cerros, varios cientos subieron al Morro a mirar por si venía una inundación grande, las olas llegaron con casi tres horas de retraso, cerca de las 2:30 AM. Estuvieron golpeando durante toda la noche con una altura de más o menos un metro, así es que no se veía nada especial y los que miraban desde el morro quedaron bien decepcionados.

Durante toda la noche estuvieron llegando los trenes de olas que crecieron hasta un metro y medio de altura (tres de punta a punta) pero justo a esas horas los canales de televisión cerraron sus transmisiones y nos quedamos sin noticias sobre que estaba pasando. Menos mal que por CSP uno de los regulares (mi amigo Osvaldo Rayo) colocó el link al sitio con información en tiempo real sobre los mareografos, que iban mostrando a cada momento como iba cambiando la altura de las olas.

Las olas siguieron llegando durante toda la noche y a la mañana siguiente se fueron haciendo más grandes en trenes de 4 metros de punta a punta, desde mi casa se veían las perturbaciones de Playa Las Machas con frentes de ola que avanzaban claramente y rompían en la playa, el mar se recogía muchos metros y luego rompía con fuerza, a cualquiera que lo pillara una ola de esas nadando o en un bote no estaría vivo para contarlo.

En el sector del puerto se produjeron unos peligrosos remolinos porque los frentes de ola se dividían para pasar en medio de los espigones. En Arica probablemente llegaron las olas más altas pero como la bahía es muy abierta y de poco fondo, perdieron muchísima fuerza al acercarse a la playa, en otras caletas más cerradas en cambio se formaron vórtices y crecieron hasta 8 metros pese a haber llegado más debilitadas, es increíble como la topografía cambia la energía del agua, este tsunami debe haber sido un festín para los geografos y lo mejor es que no dejó víctimas.

Yo creo que de todo esto se pueden sacar varias lecciones para cuando venga El Grande, lo primero que es indispensable que las autoridades actúen rápido, sin vacilaciones y sin preocuparse por las críticas. Estamos repletos de gente siempre dispuesta a criticar lo que sea, hay que considerarlos ruido de fondo nomás.

Hay que aumentar la credibilidad de Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada, ellos son los especialisttas, tienen los instrumentos y manejan los sistemas internacionales. Desgraciadamente en el terremoto del año pasado un capitán cometio el error de retirar la alerta y las autoridades de esa época, que fueron cobardes e incapaces en extremo, se aprovecharon de cargar todas las culpas al servicio. No solo fueron cobardes sino que hicieron un daño enorme al país: para tratar de liberarse de la verguenza embarraron a toda la institución, que es fundamental en estos casos. Tiene que reestablecerse el respeto y la credibilidad del SHOA.

La institución que suceda a la Oficina Nncional de Emergencia tiene un trabajo enorme por delante, la ONEMI siempre fue un servicio de escritorio, de burocratas en camioneta del año que jamás se embarraron los pies, el nuevo servicio tiene que organizar a la comunidad usando facebook, tweeter y todo lo que se requiera para organizar a las juntas de vecinos, defensa civil (que esta vez ni se vieron) y bomberos en un cuerpo eficiente para enfrentar emergencias.

Para la evacuación toda la gente salió de manera ordenada a los cerros, Carabineros quedó cuidando de manera muy eficiente las casas vacías, todo bien hasta allí. Pero la gente en el cerro quedó sola sin ninguna organización y sin nada que hacer. Muchos se aburrieron de estar sentados por horas en el suelo y volvieron por su cuenta a sus casas. Allí debería haber estado la municipalidad y la ONEMI, son campeones para tirarse flores (recuerdo a "doña tsunami") pero completamente ineficientes en la práctica. También quedó claro que las multimillonarias sirenas son más inútiles que un cenicero de moto para estas ocasiones.

Ojalá que los sucesores de la Onemi se bajen de sus flamantes camionetas fiscales y empiecen a recorrer las poblaciones y organizar las juntas de vecinos para el manejo de emergencias, ese trabajo jamás se ha intentado de manera seria y hace muchísima falta. Incluso muchos vecinos lo están haciendo por su cuenta ya que los empleados públicos no han servido para nada.

En fin, esas fueron mis impresiones del ensayo de tsunami, ya veremos como resulta para cuando venga El Grande. Nos leemos mañana.