Bachelet y su gobierno de amigos

Esta buena caricatura de Marco Cánepa me hizo mucha gracia y la copio acá para deleite de los regulares. Por fin terminé varias cosas que tenía pendientes, aborrezco que se me acumulen cuestiones atrasadas así es que para celebrar mi recuperado ocio, mientras fumo un buen puro "Don Lorenzo" aprovecharé de escribir algo que me venía dando vueltas hace tiempo, en fin ,aquí voy:

Como el cielo y la tierra
¿Se han fijado la enorme diferencia entre el primer y el segundo gobierno de Bachelet? Cuesta creer que se trate de la misma persona. Durante su primer gobierno era probablemente la política con mayor credibilidad del país y termino con aprobación cercana al 80%, pese a su mal desempeño durante el terremoto. Igual en las últimas presidenciales obtuvo alta votación incluso en las zonas más afectadas.

¿Y ahora? su credibilidad anda por el suelo con una aprobación alrededor del 30% y bajando. Caricaturas y chistes sobre su persona que antes habrían sido escándalo público hoy sirven para festinarse a su costa.

¿Que pasó?
Habría que ver cual cual es la diferencia importante entre los dos gobiernos que causó esta rápida caída, que empezó dañando a Bachelet luego a su coalición y finalmente a todos los políticos. Sin tanto preámbulo voy a partir con la conclusión: yo creo que la diferencia está en sus equipos de trabajo.

Líder simpática y manipulable
Enfrentados a distintas situaciones, las personas prefieren ciertos tipos de liderazgo sobre otros. yo he escrito antes que Bachelet era  considerada como alguien no muy capaz pero simpática, no conflictiva y sobre todo fácil de manejar. Por eso el apoyo abierto de la familia Luksic, los más ricos de Chile y bien ubicados entre los Fortune 500, de Awad, presidente de la Asociación de Bancos y de la mayoría de los grandes empresarios. La idea era tener una presidenta más o menos decorativa como fue su primer período, bien alineada a los intereses políticos y económicos que la apoyaban.

Para un país bien forrado, con la economía en piloto automático el liderazgo de Bachelet era ideal, siempre y cuando obedeciera fielmente a los patrocinadores que la colocaron en el poder. No pudo haber mejor presidenta pese a la subida de la cesantía, de la pobreza y caída del crecimiento, no importaba mucho porque los grandes siempre de alguna manera se arreglan. La estrategia de potenciar su simpatía personal funcionó perfecto en el primer período.

Pero las condiciones cambiaron
Como lo que llamaban "el capital político" de la presidenta creció en desmedro de los partidos, esto le permitió llegar a su segunda presidencia con mucho más libertad de acción. La estrategia de potenciar su carisma, que se suponía incombustible, hizo que esta vez no fuera manipulable como antes. Ahora si aplicó su intuición y armó un equipo de gobierno con gente de su círculo personal, sin imposición de los partidos. La personalidad de la presidenta, su tipo de liderazgo y su decisión de colocar a cargo a un equipo de su gusto y confianza, explican -pienso yo- todo lo que ha pasado en su primer año de gobierno.

Las simpatías personales
Como la presidenta no hizo carrera en los partidos políticos, probablemente no tenía conocimiento ni mucha gente de confianza de su sector y tuvo que recurrir a sus amigos y gente que le tincaba, dejando debajo de la mesa a muchos que tenían experiencia o trayectoria partidista. En su núcleo de confianza estaba Peñailillo (Interior), Arenas (Hacienda), Elizalde (Segegob) y Jorrat (SII interino). Los demás ministerios fueron concesiones a los partidos o amistades con menor nivel de confianza. Bachelet desmanteló el staff de "segundo piso" que quedó convertido en una sección de comunicaciones y manejo de prensa. El diseño, implementación y seguimiento de la estrategia parece que quedó a cargo de Peñailillo.

La opinión pública es irracional
No comparto -para nada- la indignación moral que parece recorrer por todo Chile con las cosas que han pasado ultimamente. No creo que existan actos terribles de corrupción como piensa la mayoría, es decir claro que existe corrupción pero no tiene nada que ver con lo que indigna hoy a la gente corriente. Me asombra ver como las personas cortan los pelos en cuatro y rasgan vestiduras por cosas que ni siquiera son delitos, me refiero a los casos Penta, Caval y Soquimich.

Tampoco diría que son buenas acciones, pero me asombra ver que la gente que se enfurece hasta la desesperación con vivezas o criolladas mientras no levantan ni una ceja al saber que gente de la actual presidencia desfalcó al estado en millones para financiar su campaña y cuando los pillaron un policía simplenente destruyó todas las pruebas. Es un enigma para mi ver cuan poco inteligentes pueden ser personas que incluso parecen cultas y bien informadas.

Error tras error
Pocas veces estoy de acuerdo con lo que piensa la mayoría, esta no es la excepción. Los casos que hoy se muestran como paradigmáticos de la corrupción no son nada más que torpezas, estrategias chapuceras, improvisación y una especie de "audacia" si podemos llamarla así, de hacer las cosas más torpes sin medir las consecuencias.

¿Como no pensaron que el intento de hundir a la UDI, presentándolos como corruptos defraudadores fiscales se les iba a volver en contra?, La operación Penta fue un error político monstruoso, porque la gente exigirá que más y más empresas sean investigadas por la famosa "falsedad ideológica", partiendo por Codelco desde luego, donde se han sacado miles de millones para campañas y enriquecimiento personal con trabajos ficticios, Lo de la Caja de Pandora no es un decir, es una realidad que si se explota nos vamos todos al diablo, institucionalmente y lo peor es que sería todo por nada, efecto indeseado de un tonto intento de manipulación.

Lo de Caval ni merece mencionarse, si la presidenta hubiese tenido una pizca de liderazgo y capacidad para manejar las crisis en lugar de esconderse y negar todo, ese desagradable asunto ya debería estar cerrado. Pero bueno, durante el terremoto ya vimos que el liderazgo en situaciones de crisis no es su fuerte. Tal vez lo mejor es que se esconda y se quee muda, quien sabe que pasaría si hablara.

La fiebre de reformas
Lo peor, que ya está produciendo un daño permanente es la fiebre reformista con que llegó de la mano de sus asesores intelectuales favoritos, unos pocos sobacos ilustrados de segunda fila, buenos para dejar caer nombres pero que nunca le ganaron a nadie. La pobreza intelectual de los asesores estratégicos actuales es increíble, tal vez sea mejor que haya desarmado el segundo piso, porque con esas lumbreras con poder nos habríamos fregado más de lo que ya estamos.

La reforma tributaria, brillante aporte de Jorrat -el mismo de la operación Penta- terminó con el fisco recaudando menos y los pobres pagando más todos pierden, todos descontentos, la aprobaron solo porque tenían los votos pero fue y será una reforma impopular. La reforma educacional, la reforma laboral. Desde 1990 todas las grandes reformas han sido un fracaso pero estas han sido el peor fiasco de todos. Ni siquiera en su inicio cuentan con aprobación popular. Improvisadas, torpes, se ve la mano de aficionados, como el ratón Mikey jugando al aprendiz de mago.

No es ideología, ni marxismo leninismo
Y ni siquiera hay ideología detras de esto, son apenas simpatías confusas, resentimientos, antipatías genéricas "anti fachos" y sobre todo incapacidad, amateurismo. Desde la presidenta para abajo. ¿cuanto podrá durar así? porque se está quedando más sola que Toribio el Náufrago, muchas ratas que se encaramaron al buque a última hora serán los primeros en darle la espalda y arrancar, partiendo por los comunistas y la "bancada estudiantil". Es cuestión de tiempo que se conviertan en furiosos críticos porque la hipocresía es su especialidad.

Quedan tres años y las ratas ya se están tirando al agua ¿que irá a pasar?. Sepa Moya. En fin, ya se me terminó el puro, será hasta mañana si el Pulento no dispone otra cosa.