El viejo liceo

Estimados/as: 

Junto con saludarles, Pido que se haga presente la persona que administra esta página, para saber cuál es el motivo por el cuál Borran aquellos comentario hechos por mi persona, negándose a aceptar todo tipo de críticas o solo un pensamiento diferente y realista-concreto, .-porque quien más que un estudiante para saber qué sucede en su liceo ?-. mostrando una visión utópica de las cosas, diciendo que tenemos ayuda y que tenemos planes a futuro, apoyo, que el municipio y bla bla bla para NUESTRO Liceo! y tienen el descaro de llamarle Nuestro cuando realmente no han hecho prácticamente mucho más que llenarse la boca diciendo que no Ex-Valentinianos, que ayudarán a nuestro liceo y todo el show !!! Siendo que, solo se hacen presentes cuando tienen la oportunidad de mostrarse, y en la realidad?? el día a día ? que pasa con eso ?¡ Quién se preocupa de eso?¡ NADIE !!! a excepción de Norman y la gestión Actual ! Que bonito se debe sentir que hicieron algo por los demás, sabiendo que, el 98% de lo que han hecho ha sido por ustedes mismo y por quedar Bien ! Realmente que mal por ustedes !!

No participo mucho en el grupo de ex alumnos del Liceo Valentín Letelier -desde Arica no es mucho lo que puedo hacer- pero leí esta carta de una alumna del liceo al grupo y pienso que mi viejo liceo ya no tiene nada que ver con lo que fue cuando yo estudié allí. Me imaginaba a esta alumna empoderada hablando así a nuestro rector don Lucho Galecio y creo que es una buena muestra de como las cosas se han ido descomponiendo.

¿Que pasará por la cabeza de estos muchachos, que los hace pensar que tenemos la obligación de preocuparnos por ellos? Despierten chicos: a nadie le importa su vida, tal vez a sus padres y en muchos casos ni a ellos. Me imagino que será de estos empoderados después que se les muera el papá y la mamá, cuando tengan que salir a la calle a ganarse la vida y mirarle la cara a un jefe para tener con que comer y un lugar donde dormir. Con esa visión de la vida creo que parten con una enorme desventaja.

En mis años hijitos (ah, ya me puse a chochear) el Valentín Letelier era duro, durísimo y no porque fumáramos drogas, sino porque nos forjaban el carácter a disciplina y terror. Era un liceo de tradiciones y muchas de esas tradiciones -como las "brigadas de disciplina"- eran brutales o injustas, pero eran las reglas del juego y así aprendíamos -al menos yo aprendí- que no somos el ombligo del mundo y que nadie tiene la obligación de servirnos. Ahora parece una escuela de barras bravas y lo peor es que la culpa es de nuestra propia generación.

Los hippies, sus hijos y nietos renunciaron a la responsabilidad de mandar. Tengo muchos amigos que prácticamente son sirvientes de sus hijos, eso se disfraza de cariño pero es una actitud cobarde y egolatra: tratan de comprarles cariño dándoles todo lo que piden y encontrándoles la razón en todo, esa es la verdad. En lugar de cariño y respeto lo que consiguen con eso es que los desprecien. Por eso, muchos de estos niños son empalagosamente cariñosos cuando quieren conseguir algo, pero son los primeros en deshacerse de los viejos apenas pueden.

Que se vayan al diablo mocosos malcriados, a mi ningún adolescente espinilludo me viene a dar lecciones, que aprendan a sonarse y a ganarse la vida por si mismos primero. Que sepan lo que es fracasar muchas veces y ganar sin volverse soberbios o déspotas. Díganme a quien le han ganado o como se han comportado cuando fracasaron y ahí conversamos. Por mientras, filo.