El síndrome del guru

Me encontré por casualidad con las donaciones declaradas por los candidatos a alcalde en Arica, curiosamente el que recibió el monto más cuantioso -con notable diferencia- es quien salió electo, nuestro actual alcalde Gerardo Espíndola, de cuya existencia me vine a enterar cuando fueron las elecciones, y eso que en Arica casi todos nos conocemos o nos ubicamos, esta era la excepción. Me entró la curiosidad por saber quien era nuestro flamante alcalde, leo en un artículo de Internet:

Gerardo Espíndola
Periodista ariqueño de 37 años. Profesional regionalista, que ha desempeñado su trabajo tanto en Arica, como en distintas regiones de Chile. Su trabajo ha estado ligado a la formación de nuevos medios de comunicación regional, desarrollo cultural y acción ambientalista.

Fue fundador del diario El Morrocotudo y director y gerente de medios de la red nacional de diarios ciudadanos, Mi Voz. Trabajó como periodista del diario La Estrella de Arica.

Ha liderado la creación de medios de comunicación en 8 regiones del país y capacitado a más de 6 mil personas en alfabetización e inclusión digital a lo largo de Chile. Además impartió relatorías en comunicación, liderazgo y nuevas tecnologías tanto en Chile, como en Colombia.

Actualmente se desempeña como director de Extensión de la Casa del Regionalismo del diputado Vlado Mirosevic. Además es coordinador de proyectos culturales en la región y consultor internacional en asuntos de reciclaje.

Rayos, es asesor internacional en asuntos de reciclaje, tal vez por eso consiguió los $ 32.603.001 en una ciudad donde nadie suelta un mísero peso a un candidato. ¿Quien diablos se habrá puesto con el billete? ¿Quien puso el peso del 001? Es increíble lo fácil de engañar que resulta la mayoría de los chilenos, farsantes del periodismo como Matamala y sus émulos, que pontifican y escriben libros sobre la "relación tóxica" entre la política y el dinero, igual que los farsantes fiscales del Ministerio Público que inventan delitos para perseguir, exponer y arruinar carreras políticas escogidas con pinzas, pero nadie, absolutamente nadie dice una palabra cuando aparecen estas donaciones en bulto, donde no se sabe quien fue el que se metió la mano al bolsillo.

Las campañas políticas cuestan mucha plata, una simple aritmética del número de activistas pagados, de medios físicos y logística muestra que las cuentas de ningún candidato cuadran, siempre los que tengan plata se las van a arreglar para financiar a sus candidatos -están en su perfecto derecho porque es su plata- el problema es que a la hora de identificar a las personas del billetón con nombre, apellidos y montos resulta que nadie fue.

Este fenómeno de aparecidos en política, que no los conoce nadie y poco antes de las elecciones irrumpen bien forrados en plata -y las ganan- es un asunto que me tiene muy intrigado. Es cierto que no tener historia política es una ventaja, lo mismo que aparecer al último minuto como el reformador simpático y con las manos limpias. Creo que si Espíndola hubiese hecho una campaña más larga y visible le habrían empezado a aparecer las yayas, como le pasó a Cuevas, un espontaneo que llegó segundo y casi-casi la hace. Pero no es suficiente, le falta una pata a esa mesa que es el billete y algunas relaciones clave ¿quien está poniendo el billetón y los contactos?.

En Arica al menos, a mi me aparece por todas partes el ex senador Fernando Flores. A Mirosevic, el diputado aparecido que ganó hace unos años con una campaña blitzkrieg, calcada a la de Espíndola y con financiamiento de quien sabe quien, igual que Espíndola, yo lo ubicaba como uno de los más cercanos a Flores. Mi impresión personal sobre él es que no tiene capacidad mental ni para elegirse en una junta de vecinos, es muy limitado y siempre he pensado que alguien lo colocó y le fabricó la candidatura, misma cosa con Espíndola a quien ni siquiera conocía en una ciudad donde todos nos conocemos, ambos eran operadores del círculo más cercano de Flores. ¿Que vendrá ahora? ¿Rosendo Zanga será nuestro próximo intendente? Ah, solo bromeo, pero quien sabe...

Una cosa me lleva a la otra, me puse a buscar el artículo de Flores sobre el emprendimiento político, o sartups políticas -que tal vez sea la respuesta a mis dudas - pero no pude encontrarlo, es la primera vez que escucho a Flores una idea interesante. En cambio encontré algunas entrevistas y videos suyos muy cercanos al coaching, incluso una cosa que ahora vende llamada Beyond Coaching. No me impresionó mucho pero debo dejar clara mi opinión: Fernando Flores no es un chanta como opinan ligeramente muchos pobres diablos (en el sentido intelectual, pobres de ideas), por el contrario creo que es bastante inteligente pero también es superficial y manipulador compulsivo.

Le dicen el padre del coaching ontológico y parece que no le molesta, mal que mal eso le ha conseguido la amistad de billonarios y líderes políticos así es que si tiene reparos con el asunto se los guarda. En una divertida entrevista, el biólogo Maturana se queja amargamente que Flores et al han usado su nombre para vender las pomadas del coaching, me parece muy gracioso viniendo del padre del chamullo biológico: es la primera entrevista que leo donde habla como todo el mundo y no en jerigonza como solía hacer antes ¡es asombroso! ¿Se habrá curado de la jerigonzitis? Ahora arma frases completas que todo el mundo puede entender. Lo malo es que cuando uno lo entiende lo encuentra simplón, su manera de decir clichés sin decirlos usando la jerigonza, ese es su secreto.

Fernando Flores ha tenido muchas malas ideas, seguramente producto del síndrome del guru, que yo conozco bien porque lo comparten varios de mis amigos. Es esa especie de sentimiento de iluminación, que en cuanto llegan a una empresa lo primero que hacen es encontrar que todo está mal y explicar por qué todos están equivocados y son unos incompetentes. El síndrome del guru o la navaja suiza del consultor consiste en eso: hacer notar muchos errores y relatarlos dramáticamente, entonces todos lo creen un genio visionario.

El problema es cuando hay que dar soluciones, muchos consultores han pasado su vida quebrando todas las empresas que han asesorado y así y todo mantienen su prestigio intacto. Flores tiene esa especie de habilidad negativa, claro que ahora se puede dar le lujo de asesorar a los que no pueden quebrar fácilmente. Es algo parecido a lo que pasa con los ministros de hacienda en Chile.

En fin, empiezo mirando un gráfico y no paro de divagar hasta llegar a Fernando Flores y los gurues, así nos pasa a los dispersos, creo que si hubiese tenido una cerveza grande en la mano le habría podido dar más enfoque y claridad a esta serie de cosas inconexas, pero dentro de tanta tontera creo que hay un gato encerrado importante detrás, al que todavía no logro dar forma. Falta copete, del que mató a Gaete.