Más rápido que una bala

La noticia fue publicada por Lilian y me dejó pensando, miren esto:

El río Ebro carga con 620 kilos de cocaína y 430 kilos de otras sustancias que cada año llegan a sus aguas tras ser consumidas. Lo determina el mapa más completo que precisa en una región de España los puntos de tráfico y consumo de droga basado en la cantidad de estas sustancias encontrada en las aguas fluviales.

¿Se imaginan la tremenda oportunidad de negocio si algún emprendedor lograra purificar esa valiosa mezcla y recuperar los 620 kilos "de la buena"? claro que toda la asquerosa agua debiera ser descartada, pero 620 kilos de cocaína pura hacen rentable cualquier proceso, ¿adonde están los emprendedores europeos? ¿adonde el estado que no apoya el emprendimiento?. Los únicos beneficiados hasta ahora son los peces que deben andar todo el día duros con toda esa dosis incluída gratis en el agua de cada día.

Comentaba con mi amigo Juan como es increíble que una misma canción puede tener interpretaciones tan distintas y todas buenas, esto a propósito de un video que me mando con These Foolish Things interpretada por Paris Bennet. Ya Lilian me había hecho el comentario de que le gustaba la -perfecta- versión de Ella Fitzgerald, yo mencionaba la de Nat King Cole, cada una con un sentido distinto pero la canción es la misma. Mencionaba Juan la canción I've Got You Under My Skin, cantada por el machote Frank Sinatra, que se la compuso Cole Porter ... ¡a su novio!. En fin, así es la música, parece que algunas melodías tienen más posibilidades expresivas que otras, como a algunos diamantes en bruto se le pueden sacar más caras que a otros. Otra de esas cosas musicales que no tienen una explicación muy clara. Estuvimos viendo varios ejemplos pero que mejor que la interpretación de My Funny Valentine de Chet Backer que encabeza esta entrada.

Y sigue la huelga de profesores con los mismos argumentos de siempre: que son la profesión más noble que existe, que el profesor trabaja las 24 horas del día, que todo lo que somos se lo debemos a los profesores, que nadie los comprende, que aman a los niños como nadie y no les pagan lo que corresponde.

Sin embargo como todos sabemos muchos profesores no tienen nada de nobles, muchos son abusadores y prepotentes con sus alumnos, a los que supuestamente quieren tanto pero no les tirita la mano para hacerles perder un año completo con tal de presionar por más plata. Son profesores las 24 horas del día, descontando los meses que pasan en huelga, o las clases que no preparar pero cobran por prepararlas o las vacaciones de dos meses al año. A pesar que no les pagan lo que merecen reciben sueldos muy por encima del promedio nacional por tiempo trabajado.

En fin, yo a mis profesores no les debo nada como tales, excepto los que fueron excelentes personas y amigos, pero casi todo lo que me enseñaron fue una estúpida pérdida de tiempo que afortunadamente olvidé hace mucho. Que se vayan al diablo, la educación estatal debería desaparecer. Es la única manera de que no caigamos a lo que hoy pasa en Perú, donde a pesar que la educación pública es gratis, la mayoría de la gente prefiere pagar para evitar que sus hijos caigan en esos antros.

Ya, tenía que despotricar contra algo, misión cumplida por hoy. Anoche nos juntamos con Speedy Joe a tomar unos pitcher, quedamos medio maharishi después de comentar toda la historía universal, filosofía, ética y estética, especialmente de las chicas que iban pasando, Speedy Joe es más rápido que una bala con las mujeres, tengo mucho que aprender de este gurú. Sin más que contarles, me despido hasta mañana.