La fuerza letal

Leo que el Ejército estudia la posibilidad de enviar a oficiales a estudiar a Rusia. Me parece una idea muy buena, considerando que nuestra principal hipótesis de guerra es con Perú, país que ha recibido históricamente armamento y doctrina de ese país: que mejor manera para aprender un poco más de nuestros hipotéticos adversarios militares. Cuando venga un plan de rearme o renovación de material bélico del Perú, será muy probablemente ruso. También parece que Vladimir Putin tiene programado un viaje a Bolivia. Sin duda que conviene a Chile tener relaciones fluidas con ellos, los tiempos de la URSS ya quedaron bien atrás creo yo, hoy Rusia es más liberal en varias cosas que el propio Estados Unidos. En fin, a otra cosa. 

Policía sin poder
Tiempo atrás escribí lo que me contaba un amigo canadiense: en ese país cuando alguien huye de un policía, este da la órden de ¡alto! tres veces y a la cuarta vez dispara al cuerpo. Cuando un policía mata o hiere gravemente a alguien con su arma de servicio, debe acreditar que dió la orden de detenerse tres veces antes de disparar, normalmente eso se hace con cámaras de video que leva en el auto o en la ropa. Una vez que eso queda acreditado puede volver a su trabajo sin ningún problema y los afectados o la propia víctima no tienen nada que reclamar.

Hoy veía en Facebook una entrevista a otro policía de Calgary donde mostraba el armamento que llevan en el auto y la ropa: pistola 9mm; un teaser de electroshock; un bastón retractil; una escopeta "para matar animales heridos o peligrosos o para abrir una puerta, en caso que se nieguen a hacerlo" y finalmente un fusil de asalto tipo M-16 con 100 tiros de alto calibre. Decía el policía, muy tranquilo y sonriente, que si alguien se les acercaba a menos de 30 metros portando un cuchillo el policía le disparaba a matar. "Aquí no andamos con chicas, si sacas un cuchillo te contesto con un fusil, la fuerza debe ser mínima pero la necesaria para asegurarse".

Me llamó la atención porque normalmente se pone a Canadá como ejemplo de baja criminalidad y respeto por los derechos individuales. Busqué el Internet hasta encontrar el modelo, que es el que muestro más abajo. Básicamente consiste en que el oficial de policía se hace presente, evalúa la situación y decide de acuerdo a lo planificado según el caso. Existen distintos grados de resistencia que puede encontrar que son: cooperativo; resistencia pasiva; resistencia activa; agresivo y peligro de daño o muerte. Para esas amenazas hay respuestas que pueden ser comunicación; fuerza suave; control físico; fuerza fuerte y fuerza letal.

El sistema está ampliamente difundido y nadie puede alegar desconocimiento, así es que cualquiera que se acerque con un cuchillo o cualquier arma u objeto potencialmente capaz de causar lesiones graves es con gran probabilidad un hombre muerto. No es tan raro después de todo que la criminalidad sea tan baja.

Pensaba en el problema que tenemos acá con nuestra policía y me preguntaba por qué se permite -por ejemplo- que en una protesta los agredieran con un comportamiento que puede causar daño o muerte y los agresores quedan completamente impunes. Esta es una situación indignante para mucha gente -me incluyo- pero también muy rara, creo que no deben ser muchos los países en el mundo donde los policías no puedan defenderse en un tumulto, usando la fuerza fuerte o letal en caso que vean amenazada su integridad física.

Me parece que el derecho a la autodefensa está bien establecido en nuestras leyes y no veo que problema institucional o legal podría enfrentar un carabinero que dispara -y eventualmente mata- a alguien que lo amenaza con un arma convencional o improvisada como podría ser una bomba molotov por ejemplo. En cualquier caso hay muchos ejemplos de carabineros dados de baja al causar lesiones en medio de un motin (acá los llamamos eufemísticamente "manifestaciones") y muchos más ejemplos de carabineros lesionados cuyos agresores son conocidos y quedan impunes. Esto sugiere que hay algo más allá de la ley o los reglamentos en estos casos.

Las razones de esta especie de patente de corso que existe en las protestas son diversas. La más obvia en estos momentos es que la presidente y muchos altos funcionarios de gobierno pertenecieron a grupos terroristas o proto terroristas en el pasado, es un problema parecido al de Dilma Rousseff que de asaltante de bancos llegó a la presidencia, entonces por más que entiendan racionalmente que, permitir la violencia de las muchedumbres puede ser suicida, tienen su corazoncito al lado de los violentos, quienes son un poco de los suyos.

Sin embargo la presidente, que ha sido campeona para dispararse en el pie, puede verse en enormes problemas por una actitud permisiva ante la violencia callejera, porque a medida que su popularidad baja en picada, se va haciendo cada día más probable que la violencia se vuelva contra ella y su gobierno. Es increíble que no se de cuenta que esta falta de respaldo a los carabineros le puede costar carísimo en términos incluso personales.

Creo que la gente del gobierno -a menos que sean algo retardados- deberían darse cuenta que a menos popularidad y a medida que crece el odio contra el gobierno, más necesaria se ira haciendo la represión, aunque sea para salvar su propio pellejo. Pero como Carabineros no es respaldado para reprimir se están produciendo dos efectos sumamente peligrosos (i) la policía está dejando de actuar, ningún carabinero tiene la obligación de suicidarse ni poner en riesgo su integridad física, así es que de manera creciente se están convirtiendo en observadores que dejan hacer, hasta que la violencia termina sola, El otro efecto es que (ii) esto alienta a que las protestas sean cada día peores y se produce un círculo vicioso en el que hoy estamos metidos y al parecer ya no tiene salida suave.

Llegado el momento nada impide que una turba enfurecida entre espontáneamente a La Moneda, tal como entraron a una iglesia, reduzca a la guardia, le prenda fuego y saque a la presidente, con un par de miles de personas envalentonadas podrían hacerlo, no veo como lo podrían impedir.  América Latina tiene muchas historias por el estilo, por algo la Casa de Gobierno de Bolivia se llama "Palacio Quemado".

Muchos pensarán que exagero, que "en Chile no pasan esas cosas", bueno, hasta septiembre de 1973 recuerdo haber escuchado esa misma frase muchas veces. En Chile pueden pasar muchas cosas, especialmente si el gobierno tiene apenas un 21% de apoyo en las encuestas, y bajando, es cada día más peligroso que el círculo vicioso de más violencia y menos represión siga creciendo.

 Esa espiral que está creciendo es peligrosa no solo para el gobierno, sino para la gente en general que sufre de destrozos cada vez mayores y para los propios participantes de las protestas que -sin ser necesariamente violentos- pueden caer abatidos por una bala loca, quemados por una molotov o muertos de un golpe mal dado. Los seres humanos reaccionamos a los incentivos y la certeza de impunidad es un incentivo a arriesgarse cda vez más creyendo que nada les va a pasar. Se equivocan, a medida que aumenta la violencia con o sin impunidad habrán cada vez más muertos.

La policía en todo el mundo funciona por medio de la amenaza. Es imposible que quinientos policías, aunque estén armados hasta los dientes, puedan controlar a cincuenta mil personas furiosas, a menos que esas personas les tengan miedo porque saben que les pueden disparar a matar. Eso es clave, si dejan de ser una amenaza creíble, si no infunden miedo la situación se pone muy peligrosa para los policías y para todos los que se encuentren cerca, incluso gente que no tiene nada que ver o para los propios violentistas. Y para que hablar del gobierno. Ese es un peligro real, tan fácil de entender que me asombra que los políticos no se hayan dado cuenta que se le puede volver en contra, tal como con tantas otras estupideces que han cometido.