Pampa Concordia: el proyecto sin pies ni cabeza

Como tantas otras cosas en Arica, el proyecto de Pampa Concordia o las 1500 hectáreas partió con una cuchufleta.

"El proyecto partió originalmente como una idea de la familia Lombardi Fiora del Fabro, que en 1997 solicitó al ministro del Interior de la época, la venta de esos terrenos y facilidades para obtener los derechos de aguas. El ministerio no dio respuesta, hasta que al año siguiente, en que el ministro Raúl Troncoso propuso la idea como una delas 48 medidas para Arica. Posteriormente Corfo se hizo cargo de esa planificación, declarando desierta la licitación en un accidentado proceso". (La Estrella de Arica, 25 enero 2006).

En los años sesenta la Junta de Adelanto había hecho unos sondajes, prácticamente en el límite con Perú y encontraron agua de buena calidad, luego vino la casi-guerra con Perú a mediados de los setenta y los derechos de esa agua quedaron en poder del Ejército. En algún momento y por alguna intrincada maniobra que nadie se explica muy bien, la familia Lombardi apareció diciendo que ellos eran dueños de esos derechos de agua y basados en eso pidieron al gobierno que les cediera 1500 hectáreas de terreno para hacer un proyecto agrícola en el lugar.

El gobierno, como era de esperar, les dijo toma cachito de goma y aunque ellos siguieron intentando por algunos años en tribunales, finalmente sus pretensiones fueron desechadas como correspondía, la cuchufleta no resultó y se quedaron debajo de la mesa. Mejor suerte tuvieron cuando compraron en licitación pública un gran terreno en pleno centro de la ciudad (Lynch con 21 de Mayo) del que vendieron la mitad con buena ganancia a multitiendas Johnson. Una por otra.

A partir del año 2006 hemos visto una sucesión de licitaciones y proyectos -cual de todos más absurdo- todos refritos de la idea de los Lombardi. Yo participé en una de las primeras de esas licitaciones trabajando para uno de los oferentes, leí el marmotreto de antecedentes y otros más y me di cuenta que después de filtrar toda la palabrería barata el proyecto era un completo absurdo: sin pies ni cabeza.

Pero la ópera bufa ha continuado todos estos años. A mediado de los años 2000, en medio de una de las varias licitaciones desiertas, Corfo anunció que estaba todo solucionado y una inmensa granja de avestruces con capitales de no recuerdo donde iba a dar vida al proyecto. Eduardo Frei, fue el primer presidente en darse cuenta que podía vender humo con el proyecto y así, cada cierto tiempo los sucesivos presidentes han presentado planes que no valen el papel donde están escritos. Un compendio de estupideces.

Y la última estupidez -como no- vino de la mano de nuestro excelentísimo presidente Sebastian Piñera a quien alguien le sopló la brillante idea de entregarle esos terrenos a las empresas semilleras, lo que es políticamente imposible porque la turba de agricultores de subsistencia de los valles se irá a establecer allá apenas empiece el regalo del agua de la Concordia.

Señores del gobierno de excelencia: ¡las semilleras no necesitan subsidios, estúpidos! (espero que se entienda donde y por qué coloqué la coma). Ya están instaladas y seguirán creciendo en la medida que no se repartan estos palos de ciego sin sentido, lo lógico es que en los valles ocurra lo mismo que en el resto de Chile: queden poblados principalmente por grandes empresas agroindustriales, que usarán los recursos de una manera mucho más racional y controlable que los miles de agricultores de supervivencia y avivatos que cultivan hoy con enormes subsidios.

¿Saben cual es el efecto real de esta estúpida idea? ¿saben quien se está beneficiando detrás de todo esto?, el proyecto de la desaladora, que esperan calladitos y muertos de la risa al ver como sus agentes encubiertos y tontos útiles trabajan para concretar la gran estafa. Si los pozos de Concordia se destinan al agua potable adiós desaladora y adiós Desalari, ¡españoles go home!. Entonces por fin tendremos agua potable de calidad en la ciudad a un costo bajo, claro que sería una gran desilusión para los que se están sobando las manos con la idea de desalar.

En un golpe de cordura, Bachelet -durante su última visita a Arica, que pasó sin pena ni gloria- anunció que esa agua debería ser destinada al suministro de agua potable. En el Gobierno Regional obviamente soltaron los perros acusando que era solo para destruir la gran idea del presidente Piñera. No señores, eso es realmente lo que corresponde y es la solución al problema del agua potable en el sector norte de Arica. Lo dijo Bachelet pero que me importa, las ideas son buenas o malas, vengan de donde vengan y yo aplaudo de pie esa buena idea.