¿Volvemos a la Unidad Popular?

Sic transit gloria mundi

Todas las encuestas muestran una baja de aprobación al gobierno y a la presidenta Bachelet, que en algún momento llegó a superar el 70% de aprobación en las encuestas "sic transit gloria mundi", la gloria del mundo es transitoria, que increible.

Sin ser adivino ni tener bola de cristal, desde que fueron las elecciones pasadas yo sabía que esto iba a pasar y que el gobierno de Bachelet iba a debilitar mucho a toda la izquierda, claro que no contaba con que iban a cometer tal cantidad de estupideces -como dijo el contralor en su inédita charla- con lo que están ayudando, entusiastas, a acelerar el proceso.

La verdad es que a quien le tocara gobernar este período iba a tener que bailar con la fea, si hubiese salido Matthei habría sido la muerte de la derecha chilena por muchos años y un potenciamiento de largo plazo para la izquierda, tal vez no habría pasado en un año, como le está pasando a Bachelet ahora, pero en cuatro años de gobierno de derecha con las condiciones que se nos vienen eso es seguro.

En esta primera etapa están perdiendo los votos más blandos. Mi señora que siempre votó por Bachelet, se quejaba ayer que con Piñera le dieron el "bono marzo" y este año no le tocó: un voto menos. Muchos ven irritados como todo el discurso de la reforma tributaria se reflejó en un efecto sencillo e inmediato: subió el precio de las cosas que más les gustan como alcohol y cigarrillos. Nunca vi a gente tan furiosa contra Allende como cuando escasearon los cigarrillos, creo que esa sola estupidez les va a costar bastantes votos. No se les pudo ocurrir una mejor idea para provocar rechazo generalizado a la legitimidad de los impuestos, soberbio.

Ayer vi por casualidad al ministro de hacienda, explicando los efectos de la reforma tributaria y el gasto contra cíclico, daba saltitos frente a un enorme gráfico que mostraba como el crecimiento bajaba y el gasto público subía, decía que eso iba a reactivar la economía y ofrecía cientos de miles de trabajos, cuando en realidad se han perdido cientos de miles de trabajos desde que asumió el gobierno.

El gasto contra-cíclico es un invento del antiguo ministro de economía Andrés Velasco, que ahora está en la oposición disfrazado de "liberal". En realidad no se si será un invento pero fue el primero a quien le leí el concepto hace años. No es otra cosa que la receta keynesiana de aumentar el gasto público para reactivar la economía, algo que quedó desacreditado en los años ochenta por la abrumadora experiencia que terminaba en una espiral inflacionaria o con el estado endeudado hasta el cuello.

El contra ciclo solo puede funcionar con ciclos muy cortos, donde la recuperación es tan rápida que no alcanzan a producirse los efectos indeseados, hoy habría que estar loco para pensar que los problemas son de ciclo corto y se están poniendo las bases para volver a una trampa en que Chile estuvo metido durante los siglos 19 hasta bien entrado el siglo 20: inflación, déficit, deuda.

Mucha gente ve una vuelta ideológica de la izquierda en todo esto, yo no veo nada de izquierda sino simplemente una cleptocracia creciente que, a mi modo de ver, provocará una reacción en la gente que no votó en las elecciones pasadas. Eso si que el desprestigio de la izquierda no trae necesariamente una vuelta a las ideas de derecha porque existe una enorme escala de grises entremedio, perfectamente lo podría capitalizar un demagogo ladrón. Por eso -a mi modo de ver- Enriquez-Ominami y Parisi fueron en su momento muy peligrosos.

Claro que la cleptocracia no es solo de los políticos sino también de las personas que votan, lo más probable es que quieran reemplazar a los ladrones por otros distintos.

¿Estamos de vuelta a la Unidad Popular?

Hoy mucha gente de izquierda repite parte de la retórica de los años setenta en Chile, y personas que vivieron esos años piensan que estamos volviendo a lo mismo, yo creo que estamos a años luz de eso. Primero no existe el bloque socialista encabezado por la URSS y Cuba pasó de ser un exportador de la revolución a un país en la miseria, que apoya a líderes populistas para sobrevivir.

Los regimenes que se dicen socialistas como Cuba y Venezuela, no pasan de ser cleptocracias, gobiernos de ladrones sin la menor vocación ideológica,probablemente lo único que les preocupa a estas alturas es sobrevivir sin que los boten porque saben que al caer sufrirán la suerte de Ghadaffi o Caesescu, eso es lo único que los mantiene aferrados al poder.

El Partido Comunista chileno está manchado de escándalos, hipocresía e inconsecuencia como nunca antes, de manera parecida a los gobiernos de Cuba y Venezuela que por tanto tiempo los financiaron, tratan de abrirse espacios y sostenerse por secretaría y chanchullos asambleístas. Creo que nunca volverán a ser una fuerza política importante y si bien pueden aprovechar su condición de bisagra electoral para ganar espacios, difícilmente pasarán el 8% del total de los que votan, que ya son muy pocos.

Creo que lo que tenemos ahora es una vuelta de los aficionados y sinverguenzas, secundones en todo ámbito: político,económico e intelectual, a la manera chilena, volvimos a quedar a merced de los mediocres y ladronzuelos. Lo que muestra como nuestra democracia es perfectamente representativa de los que votan. Y es claro que no estamos volviendo a la Unidad Popular, estamos a años luz de eso.