¿Se acuerdan que a fines de septiembre fuí a Iquique y casi fundo el auto en el camino?. Bueno, pasó el tiempo y pensé que era solo la tapa del radiador, pero el problema seguía y cada cierto tiempo el auto se volvía a calentar. Así es que tuve que esperar que llegara mi vecino mecánico, que ahora trabaja en Chuquicamata en la mantención de los camiones gigantes, para ver que diablos podía estar pasando.Y aplicamos tecnología made in Chile, el problema era muy difícil de detectar porque se producía solo a veces y con el motor andando: aparentemente no pasaba agua al aceite, ni estaba entrando agua a los cilindros pero ¿quien sabe si con el motor encendido estaban entrando pequeñas cantidades de agua que se evaporaban con la explosión?. Revisamos por fuera la bomba de agua y se veía seca, además recién la habían cambiado. Mi peor pesadilla era tener que reparar nuevamente la culata.
La idea del Arturo fue ponerle presión al sistema de enfriamiento, a la manera chilena, conectando un bombín de pie con la pequeña manguera que sale del radiador al estanque de reserva. Como el bombín tenía un manómetro podíamos medir la presión así es que reforzamos bien las mangueras y soplamos hasta alcanzar las 18 psi. Con mucho cuidado porque la tapa del radiador se habría convertido en un proyectil balístico si se llegara a soltar.
Y dejamos un buen rato el sistema con esa presión a ver que pasaba, hasta que ¡voila! la bomba de agua -supuestamente nueva- empezó a gotear: allí estaba el problema. Desarmamos y pude comprobar como el otro mecánico no me había cambiado la bomba, solo le hizo una reparación chusca y ahora -bajo presión- estaba comenzando a fallar: por allí se estaba yendo el agua. Así estaba la bomba por dentro: llena de oxido, y también estaba oxidada por fuera.
A grandes males grandes remedios: fui a comprar una nueva bomba (US$ 38 aprox) y aproveché de cambiar el tensor de la correa de distribución (US$ 20 aprox) que ya estaba dando señales de muerte. A la noche el Arturo ya tenía todo armado y el auto andando ¡que suerte es tener un buen mecánico de confianza!. Hoy le llevaremos el radiador a que le solden un gollete nuevo, proque el que tiene está muy gastado y con eso quedaría el CRX tiqui-taca. Un problema menos, varias lucas menos.
En fin, ese fue mi aporte de mecánica -hace tiempo que no colocaba una nota acerca de uno de mis hobbies favoritos- si alguien quiere encontrar una fuga en el circuito de refrigeración ya sabe como hacerlo, un bombín de pie chino con manómetro cuesta unos US$ 6, se ahorrarán de ir a una rectificadora a que les cobren un ojo de la cara por la prueba de presión de culata. Pura tecnología made in Arica.
...mmmmm, yo creo que el mecanico necesita unas buenas cazuelas, está muy re flaco.
ResponderBorrarFue mi comentario técnico del dia.
Un abrazo
[y este es mi aporte folcklorístico. Dedicado a Salma Hayek, la única mujer bella del mundo. El resto son solo mujeres]
ResponderBorrarManta de Tres Colores
(Clara Solovera)
Mandé tejer una manta
mi vida de tres colores,
de negro, rojo y de verde,
la manta de mis amores.
Qué linda quedó mi manta
con sus colores tan vivos,
de negro, rojo y de verde
que pa' mí fueron esquivos.
El verde fue por tus ojos,
verdes como los sauzales
que se clavaron en mi alma
como dos verdes puñales.
El rojo fue por tu boca,
panal de dulzura inmensa,
y el negro fue por tu pelo
aprisionado en dos trenzas.
Y llorando por tu olvido
mi corazón ya no canta,
pensar que de tu cariño
sólo me queda la manta.
Por eso cuando estoy triste
echo al viento mi canción
y va conmigo mi manta
apretada al corazón.
Shaolín, Apannado imaginario
De la punta del cerro: oigaaaaa! mire que el califato ya está ocupado por "un tal Sergio" (omitiré sus apellidos para proteger a los inocentes. Solo diré las iniciales: Sergio Merz C.)
ResponderBorrarSergio hombre, que gustazo! jajaja, iba a agregar un brindis a esta efusión de folklore, pero mejor me abstengo: es muy cochino!
CRX = Civic Renaissance Model X
ResponderBorrarBuena la idea del bombin de pie, aunque pienso que cualquier taller podria testear la presion para ver fugas por un par de $$. No necesariamente una "rectificadora"
Suerte que encontraste al flaco Arturo, yo aqui tengo uno que se llama Jorge, y siempre dice: "en Chile lo haciamos asi" y sale con cada invento, pa cagarse de la risa.
Espero que ahora sigas crxiando sin problemas
Leo Lorca
Oye Tomás: ¿seguís dando la hora con el auto refaccionado color verde moco de loro? En caso positivo: ¿poqué no te comprai una citrola, más mejol...?
ResponderBorrarBradanovic, diferente es mover la cabeza de lado a lado -izquierda derecha, derecha izquierda- y emitir un ¡mmmmm! casi lastimoso, a decir ¡¡¡guauu, le daría unas buenas cazuelas al mecánico!!!...no osaría alterar el califato de don Sergio y sus aspiraciones salmaticas.
ResponderBorrarAdemás soy fiel al decálogo del buen flaco y como flaca consecuente tengo un hombre con harta carne que entibia mis noches...¡ayyy! -lease con acento de flaca fatigada-...
Dixi
Leo, lo que pasa es que acá está frepleto de mecánicos chantas y cuenteros, no se les ocurre como hacerlo y esectivamente te mandan ab la rectificadora donde con una "machina" (que es un picante cmpresor disfrazado) te haceb la prueba y cobran un ojo de la cara. Es una suerte tener al Arturo al lado, porque aca la mayoría de ñlos mecánicos son vacunas,
ResponderBorrarEl CRX ya tiene 245.000 millas (392.000 kmts) y espero sacarle 245.000 más por lo menos.
Eduardo ¿como es eso de "verde moco de loro?" más respeto hombre!! Para que sepas ese auto anda como cuete, CERO problemas, lo único que no es tan económico como el CRX, la próximka prueba será un viaje a Iquique
LA del cerro chileno, bien me parece la aclaración, con un califa es suficiente, además el muchacho es flaco por genética no es que estén fallos los caldos!