Fin de curso

Por fin terminé mi curso de Teoría General de sistemas en el CFT de la Universidad de Tarapacá, es una lata hacer clases y cuando termino un curso me pasa algo parecido a cuando viajo a la Virgen de Las Peñas, siempre digo "nunca más" pero al tiempo me dan ganas de nuevo y ahí estoy parado frente a un grupo de gente pensando en como interesarlos en lo que les voy a enseñarles.

En la vida real (trabajo) la gente rara vez tiene que rendir exámenes, pero muy a menudo tienen que hacer trabajos, por eso me quebré bastante la cabeza pensando en darles trabajos que les dejaran algo. Así es como les di dos trabajos con gran cantidad de requisitos: una exposición oral, individual en 15 minutos exactos y un ensayo de opinión sobre las materias que vimos.

Fue muy interesante como se esforzaron en los trabajos, es muy difícil para la gente que estudia hablar bien en público y mucho más difícil redactar opiniones fundamentadas por escrito sobre algún tema. Me consta que se quebraron la cabeza bastante en ambos casos y en general lo hicieron muy bien.

Siempre cuando enseño me pasan cosas raras, muchas veces me veo a mi mismo en algunos de mis alumnos: como era yo mismo cuando estudiaba, pobre como una rata, muy ingenuo y lleno de ambiciones, es una especie de espejo de mi pasado.

Y también veo en otros el reflejo de mis amigos que fracasaron, igualitos tomando decisiones equivocadas una tras otra, a esos son los que trato de ayudar en la medida que puedo porque se lo triste que resulta cuando chocan de frente con el mundo real, cruel y sin ningún interés por lo que les pase. Aunque no es mucho lo que se puede hacer por ellos igual trato de contarles como es la cosa.

Y siempre aprendo tanto o más de lo que enseño, en el pequeño mundo que es un curso uno encuentra a toda la gama de personas, y tienes un poder en la mano que podrías usar para bien o para mal, entonces me doy cuenta de lo peligroso que puede ser un pobre diablo en el puesto de un profesor.

En fin, ya terminó todo y se cierra el capítulo, este viernes a las 12 de la noche estaré puntualmente a la entrada de la Isla del Alacrán con cantidad de las mejores cervezas para los que quieran celebrar el fin del curso: Dos Equis ambar, Tecate, Busweiser y Kuntzmann sin alcohol por si hay algún(a) abstemio(a) lo cual dudo, porque todos tienen pinta de curahuillas.